LA PENA PUEDE OSCILAR ENTRE LOS 4 Y LOS 12 AÑOS
Como era de esperar, y como ya habían declarado las partes antes de llegar al juicio, acusación particular, popular y defensa piden penas distintas para el futbolista. La defensa reiteró la voluntad de que se le conceda la absolución. En el caso del Ministerio Fiscal, este indica que "los hechos no son merecedores de la pena mínima" -hay que tener en cuenta que la Fiscalía pedía 9 años de cárcel-. Por su parte, la denunciante dejó claro antes del juicio que reclamaba 12 años, la pena máxima.
Tal y como se estableció, para preservar la privacidad de la identidad de la denunciante, su declaración sería a puerta cerrada. Nadie más que quienes estaban presentes en la sala pudieron escuchar su testimonio. Sin embargo, en las conclusiones tanto del Ministerio Fiscal como de la acusación particular se han citado algunas de sus palabras. La frase más destacada, quizás, ha sido la mencionada por su abogada, que confirmó que la denunciante dijo que, antes de lo ocurrido, ella "era feliz" y que "denuncie por desgracia".
Tal y como se esperaba, la baza de la defensa pasaba por la intoxicación etílica. Eso es exactamente lo que ha utilizado Alves en su declaración, afirmando que consumió "1 botella y media o 2 de vino y varias copas de whisky" él solo. La acusación particular y el Ministerio Fiscal señalan, no obstante, que esto "no se puede probar" y que no debería servir como atenuante.
Si bien es cierto que la duración de esta tercera sesión ha tenido una duración aproximada de 6 horas y media, exactamente la misma que tuvo la sesión del lunes, esta ha sido significativamente más larga. Hay que tener en cuenta que, a diferencia de la primera sesión, en este caso tan solo ha habido una pausa de 30 minutos.
Después de una larga jornada de 6 horas y media, y tras tres días de procedimiento, el juicio de Dani Alves ya ha terminado en la sección 21 de la Audiencia Provincial de Barcelona. El caso, pues, queda ahora visto para sentencia. Una sentencia que, según dejaba entrever la sala, no tardará mucho en salir.
Una vez terminadas las conclusiones por parte de la defensa, tal y como está estipulado, Dani Alves tenía la opción de hacer un comentario al final del juicio. El futbolista se ha sentado en la silla de los testigos pero ha declinado la oferta, por lo que no añadirá nada más tras su declaración.
"La denunciante pudo sentirse avergonzada de sí misma por haber accedido a mantener relaciones íntimas. Cualquier persona en la posición de nuestro defendido hubiera interpretado lo mismo, que había consentimiento y que el deseo sexual era mutuo. Pedimos a este tribunal que no ceda ante la presión mediática, que sean valientes y que demuestren que esto no es un juicio público. Por todo ello solicitamos una condena absolutoria", termina la defensa.
"El relato de la víctima, no solo antes sino durante y después, no se sostiene y ha quedado vacío de toda verosimilitud. Su declaración no reúne lo requisitos necesarios para ser considerada una prueba de cargo. Debería emitirse una sentencia absolutoria. En el caso de que no sea así, deberían aplicarse tres atenuantes: atenuante por la reparación del daño, por la intoxicación etílica y atenuante analógica por la vulneración del derecho fundamental del representado", reclama la abogada de Dani Alves.
Si las acusaciones particular y pública afirmaban que la posición de las huellas halladas en el baño del reservado de Sutton corroboraban la versión de la denunciante, la defensa sostiene totalmente lo contrario. "La huella de la zona cubital de su mano derecha, que aparece en el lado izquierdo de la cisterna del baño, es incompatible con la posición del relato de la víctima. La única explicación lógica y racional de esta huella es la de la versión ofrecida por el señor Alves".
"Es la denunciante la que, hasta en dos ocasiones, cuando el señor Alves cesa en el juego sexual, lo retoma. Los actos evidencian que la sexualización del comportamiento entre la denunciante y mi representado era mutua. Es la denunciante la que se gira para pegar sus nalgas al señor Alves, estamos ante un acto explícito de consentir. La colocación de su mano en el pene del defendido fue voluntaria. Es cierto que coge la mano de su prima, pero para partirse de risa", destaca la abogada del futbolista.
"Cuando se le dijo que las pruebas confirmaban que había habido una felación, la denunciante expresó con sorpresa que 'no lo sabía'. Estamos ante un relato mediatizado. Su amiga puso en boca de la denunciante datos que ella no había dicho, como que hubo penetración. La denunciante es incoherente en cómo, cuándo y en qué circunstancias accedieron al reservado. No dice la verdad, en relación a la prueba documental. Ni pasa un rato, ni se les tiene que insistir ni rechazan la invitación. Sabía que era Dani Alves. Intentó hacerle una foto. Si no sabía quién era, ¿para qué quería hacerle una foto?", sostiene la defensa.
"En su última declaración en el juzgado de instrucción, el procesado dijo que fue testigo de las ganas que tenía mi representada. No podemos hablar de que haya habido un intento de reparar el daño. El procesado se ha emocionado cuando dijo que se enteró de las noticias por un medio de comunicación. No ha habido ninguna vulneración del derecho fundamental del acusado. No se puede alegar una falta de neutralidad por parte del sistema judicial. Lo que se ha intentado tener es, con todo el respeto, privilegios por parte del acusado"
"Me da igual que mi representada 'perreara', como ha explicado el procesado. En el momento en el que entró en el baño, ella dijo 'no'. Lógicamente, el procesado sabía que no quería. Es un acto de humillación. Estamos hablando de una chica de 23 años. En el visionado de las cámaras, se ve como ella le aparta la mano al procesado y sigue bailando con su prima. También se ve, en una imagen muy nítida, como ella se desploma y rompe a llorar en el pasillo", explica la abogada de la denunciante.
Una vez terminadas las conclusiones del Ministerio Fiscal, quien tomaba la palabra era la acusación particular, que volvía a hacer referencia a la denunciante. "A la denunciante le ha sido muy difícil llegar a este juicio. Muy difícil. Siempre ha tenido un relato espontáneo, ya desde la discoteca. No entró en detalle porque no podía. Lo único que decía era 'me ha hecho mucho daño, se ha corrido'. Lo que pasó en el baño es el único lugar de la discoteca en el que no hay cámaras. Por eso es tan importante la declaración de la víctima, que ha tenido un relato espontáneo, pero constante. Ella decía 'yo era feliz, me encantaba mi trabajo, denuncié por desgracia'.
"Los daños morales, en este caso, al ser tan mediático, exceden los normales en un caso de agresión sexual. En cuanto a la pena, entendemos que los hechos no son merecedores de una pena mínima. La gravedad, el uso de la violencia, el desprecio hacia la víctima... No son merecedores de la pena mínima", considera la fiscal, descartando la posibilidad, a su juicio, de que se le aplique una pena de 4 años.
"No hay ni una prueba en la que se derive qué cantidad de alcohol había bebido. Hablan de que consumieron varias botellas pero no se sabe quién fue quien se las bebió. Es completamente imposible saberlo porque no tenemos pruebas. En las cámaras se ve salir a Alves y a Bruno en un estado completamente normal. Se le ve, incluso, saludando a una persona, por lo que tenía conocimiento. Entendemos que no queda acreditada la cantidad de alcohol que consumió el señor Alves", certifica la fiscal.
"Alves ha dado tantas versiones en este proceso... Me ha llamado la atención que ha empezado a comentar que a él le hizo una felación y que se apartó para eyacular. Cuando la defensa se lo ha recordado ha sido cuando ha introducido lo de la penetración. Me ha llamado la atención este olvido. El cambio de versiones ha sido llamativo", destacan desde el Ministerio Fiscal.
"El hecho de que sufre estrés postraumático yo creo que queda totalmente acreditado por lo que han explicado los forenses. El hecho de que no tomara algún día la medicación o dejase de ir al psiquiatra ella explicó que fue porque pensaba que podía ella sola, decía que era una mujer fuerte. De todos modos, al final no ha sido así, pues ha tenido que acabar medicándose", sentenciaba la Fiscal, contraria a la versión que dio esta tarde la doctora Navarro, psicóloga forense.
"Es tremendamente injusto acusarla de algo porque ella no buscaba eso. Por el hecho de que una mujer acepte una copa o ir a un reservado, no implica, evidentemente, que hubiera deseo sexual. Igual que aceptar una copa tampoco implica consentimiento. Hizo lo que pudo, no luchó, pero entiendo que se quedó congelada, otra de las formas habituales de actuar en estos casos, tal y como nos han explicado los forenses. Que no tenga lesiones vaginales, por nuestro conocimiento, no sería la primera víctima que no las presenta", asegura la fiscal,
"La colocó contra la tapa del váter y la penetró hasta eyacular, lo hizo dentro. Lo notó por la relajación que sintió cuando dejó de penetrarla. Fue muy valiente, muy fuerte. Cuando la denunciante estaba en el suelo, Alves le propinó varias bofetadas y le dijo 'me tienes que decir que eres mi putita. Cuando le estaba penetrando, ella se dejó ir porque quería que eso acabara ya. Ha sido un relato duro, por la propia agresión y por todo lo que ha vivido después", destacaba el Ministerio Fiscal.
"Explicó que estuvieron bailando, ella habla de que Alves fue 'pesado', las testigos lo definen como 'baboso'. En las cámaras se ve como ella le aparta el brazo y le coge la mano a su prima. Eso es exactamente lo que contó la denunciante. Tuvo muchísimas lagunas, es algo completamente normal en el recuerdo que mantiene una víctima en sobre una experiencia traumática", aclaran desde el Ministerio Fiscal.
La primera de las conclusiones llegaba de la mano del Ministerio Fiscal que, por su parte, indica que "el relato de la denunciante es absolutamente creíble. Hay indicios. Ha mantenido la misma versión en todo momento. Aunque la defensa hablaba de contradicciones, nosotros hablamos de omisiones, no de contradicciones, y en cualquier caso estas no perjudicaban al señor Alves. La víctima explicó que, voluntariamente, accedió a ese lugar. No sabía que era un baño. Incide mucho en el 'voluntariamente' porque ella se sentía culpable", explica la fiscal.
Mientras relataba cómo se dieron los hechos, según su versión, en el baño del reservado de la discoteca, el jugador no ha hecho mención en ningún momento a la penetración, aspecto clave en el caso. No obstante, lo que sí ha reconocido es que "ella estaba encima mío y la aparté para no eyacular en su sexo".
"Cuando pagué la indemnización en agosto estaba prácticamente arruinado. Solo me quedaban 50.000 euros en la cuenta, y tenía una deuda con Hacienda de medio millón de euros", reconocía el futbolista. Así terminaba su declaración que, como ya indicó antes de empezar con el relato, solo dio respuesta a las preguntas de la defensa.
Cuando todavía no había finalizado su declaración, el futbolista no ha podido contener las lágrimas y ha roto a llorar. Tras una pequeña pausa, Alves seguía con su relato sobre lo sucedido. "Cuando llegué a casa, mi esposa estaba durmiendo en la cama y me dormí. Había bebido mucho. Lo que he declarado ahora es lo mismo que declaré en la segunda declaración institucional. En la primera no mencioné lo de la felación porque pensé que mi mujer no me podría perdonar", explicaba el brasileño, algo que coincide con una de sus anteriores versiones, en la que aseguraba que mintió para proteger su matrimonio.
"Pensaba que no vendría, pero al final entró en el baño. Nos empezamos a besar. Me empezó a bajar los pantalones, yo le ayudé. Me senté en la tapa del váter y se puso de rodillas para hacerme una felación. Estuve todo el rato sentado, solo me levanté para correrme fuera de su sexo. Después de la felación, que fue prácticamente todo el rato que estuvimos en el baño. Luego salí porque no quería que nos vieran salir juntos del baño. Ella no me dijo que se quería ir. Yo no le impedí que saliera. No la abofeteé, ni la cogí del pelo. No soy ese tipo de hombre, no soy violento. Tampoco quise practicarle sexo oral. Ella no me dijo nada, estábamos disfrutando los dos, nada más. No me dijo que no quería", ha afirmado Alves en su declaración.
"La denunciante y yo comenzamos a bailar más pegados, lo pasamos bien, disfrutamos entre todos. Ella empezó a bailar más pegado a mí, a 'perrearme', empezamos a rozar nuestras partes. Ella empezó a tocar mis partes. Cuando me tocó, pensé que había una tensión sexual y hablé con ella para que fuéramos al baño. No le tuve que insistir", confesó el futbolista.
"Solamente hay un baño en la zona VIP. Lo sé porque soy cliente frecuente de Sutton. La puerta de la suit estaba abierta. Cuando llegamos al reservado, estuvimos bailando durante un rato. Primero vinieron dos chicas y estuvieron allí un rato bailando. Después, invitaron a las otras tres chicas. No detecté que ellas estuvieran incómodas con nosotros. Estaba cercano a ellas, soy una persona muy cercana, pero siempre desde el respeto. Yo creo que las chicas sí sabían que yo era Dani Alves, jugador del FC Barcelona", declaraba Alves.
Como se esperaba, la versión del futbolista vuelve a poner en primer plano el consumo de alcohol. "El día 30 quedé con mis amigos para ir a comer a la Taberna del Clínic. Llegamos sobre las 14:30 de la tarde. Hacía mucho tiempo que no nos veíamos y la comida se alargó. Bebimos 5 botellas de vino y una botella de whisky. Son las que aparecen en el ticket del restaurante. Más o menos, yo bebí 1 botella y media de vino y varias copas de whisky. Cuando salimos del restaurante, fuimos al Nuba y tomamos una ronda de Gin tonic. Para llegar hasta allí, fuimos en coche. Conducía Bruno, porque yo había bebido bastante y no podía conducir", explicaba Alves.
Cuando se cumplen las 4 horas de juicio, arranca la declaración del futbolista, que solicitó hacerlo en último lugar. Alves solo contestará a las preguntas de la defensa.
Mientras se siguen revisando las pruebas documentales, hay quienes ya empiezan a dar algunas pistas sobre cómo podría ser la declaración de Dani Alves. Según apunta 'TV3', el futbolista respondería solo a las preguntas de la defensa, no a las de la acusación particular que, por su parte, indica que hará constar en el informe las contradicciones pertinentes.
En estos momentos, ya se han superado las 3 horas y media de esta tercera sesión del juicio. Por el momento, los únicos en testificar han sido el equipo de médicos, entre los cuales se encontraban forenses y otros especialistas, y dos psicólogas que examinaron a Alves. Tras ello, empezó una revisión de pruebas documentales que todavía sigue en marcha. Si el orden establecido no se modifica, el siguiente en sentarse en la mesa de los testigos será el propio Dani Alves.
Aunque nadie más que las personas que se encuentran en la sala pueden ver las imágenes de las cámaras de seguridad, visionado que se está llevando a cabo en estos momentos, lo que sí podemos ver es que Dani Alves prácticamente no aparta la mirada de la pantalla en la que se están reproduciendo los vídeos. El futbolista no ha dejado de prestar atención a las grabaciones, de las cuales se ha visionado ya cerca de una hora en total.
Pese a que estaba estipulado que el juicio contra Dani Alves, acusado de un delito de agresión sexual, terminara hoy, se ha conocido que el tribunal podría dejar las conclusiones para mañana. Tal y como han explicado en TV3, la Audiencia de Barcelona ha asegurado que habría una sala libre a partir de las 15h este jueves. No obstante, quien seguro subirá al estrado hoy será el futbolista, que dará su versión de los hechos.
Así como la declaración de la denunciante se realizó a puerta cerrada, tras un biombo y con la voz distorsionada, motivo por el que los medios de comunicación no tuvieron acceso a su relato, el visionado de las cámaras de seguridad tampoco se muestra ni parcial ni totalmente a ninguno de los periodistas aquí presentes. Solo quienes se encuentran en este momento en la sección 21 de la Audiencia Provincial de Barcelona disponen de imagen y sonido.
Después de un receso de unos 30 minutos, la sala procede ahora a hacer el análisis de las pruebas documentales, o lo que es lo mismo, a la revisión de las grabaciones aportadas. No será hasta después de esta parte, que podría ser una de las más extensas de la tercera sesión del juicio, cuando el futbolista brasileño declare ante la jueza.
Una vez finalizada la declaración de las dos psicólogas, que volvieron a poner el consumo de alcohol sobre la mesa, el juicio se vuelve a pausar durante unos minutos. A la vuelta, la sala analizará las pruebas documentales, es decir, los vídeos y grabaciones de la noche de los hechos. Tras ello, justo antes de terminar, Dani Alves será quien declare en último lugar.
Si en la primera parte de la declaración ambas psicólogas hablaban de "una afectación cognitiva importante", el relato cambió ligeramente cuando fueron repreguntadas por la acusación particular. "¿Distinguía entre el bien y el mal?", preguntaba la letrada. "Claro que podía distinguir entre el bien y el mal. Tenía una afectación de las capacidades leve. Sabía lo que estaba sucediendo", confirmaron las psicólogas.
Tras la intervención del grupo de médicos, ahora era el turno de dos psicólogas que le realizaron un examen a Dani Alves. Ambas hablan de una "afectación importante en sus capacidades cognitivas, una disminución de la alerta", todo ello durante la noche de los hechos. "Es una persona que no está acostumbrada al alcohol", señalan.
La doctora Navarro asegura que la exposición del caso en los medios de comunicación fue determinante y que, por ello, los síntomas de la denunciante estaban "más relacionados con un trastorno de ansiedad que con el estrés postraumático". "El factor mediático pudo afectar sin lugar a duda. Yo no estoy cuestionando el malestar de la denunciante, y vi que era una persona que, efectivamente, lo estaba pasando mal. Pero cualquier persona que no está habituada a esto puede tener afectaciones, es normal", explica la doctora.
"No cuestionamos en absoluto que haya un trastorno de ansiedad. No se puede ponderar en un porcentaje exacto corresponde al impacto ambiental, pero creemos que es altísimo. Los síntomas son más coincidentes con el trastorno de ansiedad que con el del estrés postraumático", sostiene la doctora, que cerraba la intervención del grupo de especialistas.
Tras el análisis correspondiente, uno de los doctores que tuvo acceso al informe del médico forense de la denunciante sostiene que, según su experiencia personal, el coito quizás no fue tan traumático. "Cuando una paciente nos cuenta que ha sido un coito doloroso, es muy raro que no encontremos nada. No coincide el relato de la denunciante con el examen objetivo de un médico forense que tiene toda mi confianza. No se aprecia una herida en la zona de la uretra. Puede ser que se produjera una irritación. La no existencia de heridas de este tipo a mi me hace pensar que el coito no fue tan traumático", argumenta el doctor.
En un momento algo tenso en la sala, la doctora Mateu corregía a la doctora Navarro, diciéndole que "hay cosas que se deben aclarar. Cuando estamos con una paciente que está sufriendo una sintomatología tan variada, ella tiene la sensación de que pierde el control de su vida, de sus emociones. Ha tenido una ruptura, un 'shock. En estos casos, es habitual que se hagan cambios de terapeutas, que no tome la medicación...",
Entre los miembros del grupo de doctores que declaraban ahora en el juicio, dos de las especialistas tuvieron oportunidad de exponer conclusiones muy distintas respecto a la situación psicológica de la denunciante. Mientras que la doctora Navarro sostiene que "me dijo que había hecho una visita al psiquiatra pero consideraba que no lo necesitaba. Le asignaron un tratamiento con medicamentos pero también consideraba que no necesitaba tomarlos. No ha incorporado ningún tratamiento para el estrés postraumático, solo Trankimacin. Esto no es lo habitual", la doctora Mateu puntualizaba esta explicación y argumentaba que "que una persona que está en un estado emocional alterado no se tome la medicación no quiere decir que no la necesite".
Después de tratar las heridas en la zona de la rodilla, los doctores dieron detalles y explicaron su punto de vista sobre el no hallazgo de lesiones a nivel vaginal en la exploración realizada a la denunciante. "¿Es frecuente ver agresiones sexuales en las que no aparece ninguna lesión a nivel vaginal? No es lo frecuente, pero es posible. No encontramos ninguna lesión, pero esto no quiere decir que sea consentido ni no consentido. Es verdad que es más común encontrar heridas cuando se producen actos no consentidos, pero no se puede descartar nada.
Además, sobre la existencia de flujo vaginal en la exploración, los doctores detallan que, solo por ello, no se pueden sacar muchas conclusiones. "solo por la estimulación, por ejemplo la producida por el pene, la vagina puede lubricarse, por lo que puede haber restos de flujo vaginal"
Otro de los detalles que han tenido cierto protagonismo durante el juicio son las heridas que presentaba la denunciante en su rodilla después de lo ocurrido en el baño del reservado. Sobre estas heridas, el grupo de doctores asegura que "estar de rodillas y realizarte una herida de este tipo es altamente poco probable. Si fuera así, solo presentaría afectaciones superficiales. En caídas, lo normal es que se produzcan heridas frontales en ambas rodillas. Estamos ante una lesión lateral, no frontal. Podría haber sido por un roce contra una superficie rugosa. No se puede afirmar al 100% que la herida se haya producido porque se ha caído al suelo. Cuando alguien empuja a alguien y se cae, normalmente hay heridas en ambas rodillas. No es el caso", declaró uno de los doctores del grupo.
El grupo de médicos que realizaron tanto la inspección de la denunciante como los posteriores análisis han dado algunos detalles sobre cómo llegó a la consulta y qué era lo que ella explicaba. "Cuando la denunciante llegó, lo hizo con cierta tensión, pero se veía una chica coherente y educada, y que explicaba las cosas tal y como ella las había vivido. Por momentos había que parar. La denunciante solo nos dijo que quien se lo hizo hablaba portugués, pero no reveló la identidad", explican. Sobre si la denunciante y el acusado se dieron o no besos, los médicos explican que "lo que recuerda (la denunciante) es que hubieron besos en el cuello. Después de esos besos, ella quiso salir pero no pudo", relatan.
Tras algo menos de 20 minutos de espera, la tercera sesión del juicio de Dani Alves ya ha arrancado en la sección 21 de la Audiencia Provincial de Barcelona. La primera en declarar será la doctora que atendió a la denunciante en el Hospital Clínic.
Si bien es cierto que no hay una duración marcada, pues esta depende en gran parte del tiempo que se tomen los testigos para declarar y de las preguntas que planteen tanto el Ministerio Fiscal como la acusación particular y la defensa, la última jornada nos trae uno de los 'platos fuertes' y, por tanto, no será corta. Se espera, pues, que sea la declaración de Dani Alves la más extensa del día. El futbolista será el último en testificar.
Cuando ya se han cumplido las 15 horas de este miércoles, hora a la que estaba previsto que arrancase la tercera jornada del juicio, esta volverá a empezar con algunos minutos de retraso. Si el pasado lunes el procedimiento se retrasó cerca de 30 minutos y el martes tuvimos que esperar algo más de 10 minutos para que empezase la segunda jornada, este miércoles no será distinto.
Mensaje de Ney Alves en Instagram (Fuente: @neyalves)
A través de su cuenta de Instagram, Ney Alves, hermano del acusado, ha mandado un mensaje de apoyo al futbolista. Con una fotografía del mismo Dani, ha añadido que un texto en el que pide que "Dios te bendiga en el día de la decisión más grande de tu vida".
En la tarde de ayer, hasta cinco fueron los mossos que se subieron al estrado. El cuarto de ellos, que estaba presente durante la primera declaración de la denunciante explicó que "cuando declaró, en el momento en el que tenía que explicar lo de la agresión, se puso más nerviosa. Se derrumbó y se vio que le estaba sobrepasando la situación. Dijo que no quería denunciar. Su miedo era que saliera su nombre. Sentía terror. La denunciante dijo que le habían dado medicación pero que no se la había tomado para estar serena a la hora de declarar".
Queda poco más de 1h para que la Audiencia Provincial de Barcelona acoja la tercera sesión del juicio contra Dani Alves, acusado de un delito de agresión sexual con acceso carnal. En este último día, y después de que suban al estrado el forense, la policía científica y cuatro peritos, declarará el exfutbolista que, presumiblemente, recordará que los hechos fueron consentidos y que él estaba bajo los efectos del alcohol.
Después de la declaración de Dani Alves y una vez conocidas las conclusiones del juicio, el caso quedará visto para sentencia. Se espera que el tribunal dé a conocer la condena en un máximo de diez días. Pero, ¿a qué pena se enfrentaría el exfutbolista de ser declarado culpable de agresión sexual?
- Si finalmente el alcohol no cuenta como atenuante, estaríamos hablando de una sentencia de entre 6 a 9 años de cárcel. Siempre y cuando Dani Alves abonara la indemnización de 150 mil euros que exige la Fiscalía (que sí contaría como atenuante ordinaria).
- Por otro lado, si el estado de embriaguez fuera estimado como otra atenuante ordinaria, la pena se vería rebajada y hablaríamos de una sentencia de entre 3 y 6 años.
Después de que el tribunal aceptara la petición de la defensa de Dani Alves para que el acusado declarara el último, el exfutbolista subirá esta tarde al estrado. Lo hará después de que el forense, la policía científica y cuatro peritos de la defensa expongan sus conclusiones. Teniendo en cuenta su última versión y las declaraciones de todos los testigos aportados por la defensa, se espera que el exjugador del FC Barcelona mantenga que las relaciones fueron consentidas y que lo hizo estando muy borracho. Siendo este último un detalle que hasta ahora no había entrado en juego y que, el pasado mes de enero, trascendió que iba a ser clave en el juicio.
La mujer de Dani Alves, Joana Sanz, también subió al estrado este martes. La modelo recordó ante el tribunal cómo fue la llegada del exfutbolista a la casa que compartían en Barcelona en la misma noche del 30 de diciembre de 2022: "Cuando llegó (Dani Alves) alrededor de las 4 de la mañana, se chocó con el armario y con la mesita de noche. Luego cayó desplomado en la cama. Olía mucho a alcohol". Unas palabras que refuerzan el argumento en el que se ha basado la defensa del futbolista, a cargo de Inés Guardiola, que alega el estado de embriaguez de Dani Alves esa noche.
Bruno Brasil, a su llegada a la segunda jornada del juicio contra Dani Alves (Foto: EFE)
Ester García, abogada de la acusación, alertó al tribunal de una contradicción de Bruno Brasil, amigo de Dani Alves, respecto a la primera declaración que hizo hace unos meses. En ese moment, el brasileño aseguró que se habían ido de la discoteca porque al exfutbolista "le dolía la barriga". Sin embargo, en su comparecencia ayer explicó que no hubo un motivo de peso para abandonar la sala: "Simplemente porque era tarde y habíamos bebido mucho". En respuesta a la letrada, el declarante dijo que "aquella declaración no quedó muy clara, la tuve que hacer en español".
Bruno Brasil, amigo del exfutbolista y la persona que estuvo con él la noche en la que ocurrieron los presuntos hechos, subió al estrado este martes. El cocinero coincidió con el argumento de la defensa y aseguró que Dani Alves "había bebido mucho" esa misma noche. "Entre todos, bebimos 4 botellas de vino y una de whisky. Él (Dani Alves) bebió una botella de vino y dos copas de whisky. Dani (Alves) fue el que más bebió en el restaurante", destacó en su declaración.
Otro de los testigos de esa noche que compareció ante la jueza fue el jefe de sala de Sutton. El empleado de la discoteca detalló que "Alves es cliente habitual", para destacar que le conocía anteriormente a los presuntos hechos. "Notaba que había bebido o se tomó algo, así que no actuaba como siempre. Esto se lo comenté a los Mossos, pero no al director", explicó ante el tribunal. "Notaba que o había bebido o había fumado algo", puntualizó.
Por el estrado pasaron ayer hasta 20 testigos durante las más de 3 horas que duró la sesión. El primero en declarar ante el tribunal fue Robert Massanet, director de Sutton, y la persona que activó el protocolo en la discoteca donde presuntamente tuvieron lugar los hechos. "La denunciante estaba bastante alterada, decía que se quería ir a casa. Yo necesitaba saber qué había sucedido para activar el protocolo. Acabamos de convencerla para que fuéramos a una sala anexa y fue allí donde nos dijo que había sido víctima de una agresión sexual", recordó Massanet.
Buenos días y bienvenidos a la narración, en directo, del último día del juicio de Dani Alves. Tras las dos primeras jornadas, la Audiencia Provincial de Barcelona acogerá hoy a partir de las 15 horas la última sesión, que contará con la declaración del brasileño, acusado de un delito de agresión sexual. El exfutbolista será el último en subirse al estrado después de que lo hagan los forenses, la policía científica y cuatro peritos de la defensa.
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