Jaime Polo | @lovacaine
En un mundo donde el brillo del oro ciega las almas y el polvo del camino cubre los sueños, Viggo Mortensen nos lleva de la mano a través de un viaje cinematográfico tan vasto como los desiertos de Nevada y tan profundo como los dilemas del corazón humano. "Hasta el fin del mundo" es mucho más que una película del oeste; es un himno a la libertad, una oda a la perseverancia y un retrato íntimo de los lazos que nos unen en los momentos más oscuros.
La trama nos sumerge en la vida de Vivienne Le Coudy, una mujer franco-canadiense de espíritu indomable, interpretada con gracia y convicción por la talentosa Vicky Krieps. Acompañada por Holger Olsen, un inmigrante danés encarnado magistralmente por Mortensen mismo, Vivienne se embarca en una búsqueda de una vida mejor en el inhóspito pueblo de Elk Flats, Nevada. Sin embargo, su destino da un giro inesperado cuando Holger decide unirse a la lucha por la Unión en la Guerra Civil, dejando a Vivienne a merced de la corrupción que acecha en las sombras del pueblo.
Con una actuación impresionante, una dirección magistral y una historia que llega al corazón, esta película deja una marca indeleble en el alma del espectador
Desde el primer fotograma, Mortensen nos sumerge en un mundo de vastos paisajes y personajes complejos. Su amor por el género del oeste se manifiesta en cada detalle, desde la autenticidad de los vestuarios hasta la majestuosidad de los paisajes naturales. Es evidente que Mortensen ha bebido de las fuentes clásicas del cine del oeste, pero lo ha hecho con un toque de originalidad y sensibilidad que lo distingue como un maestro del arte cinematográfico.
Durante el pase de prensa en los cines Lys de Valencia, Mortensen compartió su profundo vínculo personal con la película. Desde sus primeros recuerdos de montar a caballo a los cuatro años hasta la inspiración que encontró en la dinámica de su propia familia, "Hasta el fin del mundo" es, en muchos aspectos, un reflejo íntimo de su propio viaje emocional. Su pasión por la historia y los personajes se transmite en cada fotograma, en cada diálogo, en cada mirada cargada de significado.
Uno de los aspectos más destacados de la película es su estructura no lineal, una elección audaz que desafía las convenciones del género. Al centrarse en la perspectiva de Vivienne mientras Holger está ausente en la guerra, Mortensen nos invita a contemplar el poder y la resiliencia de la mujer en un mundo dominado por los hombres. Es un recordatorio conmovedor de que, incluso en los momentos más oscuros, el espíritu humano puede encontrar la fuerza para florecer.
Pero más allá de su brillantez técnica y narrativa, "Hasta el fin del mundo" es una celebración de la naturaleza y la conexión humana. En palabras de Mortensen, le gustaría pasar ese hipotético fin de los dias en la naturaleza, rodeado de caballos y bosques. Un lugar tranquilo en el que ver el tiempo pasar.
Con una actuación impresionante, una dirección magistral y una historia que llega al corazón, esta película deja una marca indeleble en el alma del espectador. El próximo 10 de mayo se estrena en todos los cines de España y seguro que tendra un gran recibimiento.
