Los 20 animales nocturnos más increíbles con fotos y características

Animales nocturnos tan hermosos como sorprendentes

En el mundo animal podemos encontrar toda clase de interesantes adaptaciones evolutivas al entorno, siempre con el objetivo de maximizar las posibilidades de supervivencia de las diferentes especies.

Entre ellas, pocas son más sorprendentes que las de los animales nocturnos, esto es, los que han evolucionado para vivir, cazar y reproducirse con poca o ninguna necesidad de luz.

A diferencia de los animales diurnos, los nocturnos realizan todas sus actividades por la noche, ya sea durante el crepúsculo o incluso en horas más avanzadas. Estas criaturas normalmente se esconden y duermen durante el día, resguardados frente a los posibles depredadores.

La vida nocturna que realizan estas especies es parte de una adaptación que suele deberse a las necesidades impuestas por el medio en el que viven (es el caso, por ejemplo, de los que viven en el desierto) o por los demás animales que los rodean.

Como verás en esta lista de animales nocturnos, en realidad esta es una categoría que engloba a seres muy diferentes, que van desde pequeños insectos que podemos encontrar en nuestras ciudades y casas a grandes y elegantes felinos de junglas remotas.

Todos ellos hacen vida nocturna y han adaptado sus cuerpos y sentidos, de una forma u otra, a la ausencia de luz, pero, por lo demás, presentan una enorme diversidad.

En cualquier caso, lo más importante que tienen en común los animales nocturnos es que son, sin lugar a duda, criaturas fascinantes. Y en este artículo vamos a ayudarte a conocer mejor a muchos de ellos. ¡Vamos allá!

¿Cómo son los sentidos de los animales nocturnos?

¿Cómo perciben su entorno los animales nocturnos, si hay muy poca o ninguna luz? Es una muy buena pregunta.

Como decíamos, estos seres han desarrollado interesantes adaptaciones que les permiten realizar todas sus actividades sin mayor problema en condiciones en las que nosotros apenas podríamos movernos. Su visión, y en ocasiones también sus otros sentidos, son muy diferentes de los nuestros.

La vista de los animales nocturnos

Solo hace falta ver cómo son los ojos de muchos animales nocturnos para darnos cuenta de que están diseñados para funcionar en condiciones de baja luminosas. Suelen de mayor tamaño, con pupilas también más grandes para aprovechar al máximo la escasa luz que hay disponible en el crepúsculo y la noche.

El mejor ejemplo de esto son los ojos de búhos y lechuzas (animales de los que te hablaremos pronto), mucho más grandes que los nuestros en relación con el tamaño de sus cabezas. La forma también es diferente: sus ojos son tubulares, no esféricos.

Muchos animales nocturnos y crepusculares tienen también una membrana especial en el interior del ojo, tras la retina, que recibe el nombre de tapetum lucidum. Sirve para reflejar en la retina, y así aprovechar mejor, la luz que entra en el ojo. Ese es el motivo por el que los ojos de muchos de estos animales brillan en la oscuridad. Sobre esto te hablamos en nuestros artículos sobre cómo ven los gatos y cómo ven los perros.

Por último, las células fotosensitivas de la retina son diferentes en los ojos de estos animales. O, más bien, la proporción de ellas no es la misma que en nuestro caso. En los ojos encontramos células llamadas conos (que proporcionan una visión rica y profunda del color y los detalles) y bastones (muy sensibles al movimiento y a la luz).

Nuestros ojos tienen más conos que bastones, pero en los animales nocturnos la distribución es justo la contraria. Eso es lo que hace que vean bien en la oscuridad y reaccionen con rapidez ante cualquier movimiento, pero todo ello al precio de poseer generalmente una vista menos precisa.

Otras adaptaciones para la vida nocturna

Muchos animales nocturnos destacan también por su fino oído o un olfato especialmente desarrollado. Cuando no hay luz, estos dos sentidos les permiten captar fuentes de alimento y agua incluso a grandes distancias, así como detectar a posibles depredadores y presas.

Otros animales, como las serpientes, pueden utilizar también el sentido del gusto, ya que su lengua les proporciona muchísima información sobre su entorno. También ciertos tipos de pelos pueden funcionar como receptores, o incluso elementos externos al animal, como es el caso de las arañas y su tela.

En definitiva, existen numerosas adaptaciones que hacen posible que estos animales se muevan y cacen sin problemas en ausencia de luz. Muchas especies han desarrollado sus propios y sorprendentes métodos y de algunos de ellos te hablaremos enseguida.

20 animales nocturnos con fotos y características

Sin más preámbulos, aquí tienes una lista con los 20 animales nocturnos más sorprendentes que existen en la Naturaleza:

Araña camello (Solifugae)

Las arañas camello son un orden de arácnidos que, pese a su nombre, no tienen relación con las arañas. Se distinguen de ellas por sus dos apéndices delanteros acabados en pequeñas pinzas.

A estos animales también se los llama solífugos ("los que huyen del Sol"), un nombre que está directamente relacionado con sus hábitos principalmente nocturnos. Incluso los que viven de día corren de sombra a sombra, evitando siempre la luz de los entornos áridos en los que viven.

Son depredadores carnívoros voraces que persiguen incansablemente a sus presas, a las que matan a mordiscos. Atacan incluso a animales también peligrosos como los escorpiones o las avispas.

Alacrán (Scorpiones)

Los alacranes o escorpiones son artrópodos arácnidos que se caracterizan por poseer un cuerpo segmentado, dos brazos con grandes pinzas y una larga cola acabada en un aguijón.

Existen escorpiones de diversos tamaños, costumbres y niveles de peligrosidad, pero la mayor parte de ellos son cazadores solitarios de naturaleza nocturna. Durante el día se resguardan en túneles y recovecos.

Por su particular aspecto, los alacranes, animales a la vez fascinantes y temidos, han protagonizado numerosas historias y leyendas del folclore humano. Los incluimos en nuestra lista de animales que empiezan por A.

Aye-aye (Daubentonia madagascariensis)

El aye-aye es un curioso primate endémico de la isla africana de Madagascar. Es un animal peculiar tanto por su extraña apariencia como por el hecho de que es una especie aislada sin parientes cercanos y una de las pocas especies de primates nocturnos.

Los aye-aye tienen más o menos el mismo tamaño que un gato doméstico, con una longitud de 40 cm y un peso aproximado de 2-3 kg. Destacan por su excepcional sentido del oído. Se alimentan de las larvas que viven dentro de los troncos de los árboles, a las que detectan golpeando la corteza con su larguísimo (en relación con los demás) tercer dedo de la mano.

Boa de Tumbes (Boa constrictor longicauda)

La boa de Tumbes es una subespecie de boa constrictora que habita en los territorios selváticos entre Perú y Ecuador.

Estas serpientes terrestres, que pueden llegar a medir hasta 2 metros, son unas eficaces cazadoras nocturnas que se acercan sus presas de forma sigilosa y se enrollan en ellas hasta asfixiarlas. Se alimentan de cualquier animal de tamaño pequeño o mediano que encuentren en la jungla.

Pese a su voracidad, lo cierto es que son animales de temperamento tranquilo que no suponen ninguna amenaza para el ser humano, lo que ha hecho que sean populares entre los aficionados a las serpientes.

Puedes encontrarla también en nuestro listado de animales que empiezan por B.

Búho (Strigidae)

Los búhos, nombre común que reciben las aves del familia strigidae, son seguramente uno de los primeros animales nocturnos que nos vendrán a la cabeza. Son grandes y fuertes aves rapaces cuyos enormes ojos les permiten ver perfectamente cuando la luz escasea. Su visión y oído son excepcionales y hay que destacar también que son animales muy silenciosos.

Un truco para diferenciar a los búhos de las lechuzas es buscar las plumas alzadas parecidas a orejas (aunque no lo son) que los primeros tienen a los lados de la cabeza.

Por su atractivo aspecto, sus característicos ojos y su tendencia al sigilo, los búhos han sido asociados tradicionalmente a la sabiduría, el conocimiento y el equilibrio.

Erizo (Erinaceinae)

Los erizos son pequeños mamíferos que tienen el cuerpo cubierto por una capa de púas. Existen hasta 16 especies diferentes de erizos distribuidas por Eurasia, África y Oceanía (dos ejemplos son el erizo egipcio y el erizo africano). Son relativamente frecuentes en cautividad, aunque no son animales domésticos y su tenencia está prohibida en nuestro país (consulta aquí una lista de animales prohibidos como mascotas en España).

Los erizos, que miden unos 20 cm de largo y pueden pesar hasta 1 kg, son animales nocturnos que pasan las horas buscando los insectos que componen la mayor parte de su dieta.

Una curiosidad sobre estos animales es que sus púas no son realmente huesos, sino pelos huecos rellenos de queratina. Aunque pueden dañar y disuadir a los depredadores, no tienen las puntas afiladas.

Geco (Gekkota)

Los gecos o salamanquesas son una familia de reptiles de tamaño pequeño y mediano (hay especies de 1 cm de longitud, mientras que otras pasan del medio metro) que viven en las regiones templadas de todo el mundo.

Aunque son muy diversos, la mayor parte de los gecos son de naturaleza nocturna y se alimentan principalmente de insectos. Tienen una excelente visión nocturna, hasta 350 veces más aguda que la del ser humano. Otra curiosidad sobre estos animales es que carecen de párpados, por lo que deben lamerse los ojos cada poco tiempo para mantenerlos húmedos.

Por su naturaleza dócil y fáciles cuidados, los gecos son una mascota muy popular.

Gineta (Genetta genetta)

La gineta, también llamada gato almizclero, es un mamífero carnívoro que vive en la península ibérica, las islas Baleares, Francia y gran parte de África y Oriente Medio. Es un animal relativamente desconocido, parecido a un felino, pero de hocico alargado y hábitos arbóreos.

Son animales solitarios que cazan siempre por la noche. Se alimentan de roedores, insectos, lagartos y aves.

En ciertas zonas de África se domestica a las ginetas para que cumplan un rol similar al de los gatos, librando a las propiedades de ratas y otras alimañas. No obstante, son animales ariscos con tendencia a morder, por lo que en ningún caso se los debe tener como mascota.

Jerbo (Dipodinae)

Los dipodinos, coloquialmente llamados jerbos o gerbos, son una familia de roedores que viven en el norte de África y Asia. Hay muchas especies de jerbos, pero el más conocido, por ser un animal doméstico típico, es el jerbo de Egipto (jaculus jaculus).

Estos roedores tienen un aspecto muy característico, con grandes ojos negros (que los identifican como animales nocturnos), orejas redondeadas, fuertes patas traseras y larga cola. Se han adaptado a la locomoción mediante saltos y en los desiertos en los que viven recorren de esa forma largas distancias por las noches.

Habitualmente se confunde a los jerbos con los gerbiles, y particularmente con el gerbillo de Mongolia (meriones unguiculatus), pero son animales muy diferentes.

Lechuza (Strigidae)

Lechuza es el nombre coloquial que reciben varias especies de aves estrigiformes de la misma familia que los búhos, pero a diferencia de estos las lechuzas no tienen plumas alzadas sobre la cabeza.

La lechuza común(tyto alba) es quizás el prototipo de estos animales, pero lo cierto es que hay muchas aves estrigiformes que podrían encajar en esta categoría.

Como los búhos, las lechuzas son aves rapaces perfectamente adaptadas para vivir y cazar en la oscuridad. Son depredadoras muy eficaces que se alimentan de pequeños roedores y mamíferos.

Lémur de cola anillada (Lemur catta)

El lémur de cola anillada es un primate endémico de Madagascar que habita en las regiones boscosas y de matorrales del sur de la isla.

Pueden estar activos durante el día, pero prefieren la noche para ocultarse de sus depredadores. Sus grandes y brillantes ojos, adaptados a condiciones de baja luminosidad, son uno de los rasgos más característicos de estos animales.

Una de las costumbres más curiosas de estos animales es la de tomar el sol durante las primeras horas de la mañana. Grupos de lémures se sientan juntos en una postura que recuerda a la de la meditación humana y aprovechan los primeros rayos de sol para calentarse.

Lince ibérico (Lynx pardinus)

El lince, uno de los felinos más representativos de la fauna ibérica, es también un animal de hábitos crepusculares y nocturnos. Descansan durante el día y buscan a sus presas, principalmente conejos, al caer el sol.

El lince ibérico es una especie en peligro de extinción, con solo una pocas poblaciones viables, compuestas por varios cientos de individuos, en varias zonas del sur de Europa. Sin embargo, durante los últimos años se han hecho grandes esfuerzos a todos los niveles para mejorar la situación de la especie.

Lobo gris (Canis lupus)

Los lobos grises son cánidos sociables y de gran tamaño, estrechamente emparentados con los perros (canis lupus familiaris) y, pese a estar en peligro de extinción, aún presentes en amplias zonas de Europa, Asia y América.

Estos animales viven, cazan y se reproducen en manada, y pueden hacer todo ello tanto de día como de noche. Poseen unos sentidos muy afinados, entre los que destaca un excelente olfato que les permite detectar a sus presas a grandes distancias.

Existen numerosas subespecies de lobos y otros cánidos salvajes emparentados con ellos, pero el perro doméstico es sin duda la más exitosa y extendida de todas ellas, gracias a su estrecha relación con el ser humano.

Luciérnaga (Lampyridae)

Las luciérnagas son insectos coleópteros que conforman una familia denominada lampíridos. Su principal característica y la que les da nombre es la capacidad de emitir luz, lo que las hace muy visibles durante la noche.

Estos insectos utilizan la luz, que generan mediante bioluminiscencia, para comunicarse entre ellos y como una forma de llamarse en épocas de apareamiento. Así, machos y hembras utilizan diferentes patrones de destellos durante el vuelo para buscar pareja.

Mono nocturno (Aotus)

Los monos o micos nocturnos son un género de primates que viven en las junglas de Centroamérica y Sudamérica. Como su nombre sugiere, son animales nocturnos que se alimentan de los insectos que aparecen durante las horas de oscuridad. Pueden localizarlos con facilidad gracias a sus grandes ojos.

Los monos nocturnos se comunican entre ellos a base de una amplia variedad de aullidos y sonidos diferentes que conforman un canto muy característico de las zonas en las que viven estos animales.

Murciélago (Chiroptera)

Los murciélagos son un grupo de mamíferos cuyas extremidades superiores evolucionaron para permitirles volar. Muchas personas desconocen que las alas de los murciélagos son, de hecho, sus patas delanteras, y las partes duras entre las membranas son dedos.

La característica más sorprendente de los murciélagos es que vuelan y cazan en la oscuridad gracias a su ecolocalización: emiten ultrasonidos que, al rebotar, les indican la posición de los objetos y criaturas que los rodean. Poseen, en definitiva, un sónar biológico; así, un murciélago ciego puede volar sin problema, pero uno sordo se queda completamente desorientado.

Los murciélagos tienen mala fama y se los suele asociar al terror y al vampirismo, pero lo cierto es que la inmensa mayoría de ellos son inofensivos y solo se alimenta de fruta e insectos. Solo tres especies de murciélagos son hematófagas.

Pantera nebulosa (Neofelis nebulosa)

La pantera nebulosa o leopardo longibando es un felino originario de China y otros países del Sudeste Asiático. Solo sale de noche, lo que unido a su preferencia por las junglas más densas e impenetrables, hace que aun hoy sea un animal relativamente desconocido. Recibe su poético nombre de las manchas que recubren su cuerpo, parecidas a nubes.

Estos felinos son de tamaño mediano (hasta 110 cm de longitud y entre 20 y 60 kg) y pasan casi toda su vida en los árboles, por los que se mueven con gran agilidad.

Se ignora cuántas panteras nebulosas quedan en la actualidad, pero se cree que la especie podría estar en peligro de extinción debido a la progresiva destrucción de su hábitat natural.

Polilla (Heterocera)

Las polillas o heteróceros son un amplio grupo de insectos lepidópteros que en muchos casos no están relacionados, pero tienen un aspecto más o menos similar y ser principalmente de hábitos crepusculares o nocturnos.

De hecho, a estos insectos también se los llama mariposas nocturnas. Pero en general las polillas nocturnas suelen ser menos vistosas y tienen colores más apagados que las mariposas que viven de día.

En muchas partes del mundo son consideradas una plaga por su impacto sobre las cosechas, su tendencia a depredar a otros insectos beneficiosos (como las abejas) o su costumbre de alimentarse, en su forma larval, de tejidos como la lana o la seda.

Existe una especie de polilla que es especialmente conocida en su forma de oruga por el peligro que supone para niños y mascotas: es la procesionaria del pino.

Rana verde de ojos rojos (Agalychnis callidryas)

La rana verde o arbórea de ojos rojos es un diminuto y hermoso anfibio originario de Centroamérica. Destacan por sus vivos y brillantes colores, que suelen tener como base el verde, pero incluyen también azul, amarillo y rojo.

También son de un vivo color rojo sus ojos, enormes en relación con su cuerpo y que la señalan como un animal de costumbres preferentemente nocturnas.

Las ranas verdes de ojos rojos pasan su vida en los árboles, alimentándose de insectos, aunque nunca se alejan demasiado de los cuerpos de agua.

Zorro rojo (Vulpes vulpes)

Cerramos nuestro listado de animales nocturnos con el zorro rojo o zorro común, un escurridizo cánido ampliamente distribuido por Norteamérica y Eurasia.

Los zorros son animales inteligentes y cautelosos que prefieren cazar y moverse durante las horas nocturnas, lo que pueden hacer sin problema gracias a sus finos sentidos del oído y olfato.

Por su característico aspecto -cuerpo elegante, grandes orejas, melena roja y cola amplia y esponjosa- y su tradicional asociación a conceptos como el ingenio y la astucia, el zorro ha protagonizado desde siempre innumerables leyendas y cuentos del folclore humano.