Arnau Martínez, pieza básica para Míchel en sus dos primeros años en el Girona, está teniendo un rol secundario más esta temporada. Yan Couto o Eric Garcia, como sucedió ante el Atlético en el Metropolitano, le han ganado la posición en el lateral derecho. El defensa, que estuvo en la órbita del Barça y que también dejó de ser internacional Sub-21, atraviesa una situación aún más enrarecida por su no renovación, que concluye en 2025.
¿Pero qué sucede?¿Cuál es el motivo de que no prolongue su contrato. El director deportivo del Girona, Quique Cárcel, dejó entrever los motivos en una reciente entrevista. "Arnau no está jugando, pero tampoco está en el mejor momento para tomar decisiones porque está esperando la evolución de su situación. Queremos que continúe, pero él también debe tomar una decisión sobre lo que quiere hacer en su carrera deportiva. Es una situación incómoda", explicó en 'Tot Rodó', de Televisió de Girona. Y añadió: “No diría que está en un punto muerto la renovación, pero él también tiene una situación personal con sus agentes que debe terminar de solucionar".
Esa incomodidad de la que habla el técnico podría referirse a una cuestión con sus representantes. Según han explicado fuentes solventes a MD, las condiciones de su renovación estarían ya habladas con el Girona, hasta el punto de que sólo faltaría el requisito de la firma y el visto bueno del jugador, que es probable que no se haga de manera inmediata.
Fuentes cercanas al jugador, sin embargo, han concretado y matizado a MD que no existe ningún pre-acuerdo como se había apuntado y que no es cierta la existencia de un conflicto entre agentes. Arnau Martínez continúa con su agencia de representación hasta junio de este 2024, aunque no prolongará su continuidad. Las mismas voces autorizadas aseguran que no hay acuerdo con otros agentes. El problema, simplemente, es la duración contractual.
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Arnau Martínez ha optado por cambiar de agentes- Los actuales son los que han negociado las condiciones, son los que se han sentado a negociar con el Girona. A pesar de la existencia del pre- acuerdo, los nuevos plantean una renegociación que el club no contempla y que podría hacer que el problema se alargue hasta el verano. Y mientras, el jugador tampoco tiene la titularidad que parecía haberse ganado.