No cabe duda de que los escritores hacen arte con las palabras y nadie duda de sus dotes autorales. Sin embargo, en el mundo de Hollywood no siempre se eleva a los guionistas al rango de autores.
Charlie Kaufman es uno de esos Autores, con mayúscula, que lucha por este reconocimiento en su país; ofreciéndonos creaciones profundamente autoconscientes. Hoy conocemos a este guionista, creador de algunos de los scripts más destacables de las últimas dos décadas.
Si te apasionan las letras y quieres sacar partido de tus habilidades, tú también puedes trabajar en la industria del cine gracias a una formación especializada en Guion Audiovisual. ¡Fórmate y perfecciona tus proyectos!
Orígenes y educación
La ciudad de Nueva York ha visto nacer a muchos grandes personajes de la historia del cine. Uno de los más desconocidos, pero no poro ello menos importantes, es Charlie Kaufman.
Como otros cineastas como Woody Allen o Stanley Kubrick, Kaufman viene de una familia judía de la gran metrópoli estadounidense. Tras pasar parte de su adolescencia en una localidad de Connecticut durante los años 60 y principios de los 70, volvió a su ciudad natal para cursar cine en la New York University.
Allí conoció a Paul Proch, con el que desarrolló el gusto por la escritura de guiones. Juntos crearían cantidades de guiones y obras de teatro que nunca llegarían a ver la luz pero que, sin duda, avivaron sus dotes literarias y creativas.
Charlie Kaufman: intentos por introducirse en la industria para TV
Los años 80 debieron ser realmente frustrantes y desalentadores para Charlie Kaufman. Junto a su amigo Paul, envió un sinfín de guiones a todo tipo de productores de la industria del cine.
Al ver que aquello no funcionaba, decidió conseguir un agente que pudiese conseguirle un trabajo en Hollywood para empezar desde abajo. Para ello se puso a escribir guiones de capítulos para series de televisión cómicas, como Matrimonio con hijos, Newhart o Los Simpson.
La falta de éxito en este sentido le obligó a mudarse a Minneapolis y a trabajar en un servicio de atención al cliente para poder mantenerse a él y a su esposa.
Pero llegados los 90, la situación dio un giro repentino. Consiguió un agente que le recomendó mudarse a Los Ángeles en busca de mejores perspectivas de trabajo. Así lo hizo.
Durante esta época, Kaufman era una persona tremendamente tranquila cuyos guiones y estilo de humor eran, en palabras de sus productores, poco convencionales.
En LA, Charlie Kaufman empezó a trabajar poco a poco escribiendo para pequeñas series de TV e intentando mantener sus obras fuera de la influencia de los productores, que pretendían adulterarlas.
«Being John Malkovich»: una joya para el cine independiente
Tras años dándose de bruces contra la industria de la televisión, logró hacer llegar un guion nada más y nada menos que a Francis Ford Coppola. El gran director de El Padrino puso en contacto a Charlie Kaufman con su por aquel entonces hijastro, Spike Jonze, para trabajar en conjunto en Cómo ser John Malkovich.
Encargándose Jonze de la dirección y Kaufman de la escritura, esta aclamada comedia de tono surrealista salió en las salas de cine en el año 1999. Al momento se convirtió en una obra alabada por crítica y público, sobre todo por el inusual y estrambótico guion.
Su argumento, que desarrollaba la idea de un pequeño pasillo secreto que da acceso a la mente de John Malkovich (de manera literal), fue premiado con una nominación en los Óscar y otra en los Globos de Oro, y un galardón en los premios BAFTA.
Pequeños roces trabajando con George Clooney
Tras un par de films de por medio, Charlie Kaufman se puso a escribir el guion de Confesiones de una mente peligrosa (2002), primera película dirigida por el archiconocido George Clooney.
Después del estreno de la película en salas, Kaufman abrió la polémica con unas declaraciones criticando abiertamente a Clooney y achacándole haber “metido mano” en su guion sin habérselo comunicado previamente.
La fuerte vertiente autoral del guionista le lleva a defender su obra como tal, saltando sobre todo productor o director que pretenda realizar modificaciones sobre su trabajo con el objetivo de adaptarlo a un público determinado.
En una entrevista Kaufman declaró que “lo usual para un escritor es entregar un guion y luego desaparecer. Pero eso no es para mí. Quiero estar involucrado de principio a fin.”
Y llegó la gran obra maestra de Charlie Kaufman
Con la siguiente película que escribiría llegaron los premios más prestigiosos. En esta ocasión coescribió; junto con el francés Pierre Bismuth y el propio director del film, Michel Gondry; ¡Olvídate de mí!
Con una historia más dramática, la película trata acerca de la tortuosa relación entre sus dos protagonistas (interpretados por Kate Winslet y Jim Carrey) y cómo, tras intentar hacer desaparecer los recuerdos que tienen el uno del otro, redescubren su amor.
Alabada como una de las mejores historias del siglo XXI, sobre todo para el público más romántico; Charlie Kaufman fue premiado, junto a los otros dos guionistas, con el Óscar y el BAFTA en su categoría. Además de una nominación en los Globos de Oro.
Por si fuera poco, el trio recibió el reconocimiento del prestigioso PEN American Center del año 2005.
¿Quieres formarte en escritura de guiones? Consíguelo con Treintaycinco mm
Al igual que Charlie Kaufman, tú también puedes crear tus propias historias, tanto para películas como para series de televisión. ¿Quieres mejorar tus dotes y adquirir las técnicas necesarias para ser un guionista de primera?
Fórmate con el curso especializado en Guion Audiovisual de Treintaycinco mm y haz realidad tus sueños. Nuestro equipo de docentes con sobrada experiencia en el sector te ayudará a adquirir todos los conocimientos que necesitas.
No lo dudes más y contáctanos a través del formulario para informarte de todos los detalles de la formación. Aprovecha esta oportunidad y empieza a trabajar cuanto antes creando historias y mundos que logren hacer soñar al público. ¡Nosotros estaremos aquí para acompañarte!
