P. �Qu� pas�?
R. Es fuerte lo que te voy a decir. Le dije que era la persona m�s mentirosa que me hab�a encontrado en el mundo del f�tbol y me agredi�. Vino hacia m�, me cogi� del cuello, nos apartamos y ya nos tuvieron que separar del todo. Como comprender�s, tras eso, yo no quer�a seguir ah� bajo ning�n concepto. Y aunque me daba pena, porque hice muy buena relaci�n con mis compa�eros y la afici�n me trat� de maravilla, yo no pod�a estar a gusto en un club en el que el director deportivo me agrede y nadie se pronuncia, ni se disculpa. Ni por la agresi�n, ni por todas las mentiras que iba filtrando. As� que perdon� mi contrato y me fui.
P. �Esto sucedi� en las oficinas del club?
R. Esto sucedi� despu�s de un entrenamiento, camino de los vestuarios.
P. �Y c�mo reacciona cuando un director deportivo le agarra del cuello?
R. Pues lo primero, apartarle y luego ya los de seguridad nos separaron del todo. Me consta que tanto Monchi como el club estaban pasando por momentos delicados, pero sobrepasar la barrera de la violencia no es algo que pod�a dejar pasar. Yo estaba contento en el Sevilla, jugaba siempre y aunque est�bamos pasando por un momento deportivo complicado, estaba convencido de que �bamos a salir adelante, como al final as� ha sido. Pero no es como se va diciendo en muchos sitios, sobre todo en la prensa de Sevilla, donde se dice que me baj� del barco. Ni mucho menos. Eso no entra dentro de mi mentalidad. He estado muchos a�os en el Real Madrid y nunca me he rendido, siempre he intentado pelearme un sitio, unas veces le he conseguido, otras veces no... Pero bajarme del barco en esta vida, nunca.
P. Cuando llega a casa... �C�mo es ese momento?
R. Me fui a casa muy dolido, porque al final... Yo fui al club porque me hab�a llamado Lopetegui, dici�ndome que me quer�a, que me quer�a, que hab�a buen equipo... Y yo fui encantado. Me baj� el sueldo cuatro veces con respecto a lo que ganaba en el Madrid y ya al llegar, gente del club me dice que Monchi no estaba de acuerdo con mi fichaje. Yo iba con la idea de jugar con el entrenador que siempre ha apostado por m� y de ganarme a la gente que no estaba tan confiada, pero sucedi� esto... Entonces, imagina c�mo llego a casa despu�s. Llevaba cuatro meses en Sevilla, despu�s de una mudanza con tres ni�os... Y entonces te ves de repente con las dudas de ver qu� va a pasar, a d�nde vamos a ir, los colegios... Es complicado, pero hay que ser fuerte y mirar hacia adelante.
P. �Ha llorado por todo esto?
R. No he llorado. Me da mucha pena, pero siento que tengo una carrera privilegiada, he disfrutado mucho del f�tbol, he ganado muchos t�tulos... Este es un deporte que me apasiona. �Que me da tristeza? S�. �Que me he sentido decepcionado? Tambi�n. Pero soy consciente de mi situaci�n de privilegio y de que hay personas con problemas verdaderamente serios. Intento poner el foco en eso. Tengo 31 a�os y a�n tengo ganas e ilusi�n por seguir jugando y estoy trabajando para ello.
P. Y despu�s de esto... Llega el mercado de invierno, est� a punto de fichar por el Union Berl�n y se rompe el �ltimo d�a. �Qu� pas�?
R. Buff... Al final va a parecer que s�lo pongo excusas.
Llegu� a Berl�n con todo cerrado y en 15 minutos me cambiaron la mitad de las cosas del contrato
P. Tranquilo, que vamos a hablar de todo.
R. Yo tengo culpa de muchas cosas, de haberme dejado llevar en algunas ocasiones, de bajar los brazos incluso en entrenamientos porque me sent� superado, pero lo que pas� en Berl�n... Fue tremendo. A las cuatro de la tarde del �ltimo d�a del mercado de fichajes, me llaman y me dicen que tienen un equipo para m�.
P. Le llama Jorge Mendes, que es su agente, �no?
R. S�. Me llama y me dice que tiene al Union Berl�n, de Alemania, con una muy buena oferta hasta final de a�o con opci�n a un 1+1. Le dije que en cinco minutos le llamaba y me puse a mirar un poco por encima y a consultar. Iban muy bien en la Bundesliga, estaban en Europa League, el contrato era bueno, el proyecto ten�a buena pinta... As� que acept�. Me mandaron el contrato y yo se lo reenvi� a mi abogada. Todo en orden. Prepar� la maleta y viaj� solo a Berl�n, ya que en cuatro horas era imposible organizar la mudanza de toda la familia, con dos ni�os tan peque�os... Y al llegar, me recibi� una persona del club. Estaba todo hecho. Me hago las fotos, un saludo a la c�mara... Lo t�pico. Y nos citamos para el d�a siguiente hacer el reconocimiento m�dico.
Ya por la ma�ana, en el coche hacia el hospital me dicen: "Al final no te podemos inscribir en Europa". Y contesto: "�Me lo dices ahora?". Su respuesta fue que lo intentaron hasta el final y que no pudo ser, as� que bueno... Paso el reconocimiento m�dico, que lo pas�, aunque mucha gente lo pusiera en tela de juicio... Una cuesti�n bastante absurda, ya que los m�dicos del Sevilla pueden corroborar que mi estado f�sico en ese momento era uno de los mejores de mi carrera. El caso es que paso el reconocimiento y de camino a firmar el contrato me llaman de nuevo. "Oye, que al final no es esta cantidad... Que es menos". Y yo, por segunda vez, vuelvo a aceptar esos cambios que no estaban en el preacuerdo por el que vol� a Alemania. Pero a los diez minutos, me llaman una tercera vez diciendo que la cantidad de la temporada que viene tampoco es la del contrato y que hay que revisarla. Y ya me plant�. Viaj� con muchas expectativas e ilusi�n a un equipo que juega Europa League y en quince minutos me hab�an cambiado la mitad del contrato. Contrato que estaba aceptado y revisando tanto por nosotros como por ellos. Era una falta de respeto. Yo no tengo 18 a�os, ni es el primer contrato que firmo, as� que dije que as� no firmaba. Si en doce horas en Alemania hab�a pasado todo eso, en un a�o no lo quiero ni pensar... Les dije que lo sent�a mucho y que me volv�a a Espa�a, que no era serio lo que estaba pasando.
P. Y se volvi�.
R. S�, me volv�. Y ah� sent� que despu�s de todo lo que hab�a pasado necesitaba desconectar, limpiar mi cabeza... Mentalmente no estaba preparado para otra mudanza, otro proyecto... Sent� que necesitaba parar, hacer terapia, ordenar mi mente, ordenar mi vida, mis pensamientos...
P. Entiendo que se puso en manos de un psic�logo.
R. S�. Es importante contar con profesionales que te pueden dar herramientas para saber gestionar los sentimientos, los conflictos que tienes contigo mismo y la gente que te rodea, con tu profesi�n... Y bueno, ah� estoy.