Enrique de Inglaterra: “Empecé a consumir drogas de forma recreativa y descubrí lo buenas que eran para mí” | Gente | EL PAÍS
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Enrique de Inglaterra: “Empecé a consumir drogas de forma recreativa y descubrí lo buenas que eran para mí”

El duque de Sussex, que sigue de gira con la presentación de sus memorias, ‘En la sombra’, compartió en una charla con el médico Gabor Maté su relación con los psicotrópicos. Sus declaraciones han levantado ampollas entre los activistas antidrogas en el Reino Unido

El príncipe Enrique de Inglaterra, en el cortejo fúnebre por Isabel II el 19 de septiembre en Londres.
El príncipe Enrique de Inglaterra, en el cortejo fúnebre por Isabel II el 19 de septiembre en Londres.Justin Setterfield (Getty Images)

El príncipe Enrique de Inglaterra aprovecha cualquier ocasión para seguir revelando más detalles de su vida, como ya hizo en sus memorias, publicadas en enero, y sacarle rédito económico. En una conversación con el médico y escritor canadiense Gabor Maté, el duque de Sussex desveló su relación con drogas como la cocaína, el alcohol y la marihuana, y cómo en concreto esta última se convirtió en su salvación en un momento difícil de su vida. “Empecé a consumirla de forma recreativa y luego me di cuenta de lo buena que era para mí”, confesaba la noche del sábado en la entrevista, retransmitida en directo a través de Zoom, a la que tenían acceso aquellos espectadores que hubiesen pagado 19 euros.

“Me trajo una sensación de relajación, alivio y comodidad. Diría que es una de las partes fundamentales de mi vida, que me ayudó a lidiar con los traumas y los dolores del pasado”, añadía Enrique en la charla con Maté. A aquellos que pagasen por ver la conversación con el doctor, además, se los obsequiaba con un ejemplar de En la sombra y podían adquirir también el último libro del médico.

No es la primera vez que el duque de Sussex habla abiertamente sobre el consumo de estupefacientes. Enrique ya admite en sus memorias haber tomado cocaína cuando era adolescente, haber fumado hierba y probado hongos alucinógenos en la casa de la actriz Courteney Cox, que recientemente lo negó en una entrevista en la revista Variety.

Meghan Markle y el príncipe Enrique de Inglaterra en un foro de jóvenes líderes en Mánchester (Reino Unido), el 5 de septiembre.
Meghan Markle y el príncipe Enrique de Inglaterra en un foro de jóvenes líderes en Mánchester (Reino Unido), el 5 de septiembre.OLI SCARFF (AFP)

El príncipe Enrique, además, admitió que para él el consumo de alcohol y cocaína habían sido “algo más social” y se quejó de la presión de los compañeros en su época de estudiante en torno a la bebida. Las nuevas declaraciones del hijo menor de Carlos III ya han levantado algunas ampollas entre los activistas antidrogas en el Reino Unido. “Los mensajes de que las drogas pueden ayudarte a sobrellevar situaciones difíciles son preocupantes, ya que pueden influir en el comportamiento de los jóvenes, que son mucho más vulnerables”, declaraba Fiona Spargo-Mabbs, portavoz y fundadora de la asociación contra la drogadicción Daniel Spargo-Mabbs Foundation, en una entrevista al diario británico The Times.

El hijo menor de Carlos III también quiso hablar de lo que supuso para él y su esposa, Meghan Markle, además de para sus dos hijos, Archie y Lilibet, de tres y un año, independizarse de la familia real británica en 2020. “Perdí bastante, pero también he ganado mucho y me siento agradecido al ver crecer a mis hijos aquí y ver cómo son”, explicaba sobre su mudanza a Canadá, para posteriormente trasladarse a Estados Unidos. “No veo cómo eso hubiera sido posible en ese entorno”, añadía al referirse a cómo Archie y Lilibet crecen felices ahora en California. El duque de Sussex también admitía que su experiencia personal le ayudará a ser mejor padre al haber aprendido lo suficiente como para no transmitir ninguna “experiencia negativa” a sus descendientes.

Otra confesión que se atrevió a hacer Enrique de Inglaterra en la misma entrevista ha sido cómo una pelea con Meghan Markle, con quién se casó en 2018, le ayudó a darse cuenta de que necesitaba terapia y apostar por su relación. “Estaba atrapado en este mundo y ella, que era de un mundo diferente, me ayudó a salir”, admite el duque.

El último desplante de la familia real británica al príncipe Enrique de Inglaterra y Meghan Markle ha sido la petición expresa del rey de Inglaterra para que desalojen Frogmore Cottage, la casa que ocupaba la pareja antes de trasladarse a América, para así permitir que el príncipe Andrés viva allí, según adelantó en exclusiva el periódico The Sun. Queda por ver si los duques de Sussex acudirán a la coronación como monarca de Carlos III, que se celebrará el 6 de mayo en Londres, y a la que, según sus portavoces, han sido invitados.

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