Biografia de Víctor Manuel II

Víctor Manuel II

�ltimo rey de Cerde�a-Piamonte y primer rey de Italia (Tur�n, 1820 - Roma, 1878). Accedi� al Trono sardo-piamont�s en 1849, al abdicar su padre Carlos Alberto tras fracasar en el intento de eliminar la influencia austriaca en Italia y abrir el camino para la unificaci�n peninsular.


Víctor Manuel II de Italia

A pesar de la derrota de su padre por los austriacos en la batalla de Novara (1849), V�ctor Manuel II mantuvo la monarqu�a constitucional dise�ada en el Estatuto Real de 1848, que se convirti� -a pesar de su moderaci�n- en el r�gimen m�s liberal que qued� en Italia despu�s de la represi�n de los movimientos revolucionarios por el ej�rcito austriaco que mandaba Radetzky. Respet� escrupulosamente el marco constitucional y llam� a gobernar a personajes caracterizados por sus ideas liberales y nacionalistas, si bien en una versi�n tan moderada como la de Camillo Benso, conde de Cavour, que fue su primer ministro desde 1852.

La paciente labor diplom�tica de �ste cre� las condiciones para que el emperador franc�s Napole�n III se comprometiera a apoyar al Piamonte en una guerra contra Austria, que efectivamente tuvo lugar en 1859. Derrotados los austriacos por las fuerzas franco-piamontesas en las batallas de Magenta y Solferino, Napole�n III detuvo la guerra antes de obtener su objetivo �ltimo, que era expulsar a los austriacos de Italia, por el temor a una intervenci�n prusiana. Piamonte obtuvo la anexi�n de Lombard�a (Tratado de Z�rich, 1859), pero el V�neto sigui� en manos austriacas e Italia permanec�a dividida.

V�ctor Manuel II se vio obligado a aceptar esta situaci�n, que conllev� la cesi�n a Francia de Niza y Saboya -por los servicios prestados- y la dimisi�n de Cavour (1860). Sin embargo, la guerra hab�a hecho estallar por toda Italia revueltas de inspiraci�n liberal y nacionalista que, al grito de Italia y V�ctor Manuel, luchaban por la unificaci�n del pa�s. En varios Estados italianos, como Parma, M�dena y Toscana, se celebraron plebiscitos que determinaron la anexi�n al Reino de Cerde�a-Piamonte; y lo mismo ocurri� en Bolonia, que qued� as� escindida de los Estados Pontificios e incorporada igualmente al reino de V�ctor Manuel (1860).

Al mismo tiempo, una expedici�n revolucionaria encabezada por Garibaldi hab�a partido del Piamonte, y tras desembarcar en Sicilia, derrot� a las tropas de los Borbones y amenaz� N�poles. Con el pretexto de impedir que los garibaldinos atacaran al papa, V�ctor Manuel envi� un ej�rcito piamont�s que fue el que realmente derrot� a las tropas papales (batalla de Castelfidardo, 1860) y determin� la anexi�n al Piamonte -previo refer�ndum- de las Marcas y Umbr�a, regiones pertenecientes hasta entonces a los Estados Pontificios.

Luego siguieron avanzando hacia el sur para frenar a Garibaldi; pero este revolucionario radical renunci� a toda aspiraci�n pol�tica sobre los territorios que controlaba en el sur de Italia, y tras una entrevista con V�ctor Manuel, le entreg� Sicilia y N�poles y le proclam� rey de Italia. Despu�s completaron juntos la rendici�n del Reino de N�poles y un primer Parlamento italiano reunido en Tur�n proclam� oficialmente a V�ctor Manuel II rey de Italia, extendiendo el r�gimen del Estatuto.

Venecia sigui� en poder del Imperio Austro-H�ngaro hasta 1866, cuando V�ctor Manuel II pudo aprovechar la guerra entre Prusia y Austria para aliarse con la primera y arrebatar Venecia a la segunda (Paz de Viena). Quedaba Roma en poder de los papas y protegida por una guarnici�n francesa, pero reclamada por el gobierno de Italia como capital de su Estado; nuevamente fue una guerra exterior la que permiti� conquistarla, en este caso la Guerra Franco-Prusiana, que hundi� al Segundo Imperio Franc�s y dej� desprotegido al papa, facilitando la conquista de la ciudad por los italianos en 1870.

V�ctor Manuel traslad� all� su capital, pero vio abrirse un nuevo conflicto para su r�gimen, al exacerbarse la enemistad del papa P�o IX, que se consider� a s� mismo prisionero en sus palacios del Vaticano, excomulg� al rey y neg� toda legitimidad al Estado italiano unificado. Esto se a�ad�a a los problemas de integraci�n entre los antiguos Estados italianos y al resentimiento por la imposici�n en todos ellos de las instituciones y la influencia pol�tica del Piamonte.

C�mo citar este art�culo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].