Información y características de Salterio

El salterio es un instrumento musical de cuerda que ha dejado una huella significativa en la historia y herencia musical desde la Edad Media hasta la actualidad. Por ello, ahora exploraremos su origen, evolución, características y cómo se toca.

Tipos de Salterio

A lo largo de la historia han existido muy pocos tipos de Salterio, por lo que se ha mantenido original en su esencia. Actualmente, existen dos tipos principales de este instrumento:

• Salterio de Cuerda Pulsada: En este tipo de salterio, las cuerdas se pulsan con púas, plectros (más común en la época medieval) o con los mismos dedos. Las notas se producen al tocar las cuerdas de manera controlada.
• Dulcimer o Dulcémele (Salterio de Cuerda Percutida): El dulcimer se golpea con martillos. Dependiendo de la cultura, también se le llama santur o címbalo. Los martillos pueden crear melodías o un acompañamiento rítmico. El dulcimer es considerado el precursor del clavicémbalo.
• Salterio de Arco: Este tipo es menos común que los anteriores. El sonido se extrae frotando el arco contra las cuerdas. Las cuerdas pueden ser de nylon o de metal y están fijadas a una caja de resonancia plana. La forma del marco puede ser triangular o trapezoidal. Se puede tocar sosteniendo el instrumento en el regazo, sobre las piernas o sobre un soporte.

En la Edad Media, la orientación de las bocas del instrumento tenía su propio significado e interpretación: si las bocas del instrumento estaban orientadas hacia arriba, se consideraba que el sonido estaba proyectado hacia Dios. Si las bocas miraban hacia adelante, el sonido estaba proyectado hacia el hombre

Características del Salterio

El salterio consiste en una caja de resonancia plana, que forma la totalidad del cuerpo del instrumento. A diferencia de las guitarras o bajos, el salterio no tiene mástil. Su forma trapezoidal o triangular le da un carácter distintivo. Las cuerdas originales eran de metal y se extienden de un extremo al otro de la caja. Se pueden golpear con palos o una varilla metálica, o bien pulsar directamente con los dedos o púas, similar al «fingerstyle guitar«.

En la antigüedad, existían también los Salterios medievales y renacentistas, los cuales pertenecían a la época dorada del salterio, la cual fue entre los siglos XII y XV. La mayoría de representaciones del salterio fueron encontradas en manuscritos, pinturas o esculturas pertenecen a esos siglos.

Cómo Tocar el Salterio

Para tocar un salterio, primero es necesario afinar cada cuerda según la nota deseada. Luego, se puede tocar con los dedos o con un plectro (una pequeña púa) para producir el sonido. La técnica consiste en pulsar la cuerda con el dedo o el plectro y luego dejarla vibrar para crear sonidos maravillosos. A continuación, se mostrarán algunas técnicas para poder tocar el Salterio:

• Siéntate cómodamente con el salterio apoyado sobre tus piernas o en una superficie estable.
• Asegúrate de que la caja de resonancia esté nivelada y no se mueva mientras tocas.
• Mantén una postura relajada y natural para evitar tensiones innecesarias.
• Si eres diestro, utiliza la mano derecha para pulsar las cuerdas.
• Si eres zurdo, utiliza la mano izquierda.
• Experimenta con diferentes técnicas de pulsación para encontrar la que te resulte más cómoda.

Historia del Salterio

Las primeras ilustraciones y esculturas que incluyeron al salterio en Europa datan del siglo XII. Sin embargo, su origen se remonta a la Antigua Grecia. En aquella época, alrededor del 320 a.C., este instrumento era un poco diferente, más parecido a un arpa. Con el tiempo, evolucionó y se adaptó a diferentes culturas.

Otro predecesor proviene de Asia, específicamente de Japón, donde se encuentra una escultura del siglo XIV que representa un salterio. Hoy en día, este instrumento sigue tocándose en muchas partes del mundo, formando parte importante de la música tradicional en España, donde se le conoce como «chicotén» en Aragón y «txun-txun» en Navarra y País Vasco.

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Medievales y Renacentistas

La época dorada del salterio tuvo lugar entre los siglos XII y XV. Su forma variaba según la región o el uso. Algunos modelos tenían pares de cuerdas para cada nota, mientras que otros se fabricaban en órdenes de 3.

Música con este instrumento

El salterio ha sido parte importante de la historia y herencia musical desde la Edad Media hasta la actualidad. Su versatilidad le permite adaptarse a diferentes géneros y contextos musicales:

• Música Tradicional: Este instrumento se ha utilizado en la música tradicional de diversas culturas. Desde baladas hasta rondallas, su sonido armoniza melodías y acompaña canciones populares.
• Música Sacra: Durante la Edad Media, este instrumento fue esencial en las iglesias y catedrales. Se utilizaba en la música sacra y formaba parte de las ceremonias religiosas.
• Música Profana: También se tocaba en la música profana, tanto en solitario como en conjunto con otros instrumentos y voces. En las cortes y eventos populares, el salterio era un elemento clave.
• Música Folklórica: Este instrumento es parte integral de la música folklórica en diferentes culturas. Puede acompañar danzas, canciones populares y celebraciones locales.
• Balada Experimental: Algunos músicos exploran sonidos únicos y experimentales con este instrumento. Su resonancia y timbre distintivo lo hacen ideal para composiciones vanguardistas.
• Música Contemporánea: Compositores modernos han incorporado este instrumento en sus obras. Puede formar parte de conjuntos de cámara, música minimalista o incluso fusiones con otros géneros.

Acompañamiento al Salterio

El salterio, con su rica historia y versatilidad, puede ser acompañado por varios instrumentos musicales. Algunas opciones comunes son:

• Guitarra: La guitarra proporciona un acompañamiento armónico y rítmico que complementa las melodías del salterio.
• Flauta: La flauta agrega una textura melódica y etérea, creando armonías sutiles junto al salterio.
• Violín: El violín puede entrelazar sus notas con las del salterio, creando una atmósfera cálida y emotiva.
• Percusión: Instrumentos de percusión como el darbuka, cajón o pandereta pueden añadir ritmo y energía.