Tamara Falcó ha sido víctima de una drástica noticia los últimos días. Tras confirmarse su casamiento con Íñigo Onieva, la marquesa de Griñon contrató a la firma “Sophie et Voilà” para la confección de su vestido de novia pero las diseñadoras decidieron romper el vínculo y esto sin dudas generó un terrible revés para la ‘influencer’.
Desde entonces, Tamara Falcó ha tenido que lidiar con la polémica pero además, debía ocuparse de una nueva búsqueda de profesionales que se comprometan con las indicaciones de su traje de boda, a tan solo dos meses del gran evento.
Desolada en medio de la situación, Tamara Falcó logró contactarse con la firma de Carolina Herrera quien decidió hacer frente al imprevisto y comenzar con el diseño. Luego de su visita a Nueva York para encontrarse con el modista de la firma, la hija de Isabel Preysler desveló lo que todos querían saber sobre su vestido.
“Han sido encantadores y tengo algo que ponerme, ¡Todo son buenas noticias!”, expresó Tamara Falcó en una conversación con Pablo Motos en “El hormiguero” y comentó: “Tengo que hacerme más pruebas y volver entre tres y cuatro veces más”.
Además, Tamara se animó a dar detalles sobre el encuentro con el equipo de profesionales encargados de la confección del traje: “Ha sido la prueba de novia más maravillosa que he tenido. Fueron encantadores, los bordados preciosos, el equipo. Me he sentido súper escuchada”.
"Ha sido la prueba de novia más maravillosa que he tenido".
La decisión que sorprende a todos
A pocas semanas de concretar el gran día, Tamara Falcó tomó una drástica decisión. Según los colaboradores de “Sálvame”, la ‘socialité’ tiene el objetivo de adelgazar entre ocho y nueve kilos por lo que decidió ingresar a un centro de profesionales.