La historia de amor entre Barby Franco y Fernando Burlando es un ejemplo de encuentro inesperado que se convirtió en una relación sólida a lo largo del tiempo. Se conocieron hace 12 años en el famoso programa de televisión "El último pasajero", donde Burlando acompañó a su hija, Delfina, quien participaba en el programa mientras Barby trabajaba como azafata.
A pesar de la diferencia de edad de 27 años, el flechazo fue instantáneo y Burlando logró obtener el número de Barby Franco a través de un amigo en común de la producción. Aunque al principio prefirieron mantener su romance en privado, su química era evidente para quienes los rodeaban.
Su primera cita fue poco convencional, ya que decidieron visitar la cárcel de Ezeiza juntos. "Una de las primeras citas con Barby fue proponerle ir a la cárcel de Ezeiza. Me re bancó", reveló Burlando en una entrevista, destacando la complicidad y la aventura que comparten como pareja.
A pesar de sus diferencias, ambos encuentran en su relación una fuente de alegría y apoyo mutuo. Burlando describió a Barby como "sumamente divertida" y destacó cómo ella puede sacarle una sonrisa incluso en los momentos más difíciles. A lo largo de los años, han enfrentado diversos desafíos juntos, incluyendo la posposición de su casamiento debido a diferentes conflictos.
"Somos polos apuestos. Barbarita es sumamente divertida, no tiene freno la diversión con ella. Un poco la clave de la convivencia y de la felicidad se trata de cuando una persona te puede sacar una sonrisa en los momentos amargos", aseguró Fernando.
Incluso en momentos difíciles, su amor prevalece. En febrero de 2021, cuando la pareja decidió darse un tiempo, Barby confesó haber vendido su anillo de compromiso por mil pesos. Sin embargo, Burlando no se enfureció, sino que le aseguró que habían sido engañados sobre su valor real.
Sin embargo, Barby estuvo cuando Burlando estuvo muy complicado de salud y su amor volvió más fuerte que nunca, siendo Sarah, su hija, la prueba irrefutable de esto.