Ígor Denisov, capitán de la selección rusa de fútbol entre 2012 y 2016, retirado desde 2019, ha sido el último deportista en posicionarse públicamente en el conflicto bélico que se está desarrollando en Ucrania desde el 24 de febrero. En una entrevista de casi dos horas en el canal ruso de YouTube Nobel, el exfutbolista del Lokomotiv y Dinamo de Moscú, Zenit de San Petersburgo y Anzhi ha condenado la guerra impulsada por el presidente ruso, Vladimir Putin. "Es un completo horror", aseguró.
A lo mejor me arrestan o me asesinan después de estas palabras
A sus 38 años, Denisov se ha convertido en el deportista ruso de mayor reconocimiento social en manifestar su opinión contraria a la invasión. Sabe perfectamente que, en una situación así, en la que los derechos y las libertades particulares se ven muy restringidas y el control mediático por parte del gobierno es máximo, sus palabras pueden acarrear severas consecuencias para él y sus seres queridos: "A lo mejor me arrestan o me asesinan después de estas palabras, pero estoy diciendo las cosas como son".
Legislación rusa
El Parlamento ruso aprobó una ley que permite imponer penas de hasta 15 años de cárcel por criticar a Putin
Denisov considera que ser uno de los grandes iconos deportivos de Rusia que todavía residen en el país puede afectarle más que al resto. El Parlamento ruso aprobó una nueva ley que permite imponer penas de hasta 15 años de prisión por manifestarse públicamente contra la maniobra militar del ejército de Putin. No obstante, el exfutbolista no se arrugó ante el entorno amenazante.
Estaba dispuesto a arrodillarme ante Putin para que lo parara todo
Durante la entrevista, admite que llegó a escribirle al presidente pidiéndole que recapacitara y frenara la ofensiva. "Yo incluso le dije: 'Estoy dispuesto a arrodillarme ante usted'. Yo soy un tipo orgulloso... Estaba dispuesto a arrodillarme para que lo parara todo ¿Qué importa la vida de una persona? ¿Quién es Denisov?", confesó.
Sobre las consecuencias del conflicto a nivel deportivo, el goleador en la final de la Copa de la UEFA de 2008 con el Zenit cree que es justificable la exclusión de los clubes rusos y de la selección nacional de todas las competiciones internacionales en las que participaban. Según él, Putin no es el único responsable de la guerra: "Si nuestro país entró allí, yo considero que es culpa de todos nosotros".
Si nuestro país entró allí, es culpa de todos
Denisov es consciente de que su opinión no servirá de nada. Tampoco la de un millón de personas. "Solo cuando todos, los 144 millones de habitantes rusos, entiendan que esto es incorrecto, podrá cambiar algo", aseguró el exjugador. De los futbolistas del país en activo, solo Fiódor Smólov, delantero del Dinamo de Moscú que pasó por el Celta de Vigo, expresó públicamente su desacuerdo con la guerra, a través de sus redes sociales.
Solo cuando los 144 millones de rusos entiendan que esto es incorrecto podrá cambiar algo
Apeados sus equipos de competiciones europeas y su selección de la UEFA Nations League y la fase de clasificación para el Mundial de Qatar que comenzará en noviembre de este año, Rusia afronta una grave crisis deportiva. Eventos con sede en el país se han cancelado o han cambiado de localización, como sucedió con la final de la Champions League, programada para disputarse en San Petersburgo y finalmente celebrada en París; o el Gran Premio de Sochi de Fórmula 1, que ha sido directamente suspendido.
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