El rey Arturo (2004), de Antoine Fuqua

Los aficionados a las grandes reconstrucciones históricas disfrutarán de las espectaculares batallas, rodadas con un ejército de extras, sin recurrir a la computadora como ocurría en las recientes Troya o en las tres entregas de El Señor de los Anillos. Esto permite al realizador Antoine Fugua lucirse situando la cámara más cerca de los participantes en la refriega. Además, lo cierto es que los parajes irlandeses en donde están rodadas, le dan un aire medieval a estas escenas, reforzado por la banda sonora de Hans Zimmer. La mejor batalla, la del lago helado, done Arturo, acompañado de un reducido número de fieles, debe enfrentarse a una legión de bárbaros sajones.

El DVD extendido incluye 15 minutos de metraje adicional, doblando por el mismo equipo del resto de las escenas. Sobre todo, la nuevas secuencias incluyen detalles sangrientos de las batallas, lo que les da un carácter más realista. Además, hay una tensa escena en que el obispo reúne a los hombres de Arturo para explicarles la misión, y otra en que hacen un alto en el camino para conversar al fuego.

Una de las sorpresa de la película son los actores, poco conocidos para el gran público en el momento del estreno, a excepción de Keira Knightley (Piratas del Caribe, Love Actually). Fuqua explica el por qué de esa elección a raíz del papel protagonista de Clive Owen: “Si pones a una gran estrella en ese papel, uno espera que Arturo haga lo mismo que él. Pero si le das el papel a una cara menos conocida, realmente no sabes lo que les va a pasar a los personajes. Son mucho más humanos”.

El guionista David Franzoni (Gladiator) explica que para escribir el guión contó con un nombre y una batalla. “El nombre es Lucius Artorius Castus y la batalla es la de Badon Hill. Esta batalla cambió el curso de la historia de Gran Bretaña y creó una leyenda que ha ido pasando de generación en generación y se ha ido reinventado constantemente. Creo que era una gran oportunidad para retomar la historia e intentar conocer la verdad sobre estos personajes, saber quiénes eran y contar su historia de manera realista”.

También el director Antoine Fuqua, habla de su concepción de la historia y de la creación del personaje principal de la película: “Está basada en un hecho histórico, no es tan fantasiosa como otras versiones. Pensé que sería apasionante retratar al Rey Arturo como no lo habíamos visto nunca. Lo que más me atrajo fue que la película estaba basada en la realidad. Tras esta película hay un trabajo considerable de investigación histórica. Es emocionante descubrir que ese héroe existió realmente.”