El Barça busca insistentemente equipo para Ferran Torres de cara a la próxima temporada. El extremo valenciano, fichado en el mes de enero de 2022 a cambio de 55 millones de euros, fue importante durante el tramo final de la temporada de su debut, pero con la recuperación de Ousmane Dembélé y de Ansu Fati de sus lesiones, y sobre todo, con la llegada de Robert Lewandowski y Raphinha durante el verano de las palancas, sus oportunidades para disfrutar de minutos en cualquiera de las tres posiciones del frente ofensivo cayeron en picado.

De hecho, Xavi Hernández ha pasado a jugar, en los partidos de más exigencia, con un 4-3-3 donde Gavi es quien hace de extremo izquierdo, poniendo todavía más caros los minutos para los atacantes. Así pues, Ferran es quien lo tiene más complicado y, con la necesidad de generar ingresos, el FC Barcelona apuesta por una venta definitiva.

Ferran Torres durante un calentamiento en el Camp Nou / Foto: Europa Press
Ferran Torres, durante un calentamiento en la banda del Camp Nou / Foto: Europa Press

Ferran Torres, una puerta más cerrada

En los meses de primavera, el extremo de Foios estuvo muy vinculado con el Atlético de Madrid, pero el cambio de rumbo de Luis Enrique en su futuro deportivo acabó alejando al jugador del Cívitas Metropolitano. Ahora, con el mercado de traspasos estival abierto, el Barça también parece haber roto con el Aston Villa, club que preguntó por él, pero que no estaría por la labor llegar a los 42 millones de euros que necesitaría Joan Laporta ingresar para no cerrar la etapa Ferran Torres en el Barça con pérdidas.

Sea como sea, también sonó el Valencia como su posible nuevo equipo, pero, rápidamente, se desmintió esta alternativa, recordando que la salida del jugador de Mestalla fue por la puerta de atrás porque se negó a renovar y salió por un precio a la baja.

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Ferran Torres, durante un partido ante el Real Madrid durante sus años como valencianista / Foto: EFE

El conjunto che tenía en Ferran Torres una de sus jóvenes promesas más talentosas salidas de la cantera en los últimos años, pero en vez de renovar, aprovechó el último verano de su contrato para marcharse al Manchester City, que dejó 25 millones de euros en las arcas del Valencia, pareciendo esta una cifra muy inferior a su valía en ese entonces.

El Valencia tiene otros planes

Aunque fue el hoy extremo del Barça el relacionado con el equipo de Rubén Baraja, varios medios españoles informan de que el Valencia tiene otros planes. En este caso, estos serían los de hacer llegar a Mestalla un delantero centro puro, siendo Lucas Boyé la opción preferida y Rafa Mir el segundo nombre en la agenda.