No hay una sola manera de disfrutar de la Ciudad de México, al igual que no hay una sola manera de describirla. Los palacios art déco se asientan junto a edificios coloniales españoles, mientras que las taquerías familiares comparten la manzana con modernos bares de cócteles. En barrios como Condesa y Roma Norte encontrarás boutiques, cafeterías y clubes a la última, mientras que en barrios más tranquilos como Santa María La Ribera podrás disfrutar de la vida local desde los mercados hasta las plazas. Los amantes del arte y el diseño pueden visitar la Casa Azul de Frida Kahlo, los amantes de la historia (a los que también les guste salir de fiesta) pueden pasar el día en los jardines flotantes de Xochimilco y los aficionados a la ópera pueden disfrutar de una actuación en el histórico Palacio de Bellas Artes. Si a esto le añadimos un buen mezcal y tacos de suadero (una especialidad de la CDMX), aún estarás sacando partido a todo lo que ofrece la ciudad.