La eliminatoria para Sudáfrica 2010 ha tenido cinco entrenadores holandeses en acción en todo el globo. Pim Verbeek, de Australia, y Bert van Marwijk, en Holanda, ya aseguraron un lugar con sus equipos en el torneo del próximo año.
Mientras Guus Hiddink ha dado a Rusia un lugar en el repechaje europeo para acceder al Mundial, el técnico de Hungría, Erwin Koeman, y el de Mozambique, Mart Nooij, están comenzando a aceptar que no llegarán a estar entre los 32 equipos que disputarán el torneo.
Al menos cinco entrenadores holandeses están en importantes clubes extranjeros, incluyendo a Louis van Gaal en el Bayern Munich alemán y Frank Rijkaard en el Galatasaray de Turquía.
La tendencia holandesa a ser francos y directos fue una de las características valoradas por los clubes y las selecciones nacionales, dijo Alfons van Marrewijk, profesor de antropología de negocios en la Universidad VU de Amsterdam.
"Esta franqueza es normalmente vista como ofensiva, pero en este contexto, se percibe como honestidad, la que es apreciada. Permite que un entrenador pueda decirle a un futbolista que no está jugando bien", señaló Van Marrewijk a Reuters.
"Hay una sensibilidad para aprender el idioma y adaptarse rápidamente a las costumbres de un país. Luego introducirán una forma diferente de jugar", agregó.
Cultura local
Hiddink, quien dirigió a Corea del Sur en el Mundial 2002 llegando a semifinales, cambió la forma de jugar en este país, y ahora es el entrenador de Rusia desde 2006, donde es conocido como 'el zar Hiddink' luego de alcanzar las semifinales de la Eurocopa el año pasado.
"Hemos comenzado a entrenar duro, con algunos métodos diferentes de lo que estaban acostumbrados. (Pero) al final se mostró que todos hicieron enormes progresos en tres semanas", dijo Hiddink a la televisión holandesa el año pasado, cuando Rusia se estaban preparando para la Euro.
La adaptación a la cultura local es igualmente importante.
Verbeek cantó el himno nacional de Australia en directo por televisión después de haber clasificado para la Copa del Mundo de 2010, mientras que Van Gaal, vestido con pantalones de cuero, participó este mes en el Oktoberfest de Múnich este mes.
Holanda, donde el fútbol es el deporte favorito, ganó fama de potencia en la década de 1970, cuando el equipo llegó a la final del Mundial de 1974 contra Alemania Occidental, bajo la dirección del técnico Rinus Michels y del capitán Johan Cruyff.
Ese equipo se hizo conocido como la 'Naranja Mécanica', por su perfecto funcionamiento dentro del campo de juego. Cuatro años después, Holanda perdió otra final de un Mundial, esta vez ante Argentina en Buenos Aires.
En 1988 Holanda gano la Eurocopa, nuevamente bajo el mando técnico de Michels.
En la actualidad, Holanda es tercera en la clasificación mundial de la Fifa, detrás de Brasil y España.
El estilo creado por Michels, conocido como 'fútbol total', se centraba en movimientos rápidos y en la versatilidad de las posiciones de los jugadores en el campo, personificado en la figura de Cruyff.
"Nuestros equipos han jugado, desde entonces, de una manera diferente, con visión de ataque, creatividad y tratando de dominar el partido", dijo Remy Reynierse, profesor de entrenadores en la asociación holandesa de fútbol (KNVB, por sigla en holandés).
Estilo arriesgado
Con un gran número de entrenadores profesionales y una cifra limitada de clubes en el país, muchos técnicos holandeses se van al extranjero, ayudados por los contactos de la KNVB.
El estilo del fútbol holandés es popular en todo el mundo, dijo Frank van Eekeren, asesor de la Utrecht School of Governance. "Es arriesgado, de ataque y divertido de ver".
Los entrenadores holandeses prestan poca atención a la situación de un jugador, sino que se centran en el equipo, dijo Reynierse.
"Un técnico holandés se sienta y pregunta: '¿Qué creen que debemos hacer?'. Eso es algo que los jugadores no ven en otros países. Queremos que todos estén involucrados", explicó.
Sin embargo, no todos los técnicos holandeses han tenido éxito en el extranjero. En Polonia, Leo Beenhakker fue despedido el mes pasado después de que la selección no pudo clasificar para la Copa del Mundo, mientras que en Kazajistán echaron a Arno Pijpers el año pasado.
Sin embargo, Bélgica contrató el mes pasado a Dick Advocaat después de que la selección no pudiera conseguir la clasificación para Sudáfrica, pidiéndole que empezara con los preparativos para la eliminatoria para la Eurocopa 2012.
El éxito de los jugadores y entrenadores holandeses en el extranjero, desde Cruyff a Rijkaard, de Dennis Bergkamp a Hiddink, ha convencido a los equipos extranjeros para contratarlos, dijo Van Marrewijk.
"El 'equipo naranja' tiene un nombre muy grande. En el extranjero, siempre se puede iniciar una conversación acerca de Cruyff. El fútbol holandés es bien conocido, es como una marca que se vende", concluyó.
Amsterdam
Reuters