Casemiro pone a prueba el nuevo sistema

La marcha de Casemiro fue uno de los bombazos del pasado mercado de verano. El centrocampista brasile�o cog�a sus maletas a �ltima hora y aterrizaba en M�nchester para intentar poner orden en un caos que gobernaba a un equipo que en su d�a lleg� a infligir el miedo all� por donde pisaba. La desesperaci�n por volver a competir provoc� una salida al mercado que le acab� costando caro: 72 millones m�s 13 en variables.

Su fichaje, con el permiso de un Real Madrid que acababa de fichar a su 'sustituto' (Tchouam�ni), pretend�a proyectar una ilusi�n que hac�a tiempo que el conjunto 'red devil' hab�a perdido. Es dif�cil que un s�lo futbolista pueda cambiar din�micas... pero la versi�n profesor de Casemiro s� pod�a ense�ar a sus compa�eros la importancia de la intensidad y la manera en la que un equipo tiene que competir si se quiere luchar a final de temporada por la posibilidad de optar a todos los t�tulos. Y Case demostr� que en el f�tbol a veces no es necesario desembarcar para conquistar un territorio.

Con el brasile�o liderando la escuadra de Erik Ten Hag, el Manchester United recuper� las ganas de vivir para volver a entrar en Champions League tras alcanzar la tercera posici�n de la Premier League en la temporada pasada. La falta de gol penaliz� al conjunto Red Devil, pero la primera piedra de la reconstrucci�n ya estaba puesta. El centrocampista se puso el mono de trabajo, uno que nunca ha abandonado a pesar de tener ya 31 a�os, y reparti� ilusi�n por Old Trafford: 7 goles y 7 asistencias en 53 partidos.

Nada ser� igual para �l

Con su salida se romp�a la Sant�sima Trinidad del centro del campo blanco que formaba el brasile�o junto a Modric y Kroos, ese Tri�ngulo de las Bermudas como lo defini� el propio Carlo Ancelotti la pasada pretemporada. En el Real Madrid, Casemiro fue el ancla. El '14' recib�a el bal�n y ten�a siempre opciones para jugar. Una de ellas era Modric, otra Benzema y otra era Toni Kroos. As� pod�a parecer sencillo jugar... pero es que Casemiro, futbolista inteligente donde los haya, sab�a cual era su funci�n en ese 4-3-3 que tantos t�tulos regal� al madridismo. Robar balones y proteger a las otras dos piezas del tridente.

As� las cosas, en su 'regreso' a casa se encontrar� a un equipo totalmente diferente. El centrocampista se reencontrar� con sus compa�eros en el NRG Stadium de Houston y tendr� que poner a prueba un nuevo estilo de vida. El plan del t�cnico italiano alcanza su segunda prueba y enfrente tendr� a un futbolista que fue clave y protagonista de su anterior sistema. Lo nuevo contra lo viejo... con el factor Bellingham sobre el c�sped. El centrocampista ingl�s tendr� un hueso duro de roer, que no le va a poner las cosas nada f�ciles, para tratar de seguir buscando su sitio en el esquema blanco. Nada ser� igual para el centrocampista brasile�o, que disfrut� como un ni�o de su camino en el Madrid... y que tendr� ahora la oportunidad de presenciar en directo la nueva filosof�a blanca.