Destino de caballero (2001), de Brian Helgeland

La Edad Media con el tema "We Will Rock You" de Queen. Torneos con el público en pie gritando mientras hace... ¡la ola! El efecto buscado no es cómico (no del todo) sino dramático: se quiere aproximar la historia al espectador de hoy. Intento innecesario, pues la cercanía la dan las grandes cuestiones universales: lucha entre el bien y el mal, la conquista ardua del amor de la dama, la nobleza de corazón superior a la certificada por el árbol genealógico más pistonudo. Destino de caballero sin toques “mo-del-nos” sería un título de aventuras de los de toda la vida: los toques anacrónicos ni quitan ni ponen.

El mundo de la caballería, de las justas medievales y los lances de honor, ha dado lugar a un puñado de héroes inolvidables en películas donde la aventura lo es todo. Toma nota.

El Cid

En 1961 Charlton Heston fue el mítico héroe español en una megalítica superproducción dirigida por Anthony Mann. Heston borda el papel de Rodrigo Díaz de Vivar y está acompañado de Raf Vallone y de una hermosísima Sofía Loren en el personaje de Jimena. El director maneja los grandes espacios y conjuga épica y romance con perfección.

Excalibur

La espada del Rey Arturo da título a este film de John Boorman, ya un clásico. El cineasta inglés sorprendió por los ambientes oscuros y misteriosos, ideales para ceder la mayor parte del protagonismo al inquietante mago Merlín (Nicol Williamson), conciencia permanente del rey. Una de las mejores películas sobre la leyenda artúrica escrita por Sir Thomas Malory.

Enrique V

Entre los grandes caballeros de la historia se encuentra el rey Enrique V de Inglaterra. Kenneth Branagh adapta el texto de Shakespeare con lucidez y nos lleva a los campos ingleses para contar la transformación del joven monarca y la legendaria batalla de Agincourt contra los franceses. Algunas escenas, como el discurso del rey y los minutos finales tras la batalla (con las notas del “Non nobis...” de fondo), son verdaderas joyas.

El primer caballero

Richard Gere es en esta peli el caballero Lanzarote, el joven solitario y arrogante que fue mano derecha del Rey Arturo. Pero su amor por Ginebra (espectacular Julia Ormond) le hace caer en desgracia. Sean Connery compone un Rey Arturo fantástico, honorable y de corazón tan grande como su reino de Camelot. El director Jerry Zucker prima la aventura por encima de la leyenda.

Ivanhoe

Pocas veces estuvo tan bella Elizabeth Taylor como en esta película. Ella es Rebeca, la judía que lucha con Lady Rowena (Joan Fontaine) por el amor del joven caballero Wilfred de Ivanhoe. Robert Taylor da vida al protagonista de esta adaptación de la obra de Sir Walter Scott, donde Richard Thorpe nos deleita con justas y lances en la Inglaterra de Ricardo Corazón de León y su traicionero hermano Juan Sin Tierra.

Kagemusha

También Akira Kurosawa sabía, y mucho, de caballeros medievales. Kagemusha, ambientada en el siglo XVI, narra la historia de un hombre corriente que de la noche a la mañana se hace pasar por un señor de la guerra. El director japonés no se limita a rodar escenas de acción, sino que se adentra en un drama humano sobre la identidad y el destino. Fue Palma de Oro en Cannes en 1980.

Robin Hood

La versión de Michael Curtiz, de 1938, es la mejor adaptación cinematográfica de las hazañas de Sir Robin de Locksley, el famoso ladrón del bosque de Sherwood que lucha contra la tiranía de Juan Sin Tierra. Errol Flynn encontró un papel que le iba como anillo al dedo: guasón, atrevido e impertinente. Le acompañan una adorable Olivia de Havilland, en el papel de Lady Marian, y un siempre convincente Claude Rains. La película ganó tres Oscar.

El rey pescador

Terry Gilliam presenta un caballero bastante rarete. En la peli, ambientada en la época actual, el controvertido Robin Williams, presa de la locura, marcha en busca del Santo Grial en pleno Nueva York. Jeff Bridges es elegido para echar una mano al excéntrico caballero y encontrar así su propia redención. Fantasía, mito y seductora imaginería componen una obra única que mezcla drama y comedia.

Como si de unos juegos olímpicos se tratara, la película recoge escenas de gran competitividad. La aventura está al servicio del juego, y el juego se convierte en algo más que espectáculo. Los torneos, nacidos en el siglo XII tenían como objetivo mejorar las aptitudes guerrera de los caballeros, algo así como entrenar a vida o muerte. Con el tiempo, las justas adquirieron un talante más moderado y los caballeros viajaban hasta Inglaterra, Escocia, España. Italia, Francia, Alemania, Rusia o Bélgica para participar en ellas. Su rivalidad ya presagiaba la que existe actualmente en los grandes deportes de masas.

Poeta genial de las andanzas de los caballeros del medievo, Geoffrey Chaucer (1342-1400) es célebre mundialmente por sus 'Cuentos de Canterbury'. Aquí, aparece con trazas de trovador, pícaro insolente y vividor simpático, encarnado con oficio por Paul Bettany. Gracias a su florida palabrería todos conocerán al caballero Sir Ulrich von Lichtenstein.