Similitudes y diferencias de las juras de bandera del rey Felipe VI y de la princesa Leonor

El rey en solitario, la princesa acompañada

El 11 de octubre de 1985, el cadete Borbón juró bandera en solitario, ante la presencia de las máximas autoridades políticas y militares españolas. El 7 de octubre de 2023, la princesa Leonor fue la protagonista de una ceremonia similar, aunque con varias diferencias. Sin duda, la más importante fue que realizó dicho acto junto a sus compañeros de promoción, al contrario que su padre.

El rey también besó la bandera como Leonor. Así mismo, tras prometer dar su vida por España, la princesa se dirigió a hacer su juramento militar entre aplausos. Lo hacía la primera. El resto de sus 410 compañeros y compañeras cadetes, de tres en tres, pasaba bajo la bandera para que España aceptara su promesa.

Familia real completa o solo el rey y la reina

Bajo la mirada de su padre, don Juan Carlos, y de todas las autoridades del Estado, entre ellos, Felipe González, que era el presidente del Gobierno de España entonces, juró el cadete Borbón. Es una de las principales diferencias con el acto de la princesa de Asturias. En la ceremonia histórica y solemne del rey Felipe VI, la Familia Real estuvo presente al completo, con las infantas Elena y Cristina y don Juan, su abuelo.

Sin embargo, en el acto que protagonizó la cadete Leonor, la princesa respondió junto a sus compañeros de promoción: "Sí, juramos" pero solo ante la mirada cómplice del rey Felipe VI y la reina doña Letizia. El Jefe del Estado Mayor de la Defensa, Amador Enseñat, el almirante general, Teodoro López Calderón, y la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, también asistieron.

Diferentes expresiones de las reinas

En 1985, la reina doña Sofía permanecía seria durante la ceremonia del príncipe de Asturias, pero, en 2023, doña Letizia sonreía emocionada, y aplaudía a su hija tras el reconocimiento del director de la Academia General. Es "el acto, sin duda, más trascendente de toda la vida profesional de un militar o una militar. Con un beso en la bandera, se materializa la promesa de defender a España a costa de la propia vida", según explican a RTVE fuentes de Defensa.

Esa diferente expresividad emocional es otra de las claves que se ha normalizado en la monarquía española. Doña Letizia dijo adiós a su hija con un emotivo y sentido abrazo cuando despidió a doña Leonor, al comenzar esta su formación militar en la academia.

Mismo paso de revista, diferentes discursos

Don Juan Carlos de Borbón pasó revista a los cadetes hace 39 años. En su discurso, se dirigió directamente a don Felipe, resaltando el importante y valioso papel que le correspondía desempeñar. Fue un acto hecho a medida para el príncipe de Asturias, que formalizó su futuro como jefe del Estado y mando supremo de las Fuerzas Armadas. Aunque no faltaron las tradiciones militares, por ejemplo, cuando los cadetes cantaron el clásico himno de la Legión, La muerte no es el final.

El rey Felipe VI terminó desfilando con sus compañeros de promoción. Por su parte, también Don Felipe cumplió la tradición del saludo a la cadete Borbón y a sus compañeros. En la jura de la princesa de Asturias, la ceremonia terminó con los cadetes cantando el himno de La General como se conoce, popularmente, a la Academia y con un desfile militar.

Sin embargo, los discursos de ambos monarcas difieren en su tono, siendo más cercano el del actual rey: "Querida Leonor. Recuerda que el compromiso que has asumido conlleva la mayor responsabilidad con España. Sabes bien como princesa heredera que la Corona simboliza su unidad y su permanencia. Sé que el juramento solemne ante esta bandera y el cariño por esta tierra zaragozana y aragonesa, que te acoge, formarán parte de tus mejores recuerdos. Sé que también tendrás presente que tu responsabilidad, en cualquier circunstancia y en todo momento, es servir a España con toda tu energía y determinación".

Por otra parte, el rey emérito se dirigía al cadete Borbón y a su promoción con mayor solemnidad: "No olvidéis nunca, repito, que ese compromiso conduce al mayor sacrificio, sacrificio que exige la profesión militar y que constituye la mejor lección para la conducta del hombre a través de toda su existencia". 

La continuidad de la monarquía

Tanto el rey Felipe VI como la princesa de Asturias ratifican, públicamente, el compromiso de cumplir con sus obligaciones militares en lo referente a la defensa de España y de su ordenamiento constitucional. Ambos actos refuerzan la continuidad de la monarquía española. Concluyen con el desfile de las Unidades de cadetes y la despedida a la bandera con honores. La princesa Leonor juró la bandera en la Academia General de Zaragoza, igual que lo hicieron su padre, el rey Felipe y su abuelo, el rey Juan Carlos.

Para un militar, la ceremonia supone el compromiso con la defensa de España y con su ordenamiento constitucional, un compromiso mayor para una heredera al trono de España, que será el mando supremo de las Fuerzas Armadas en el futuro. La próxima reina de España firmó en el libro de honor de la academia frente a su padre en un acto que simboliza la persistencia monárquica.