Brasil es tierra de enormes futbolistas, no por nada tienen cinco mundiales en su haber. Los brasileños siempre se han caracterizado por sus delanteros, extremos y por sus laterales.
En este último ítem ingresan nombres como Roberto Carlos, Carlos Alberto y Cafú, enormes defensores y, a la vez, atacantes.
Si nombramos a Marcos Evangelista de Moraes, probablemente ese nombre no le suene a muchos, ni siquiera a los más futboleros. Pero si hablamos de Cafú, ese nombre sí le va a sonar a una enorme mayoría.
Cafú nació el 7 de junio de 1970 en Itaquaquecetuba, un municipio de San Pablo, Brasil. Ese mismo día, la selección brasileña venció a Inglaterra por la fase de grupos del Mundial de ese año.
Su debut como profesional fue en el año 1989 con la camiseta del San Pablo, tuvo una etapa en el Real Zaragoza, un regreso a Brasil con la camiseta del Palmeiras entre 1995 y 1997, estuvo seis años en la Roma y luego de su ciclo en el equipo de la capital italiana arribó al Milan en el año 2003. En el Rossonero estuvo desde el 2003 hasta el 2008 y fue uno de los mejores defensores que tuvo la historia del club, no es poco.
Entre los títulos que ganó en su carrera se destacan una liga de Brasil con el San Pablo, dos ligas italianas (una con la Roma y una con el Milan), dos Copas Libertadores con el San Pablo y una Champions League con el Milan.
Respecto a su nivel con la Selección brasileña, tuvo un nivel más que destacado. Encajó en una generación de nombres irrepetibles como Ronaldo Nazario, Ronaldinho, Roberto Carlos y Dida.
Fue parte de los equipos campeones del mundo en Estados Unidos 1994 y en Corea-Japón 2002. Además, es el jugador que más veces se puso la camiseta de la verdeamarela, con un total de 142 partidos y cinco goles.
Luego de su retiro en el año 2008 con la camiseta del Milan se mantuvo alejado del fútbol. El año pasado, 2021 comenzó a dedicarse de lleno a su fundación: “Fundação Cafú”, que se dedica a combatir la pobreza infantil.
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