Catherine Deneuve, la actriz m�s libre y con m�s glamour del cine franc�s

"�Sabe usted por qu� Cristo no podr�a haber sido crucificado en Italia? Por el tiempo que habr�an tardado en encontrar d�nde hab�an puesto los clavos, el martillo y la cruz". La broma es de Catherine Deneuve, la contradictoria actriz capaz de pasar una rueda de prensa en el Festival de Cine de Venecia respondiendo con monos�labos, y acabar una larga entrevista con el peri�dico 'Lib�ration' contando un chiste para ejemplificar que en Italia son los reyes de la improvisaci�n.

Y si le preguntan por qu� lleva un pin de Ucrania, ella responde: "No quiero hablar, solo llevarlo". Tampoco ha aceptado nunca que la llamen 'sex symbol' ni que le pidan hacer balance de su carrera, ni ha dejado de trabajar por ir sumando arrugas, m�s bien al contrario: Deneuve sigue rodando pr�cticamente cada a�o, confi�ndose muy a menudo a directores n�veles sin experiencia alguna. Razones de sobra para comprender que es, adem�s, la mujer con m�s car�cter del cine franc�s, acostumbrada desde sus primeros pinitos, con 13 a�os, a hacer y vivir como le da la gana.

De Polanski a Bu�uel

Quiz�s el �xito de Deneuve consista en haber ido siempre por libre, y puede que -para lo bueno y para lo malo- todos tengamos algo que aprender de ella, en una sociedad cada vez m�s encerrada en s� misma y v�ctima del narcisismo que nos han tra�do, entre otras cosas, las redes sociales. La actriz, que cumplir� 80 a�os en 2023, es hija de dos actores del teatro que introdujeron a sus cuatro hijas en el mundo de la interpretaci�n.

La promesa de la familia era en realidad su hermana mayor, Fran�oise Dorl�ac (Deneuve es el apellido de soltera de su madre), quien se mov�a entre los directores estrella de la incipiente Nouvelle Vague, como Fran�ois Truffaut. Entre tanto, Deneuve disfrutaba de estar en la sombra porque, como sigue defendiendo, nunca le ha gustado ser el centro de nada: "Prefiero quedarme en segundo plano y observar".

Eso es lo que hac�a Deneuve, que no pensaba dedicarse al cine, de no ser porque su hermana le insist�a para que aceptara papeles y se acercara a los directores emergentes del cine franc�s, como Roman Polanski, bajo cuyas �rdenes protagoniz� 'Repulsi�n', la pel�cula que lanz� al polaco. Pero tragedias del destino: el a�o que la carrera de Deneuve despeg�, muy por detr�s de la de su hermana, con 'Belle de Jour', Dorl�ac perd�a la vida a los 25 a�os en un accidente de coche.

El rodaje de 'Belle de Jour'

Dorl�ac fue clave en el rodaje de esa pel�cula, donde las desavenencias entre el director Luis Bu�uel y Deneuve crearon bastantes tensiones -apenas se cruzaron la palabra-. Deneuve no comprend�a las extravagancias del ma�o y, adem�s, se negaba a hacer las escenas de desnudo, decisi�n que acab� por hacer la pel�cula a�n m�s enigm�tica.

La actriz tampoco era la opci�n privilegiada por Bu�uel, que prefer�a una mujer m�s felina, pero los productores estaban convencidos de que su apariencia de burguesa estirada iba bien con el personaje. "Era guapa, reservada y extra�a, as� que la acept�", confiesa Bu�uel en sus memorias. La relaci�n, m�s de 50 a�os despu�s, mantiene el mismo halo de misterio, seg�n recuerda Deneuve, que siempre ha confesado que el director espa�ol le daba p�nico. "No debi� de ten�rmelo en cuenta porque volvi� a llamarme para 'Tristana'", dijo recientemente sobre su negativa a desnudarse en el filme.

Deneuve ha limitado sus encuentros con el cine de Hollywood y privilegiado un cine m�s independiente -y franc�s-, pero su paso por "El ansia", en la que hizo de vampiro junto a David Bowie y sedujo a Susan Sarandon, fueron m�s que suficientes para convertirla en mito en Estados Unidos, donde la prensa la bautiz� como "la mujer m�s bella del mundo". Su fama de enigm�tica, de estirada, de mujer de hielo han enriquecido papeles en los que Deneuve interpreta a mujeres so�adoras, secretas, que esconden a menudo una doble vida.

Una mujer libre

Pero lo cierto es que Deneuve es una de las personalidades m�s fuertes del panorama franc�s, y es imposible desligarla de la liberaci�n sexual que vivi� la mujer en los a�os 60 y 70. La actriz se cas� una �nica vez y se separ� a los dos a�os; se neg� a casarse con los padres de sus dos hijos -el actor Christian Vadim, que tuvo con el director Roger Vadim, y la actriz Chiara Mastroianni, de su relaci�n con el actor italiano Marcello Mastroianni-. En 1971 fue una de las signatarias de 'El manifiesto de las 343 zorras', a favor de la legislaci�n del aborto en Francia.

"Pese a su vida aparentemente burguesa siempre ha sido muy libre, mucho m�s que otras estrellas de su generaci�n que encarnaban cierta emancipaci�n, como Brigitte Bardot, que se cas� tras quedarse embarazada", algo a lo que Deneuve se neg�, defiende Gw�na�lle Le Gras, autora de 'El mito Deneuve'.

Una carta pol�mica

La emancipada era sin duda Deneuve, a la que nunca le ha costado ponerse a la opini�n p�blica en contra, como cuando a principios de 2018, en plena ola del Me too, defendi� en una columna en el diario 'Le Monde' "la libertad de importunar" de los hombres, para indignaci�n de los movimientos feministas, que le saltaron al cuello por ello.

La carta de la actriz, firmada con otras cien personalidades y artistas, denunciaba la violaci�n como un crimen pero defend�a que ligar con torpeza o de forma persistente no es un delito ni una agresi�n machista, sino una parte indispensable de la libertad sexual. "Lejos de ayudar a las mujeres a ganar autonom�a, esta fiebre de enviar 'a los cerdos' al matadero sirve a los intereses de los enemigos de la libertad sexual, de extremistas religiosos y de reaccionarios de los que estiman que las mujeres son seres diferentes, ni�as con rostros de adulta que reclaman protecci�n". Su terror a las consecuencias de la exposici�n medi�tica y al pensamiento �nico, del que siempre ha buscado desmarcarse, se concret� en la carga que se volvi� aquellos meses contra ella.

Glamour a raudales

Despu�s de aquello Deneuve sigui� trabajando sin pausa, salvo por un susto en noviembre de 2019, cuando estuvo hospitalizada de gravedad y muchos se apresuraron a se�alar su mala vida y su gusto por la bebida para justificarlo. La actriz reapareci� tras la pandemia en un desfile de Saint Laurent, su marca fetiche tras haber sido musa del dise�ador durante d�cadas, con claras dificultades para caminar. Y cuando todos la daban por muerta, Deneuve se pase� este a�o por Venecia con el glamour de siempre y una vejez que, salvo por algunos retoques, nunca ha querido esconder, poni�ndose en el papel de soltera, madre y ahora abuela.

"Siempre tenemos la necesidad de poner etiquetas. Antes era la mujer fr�a, despu�s el fuego debajo del hielo y algo m�s tangible: la libertad", critic� ella en 'Le Figaro' en 2019. Incluso Fran�ois Truffaut, con quien hab�a tenido un escarceo amoroso, sab�a que definir a la Deneuve no era sencillo: "Aporta una dosis de ambig�edad a cualquier situaci�n, en cualquier escenario, porque ella da la impresi�n de esconder un sinf�n de pensamientos secretos".