Reseña | La casa del dragón

Game of Thrones fue un show que definitivamente marco época, toda una generación de televidentes, lectores y fans de la fantasía se unieron para alabar la calidad de la serie, la cual destacó enormemente con aspectos de guion, cinematografía, la crudeza de su historia y contando con niveles de producción pocas veces visto a nivel televisivo. La canción de hielo y fuego, serie de libros de la cual se adaptó el show, se transformó rápidamente en un icono popular a lo largo de los ocho años que estuvo al aire.

Pero todo esto se vio manchado debido a unos de los finales más infames en la historia de la televisión, esto debido a la falta de material base de los cuales adaptar la historia como también por la urgencia que tuvieron los showrunners de finalizar la serie lo antes posible y continuar con otros proyectos, lo que provocó una debacle monumental en la calidad del show. Fans decepcionados presenciaron en vivo la ruina de uno de los mayores hitos televisivos jamás hechos. El tiempo invertido, se sintió solo una pérdida de este y junto con los duros golpes que recibió de la crítica especializada, terminaron de enterrar por completo el interés de la audiencia en el mundo de Poniente.

Luego de un par de años y con las mareas más calmadas, HBO anunciaría una precuela de Game of Thrones, la cual tomaría como material base el libro de Fuego y Sangre, que nos sitúa 200 años antes de los eventos de la serie original, contando la historia de la dinastía Targaryen en su máximo auge de poder y su estrepitosa debacle.El anuncio, como era de esperarse, fue recibido con gran escepticismo por parte del público general. Las dudas sobre si los errores del pasado se repetirían no se hicieron esperar y muchos cuestionaban la calidad de este nuevo show incluso antes de su estreno.

El 21 de agosto de 2022, fue la fecha escogida para sacar todas las dudas de encima. La casa del dragón aterrizaba por las pantallas de HBO y la recepción de la audiencia y la crítica especializada fueron en su mayoría de sobresalientes. La primera temporada fue excelente. En tan solo 10 capítulos, logro revitalizar el interés mío y de muchas personas en el mundo creado por George R. R. Martin. El show es lo suficientemente valiente para tomarse su tiempo en contar la historia y cementar los conflictos a futuro de forma muy sólida. Personajes carismáticos que caminan en la delgada línea de la ambigüedad moral, una historia cruda y atrapante, además de una más grande escala que la serie original. Una creación de mundo exquisita y los siempre fascinantes juegos de poder que tanto gustan a los fans del genero de fantasía vuelven en todo su esplendor logrando captar la sensación de los momentos peak de Game of Thrones.

Debido a este éxito, la confirmación de una segunda temporada fue inminente y la noticia ya era oficial, el mundo de Poniente estaba de vuelta como en sus mejores días y después de dos años de espero, numerosos trailers y una ingeniosa campaña publicitaria, se estrenaba el 17 de junio de 2024, la segunda temporada de La casa del dragón. Y hoy, ya con su último capítulo al aire, nos toca recapitular. Luego de presentarnos los conflictos principales que se vendrían a futuro, la primera temporada terminaría con un evento que cambiaría por completo la narrativa de la historia, donde los mensajes a través de cuervos pasarían a segundo plano y solo queda el fuego y a sangre.

En esta segunda temporada, en sus primeros capítulos, se ahonda en como los personajes lidian con las consecuencias de dicho evento. La presión y la tensión están en un punto caso incontrolable en donde cada paso en falso y decisión pobre puede significar graves consecuencias y una tragedia mayor (como vemos que sucede). En esta oportunidad la serie decide darles un respiro a algunos de los personajes más relevantes de la primera temporada, ya sea para mostrarlos en facetas que desconocíamos, mientras otros toman un foco más protagónico para servir a la narrativa y brillar en todo su magistral y mórbido esplendor.

El show en ocasiones, suelta un poco el pie del acelerador para darnos interacciones y momentos entre personajes, e ir enlazando tramas que en primera instancia podríamos no verles relevancia. Muchas veces se puede caer en el llamado “relleno “. Sí, todos lo conocemos y todos lo odiamos. Que un show nos haga sentir que perdemos nuestro tiempo mostrando tramas sin ninguna recompensa a posterior, es en mi opinión uno de los mayores errores en el medio del entretenimiento audiovisual, y aquí La casa del dragón queda 50/50. Muchas subtramas si son resueltas y tienen recompensa en esta temporada. Pero muchas otras quedan al debe, y eso no sería un problema si la temporada hubiera terminado en un punto de inflexión más álgido. Debido al corte de presupuesto por parte de HBO, esta temporada cuenta con tan solo 8 capítulos, a diferencia de los 10 de la anterior, y se nota. Esta temporada de siente como un gran Set-up para la siguiente pero poca recompensa. Creo que el show se hubiera beneficiado enormemente de uno o dos capítulos más para así, culminar la temporada en punto más crítico por el lado argumental, tal y como lo hizo la primera. ¿Cuáles serán las razones de esta decisión? ¿Puede ser el intento de estirar la narrativa para así producir más temporadas? No lo sé. Pero esto hace que, a pesar de contar con grandes e impactantes momentos, también tendremos otros donde se nota una inseguridad de parte de los guionistas con qué hacer con algunos de los personajes principales, alargando sus arcos argumentales de forma innecesaria.

También cabe menciona, que al ser una adaptación de un libro bastante extenso y con un fandom muy acérrimo, los inevitables cambios, ya sea narrativos o de caracterización entre una versión y otra pueden no gustarle a todo el mundo. Yo en este tema también me encuentro en un punto medio donde creo que algunos cambios fueron necesarios para el ritmo que requiere una adaptación televisiva, mientras que otros cambios, sobre todo argumentales y situacionales no les veo justificación alguna. Esto puede ser un punto muy subjetivo, y variar dependiendo de cada persona, pero es importante mencionarlo.

Hablando de temas que brilla esta segunda temporada, al igual que la primera, son los altos niveles de producción y arte técnico que posee. El uso de localizaciones reales mezclado de forma invisible con el gran trabajo de CGI nos regalan uno de los ambientes medievales y Grimdark mejor logrados en cualquier medio. El uso de centenares de extras y espectaculares sets hacen de cada toma un festín a los ojos del espectador. Esto acompañado de una cinematografía a nivel sobresaliente y paleta de colores que capta de forma sublime este crudo mundo.También alabar las actuaciones del elenco principal y secundarios, que se encuentran a un excelente nivel, en donde se les da la oportunidad a personajes que tuvieron poca pantalla en la primera temporada y brillar en esta segunda. El dialogo sigue siendo uno de los puntos fuertes, y la tensión de estos esta muy bien lograda gracias al gran trabajo de cada uno de las personas que conforman este gran elenco.

Pero sin lugar a dudas los que se roban el show cada vez que están en pantalla, son como no podía ser de otra forma, los dragones. Majestuosos seres que cuentan cada uno con una fisionomía y personalidades únicas, que los vuelven en mi opinión la mejor representación de estas criaturas que se ha visto en cualquier medio, regalándonos algunos de los momentos mas espectaculares de esta temporada.

En conclusión, siendo la segunda temporada un bajón en cuanto a nivel argumental y de impacto si la comparamos con la primera, creo que esta muy por encima de la gran mayoría de producciones actuales, y que, si logran resolver de manera satisfactoria los puntos establecidos en esta temporada a futuro, contaríamos con una de las mejores series de fantasía de todos los tiempos. Grandes momentos entre personajes, grandes batallas y traiciones están a la orden de cada capítulo. Solo queda que la espera no sea tan larga en esta oportunidad y que nuestra paciencia sea debidamente recompensada.