Hace dos años, la NASA publicó la foto de un supuesto plato volador que se estrelló en desierto de Utah en Estados Unidos. El hecho ocurrido en noviembre de 2018, levantó sospechas por su forma y material ya que los aficionados creían que podía ser un ovni.

“Un platillo volador del espacio exterior se estrelló en el desierto de Utah después de ser rastreado por un radar y perseguido por helicópteros”, describe la foto que compartió la NASA.

Sin embargo, no indicaban que era una extraterrestre, sino que se trataba de un plato volador que había sido estrellado en el desierto y que era parte de la nave espacial Génesis, según informaron desde Science Alert.

El 8 de agosto del 2001 se envió a una nave espacial que formó parte de la misión Génesis, que tenía como objetivo llegar al viento solar de nuestra estrella y recolectar diferentes muestras para luego traerlas a la Tierra.

Con los objetos recolectados durante dos años, como aluminio, zafiro, silicio y oro, los investigadores querían conocer los componentes de la estrella y así averiguar más detalles de los elementos que estaban alrededor cuando se formaron los planetas del Sistema Solar.

El 8 de septiembre del 2004 la cápsula, que contenía los materiales recolectados, se estrelló contra la Tierra en el desierto de Utah,  a unos 310 kilómetros por hora.

Según a como estaba planeado, el objeto, antes de caer en nuestro planeta, debía abrir unos paracaídas para evitar el fuerte impacto, pero no logro realizarlo y terminó cayendo a gran velocidad.

Luego de tres años de investigación los resultados arrojaron que el Sol alberga más del 99 por ciento del material que se encuentra en el Sistema Solar, comentó en el 2011 Don Burnett, investigador principal de la misión Génesis.