El pasado mes de agosto medio mundo se paralizó: fallecía la Reina Isabel II y no solo Inglaterra sino el resto del planeta vivió varios días pendiente de los medios de comunicación. Todos los detalles del funeral, la historia de la longeva monarca, sus crisis con su polémica familia y el afamado protocolo del London Bridge.

El fallecimiento de una reina tras siete décadas con la corona daba para contar absolutamente todo, incluso qué pasaría con sus adorados perros. Todo menos la causa de su muerte. Ha sido ahora, cuatro meses después cuando a través de un amigo de la familia se ha sabido cuál es la enfermedad que provocó su deceso.

Gyles Brandreth, amigo cercano del también fallecido duque de Edimburgo, ha lanzado un libro en el que revela cómo fueron los últimos meses de Isabel II y en el que explica que padecía un cáncer de médula ósea. "El mieloma explicaría su cansancio y pérdida de peso esos problemas de moivilidad de los que con frecuencia nos hablaron durante el último año de su vida", indica la publicación.

De hecho, los comentarios acerca del estado de salud de la monarca británica fueron una constante: su delgadez, los moratones en sus manos y su debilidad levantaron un sinfín de especulaciones a las que Buckingham jamás respondió. Ni siquiera cuando el estado de la Reina obligó a cancelar algunos actos oficiales, pese a la alarma que generaron estas suspensiones.

Un momento del funeral de Isabel II. E. D.

Última aparición

ncluso la última vez en que se vio a Isabel II también llamó la atención su aspecto. Fue solo dos días antes de que falleciera el 8 de agosto en la recepción a la ya exprimera ministra Liz Truss y que se produjo en el castillo de Balmoral. "La verdad es que Su Majestad siempre supo que el tiempo que le quedaba era limitado. Ella aceptó esto con todo con la gracia que era de esperarse”, afirma Gyles Brandreth.

Varias semanas después del fallecimiento de la reina Isabel II de Inglaterra se hizo público el certificado oficial de fallecimiento, un documento que revela que la soberana, de 96 años, murió a causa de su «edad avanzada». La hora de su muerte fue a las 15:10 horas del 8 de septiembre, más de tres horas antes de que la noticia se comunicara al público.