En el marco del programa “Contigo en la distancia”, la SECULT presentó la obra con un mensaje de aceptación, amor e igualdad

A través de la página de Facebook de la Secretaría de Cultura, se presentó la obra de teatro “Príncipe y Príncipe”, de Perla Szuchmacher, con la dirección de Artús Chávez, y con las actuaciones de Anahí Allué, Miguel Romero, Christopher Aguilasocho, Eduardo Siqueiros, Margarita Lozano y Andrea Biestro.
La obra trata del  príncipe Tadeo, quien deberá decidir entre casarse con una de las princesas que han arribado a su reino por invitación de su madre, la reina Clementina, y lo que su corazón le dicta: conocer el lado maravilloso del amor.
Esta obra de teatro para niñas y niños, recuerda que el amor se celebra, que nadie tendría que esconderlo, avergonzarse por amar o negarse a experimentarlo.
Un poco holgazán y consentido, es el príncipe Tadeo, su estilo de vida y tranquilidad contrastan totalmente con la forma de ser de su madre, la reina Clementina, quien diligente y comprometida con su pueblo y las labores de la corona, no tiene ni un momento de descanso en su apretada agenda real.
Exhausta de trabajar cada día y entregarse a inauguraciones, reuniones diplomáticas, comidas y encuentros con campesinos, la reina Clementina toma la decisión de jubilarse y ceder la corona a su amado hijo, pero para que esto sea posible, el príncipe debe casarse y tomar posesión del reino.
¡Tadeo debe casarse!, es la decisión, no hay otra posibilidad y pese a las resistencias del príncipe, éste termina por ceder. Pronto la reina buscará entre una larga lista de princesas a la que desposará a su hijo y junto a él se convierta en reina.
¿Quién será la elegida? ¿Será la princesa de Groenlandia? ¿Será la princesa Estrella Fugaz? ¿Será la princesa Celeste?
Tras una larga búsqueda, el príncipe resuelve que no se siente atraído por ninguna princesa. Entonces ¿Dónde está el amor para el príncipe Tadeo?
Ser uno mismo es el mensaje de “Príncipe y Príncipe”, una obra de teatro infantil que a simple vista sigue una narrativa similar a la de otros cuentos de hadas: hay un príncipe, princesas, un reino, hechos fantásticos y sobre todo amor.
Sin embargo, esta obra es una apuesta por mostrar a un público infantil que el amor está más allá de los prejuicios, de las imposiciones sociales, de los mandatos, del género y del sexo, pues en esta historia el amor entre dos hombres no es ni siquiera cuestionado.
“Príncipe y Príncipe” es un ejercicio teatral lleno de humor para enseñar a las y los más pequeños (y no tanto), que el amor es para todos, que a nadie le es ajeno ni está condicionado a unos u otros; es una herramienta que recuerda que el amor se celebra, que nadie tendría que esconderlo, avergonzarse por amar o negarse a experimentarlo solo por los dichos y prejuicios de alguien más. I IHH