El último fracaso de James: cómo sigue la autodestrucción de un '10' del Real Madrid

James Rodríguez ha vuelto a echarse a perder por los mismos problemas de siempre. La mala cabeza del colombiano, un ego desmedido y la falta de humildad castigan a un talento del fútbol que está en permanente autodestrucción. No aprende de los errores y su último fracaso es una discusión con el entrenador del Olympiacos que ha provocado la rescisión del contrato. James anuncia que deja el club griego de mutuo acuerdo, pero detrás de la decisión está una bronca con José Anigo, técnico que sucedió a Míchel en el equipo de El Pireo, por ser sustituido en el descanso del partido contra el Panathinaikos.

Una discusión ha provocado que James se quede, de nuevo, sin equipo. Al colombiano no le sentó bien que le quitaran del campo cuando el Olympiacos perdía (2-0) en el primer tiempo, reaccionó con rebeldía y no se presentó al entrenamiento del día siguiente. El club y el entrenador le pidieron que se disculpara y se negó. James decidió que lo mejor era marcharse si no tenía la categoría de estrella. Es la maldición de un futbolista con una enorme clase que echa su carrera abajo por tener una personalidad conflictiva. James no lleva bien la competencia y por este motivo ha chocado con la gran mayoría de entrenadores.

En Colombia tiene al país dividido. Los que le defienden dicen que es un genio y hay que liberarle del trabajo defensivo para explotar su talento. Los que le exigen que sea un futbolista más completo argumentan que le falta liderazgo y compromiso. James, según la mayoría de sus entrenadores, tiene un serio problema de actitud. Le cuesta sacrificarse y solo quiere jugar en la posición de mediapunta. Chocó con Rafa Benítez y Zidane en el Real Madrid, con Niko Kovac en el Bayern de Múnich y ahora con José Anigo en el Olympiacos. El único entrenador que ha conseguido sacar un buen rendimiento y comprometerle ha sido Carlo Ancelotti en su etapa en el Real Madrid, Bayern de Múnich y Everton.

Persecución policial

James lleva tres equipos diferentes en menos de tres años desde que jugó en el Everton, se marchó a Qatar para fichar por el Al-Rayyan y regresar al fútbol europeo para relanzar su carrera en Grecia con el Olympiacos. Ha sido imposible. Los problemas de James vienen de atrás, se veían venir de sus años en el Real Madrid, con una falta de madurez y episodios polémicos. Deportivos y extradeportivos. El más grave fue la persecución de un coche camuflado de la Policía Nacional que se presentó en la Ciudad Deportiva de Valdebebas del Real Madrid. Fue el primer día de enero de 2016. James, en un Audi R8, superó los límites de velocidad en la M-40 cuando se dirigía al entrenamiento. El coche policial le pidió que se detuviera, no lo hizo y se dio a la fuga. En la persecución se superaron los 200 km/h.

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Al Real Madrid llegó en 2014 como la Bota de Oro del Mundial y uno de los mejores talentos jóvenes, con solo 23 años. Para hacernos una idea cómo ha sido su carrera. Kroos fue otro de los fichajes que hizo el club en ese verano y solo hay que comparar cómo le ha ido al alemán y al colombiano. La falta de sacrificio, trabajo, competitividad, las lesiones y la inmadurez provocan que, con 31 años, el colombiano esté sin equipo.

La salida del Olympiacos es otro episodio más de un mal comportamiento, aunque el futbolista alega motivos personales para rescindir el contrato. Está sin equipo, es agente libre y se le abren mercados como Brasil y Estados Unidos para que siga su carrera. James tenía el propósito de triunfar en el Olympiacos y no lo ha conseguido, se va por la puerta de atrás, sin acabar la temporada, con 23 partidos jugados, 6 goles y 5 asistencias. Negoció para fichar por el Atlético de Madrid, pero Florentino se negó. James Rodríguez llegó a llevar el '10' en el Real Madrid y hoy da la sensación de ser un juguete roto.