La reina Margarita de Austria, a caballo
1778. Aguafuerte, Punta seca sobre papel verjurado, ahuesado, 370 x 315 mmNo expuesto
Entre 1777 y 1778 diversos ilustrados manifestaron su preocupación por la falta de grabadores que acometieran el proyecto de reproducir las pinturas que se conservaban en las colecciones españolas, fundamentalmente en los Palacios Reales, como medio para dar a conocer a nacionales y extranjeros la riqueza y el valor de nuestra pintura. Goya se hizo eco de esta idea y comenzó a grabar una serie de láminas en las que copió algunas de las más importantes pinturas de Velázquez conservadas en Palacio. Con ello no solo mostró su espíritu ilustrado, al compartir esta preocupación manifestada por Antonio Ponz entre otros, sino que alcanzó dos objetivos esencialmente artísticos: estudiar la pintura de Velázquez, que estará presente desde entonces en su propia obra, y aprender de forma autónoma el aguafuerte, técnica de grabado que le permitía una enorme libertad frente a la académica y compleja talla dulce, y que constituirá la base sobre la que se asentarán el resto de sus series de estampas: Caprichos, Desastres de la guerra, Tauromaquia y Disparates. El 28 de julio de 1778 se anunciaba en la Gaceta de Madrid la venta de: “Nueve estampas dibuxadas y grabadas con agua fuerte por Don Francisco de Goya Pintor; cuyos originales del tamaño del natural pintado por Don Diego Velazquez existen en la Colección del Real Palacio de esta Corte. Representan figuras eqüestres de los reyes Felipe III y Felipe IV, y de las Reynas Doña Margarita de Austria y Doña Isabel de Borbón, y la de Don Gaspar de Guzman Conde Duque de Olivares, las figuras en pie de Menipo y Esopo y de los enanos sentados. Se venden en la librería de Don Antonio Sancha en la Aduana vieja, y en la de Don Manuel Barco, carrera de San Gerónimo. Sus precios son, las figuras eqüestres a 6 reales y las restantes a 3; y se darán juntas y separadas”. (Texto extractado de: https://www.museodelprado.es/goya-en-el-prado).
La estampa reproduce el lienzo de Velázquez del mismo título (P01177). Representa a la reina Margarita de Austria a caballo que sostiene con ambas manos las riendas. Goya introduce algunas variaciones con respecto al lienzo original de Velázquez. "Las amplias lejanías velazqueñas parecen rodear aquí de cerca a la figura, la dura sequedad del traje de corte se suaviza en Goya y brilla en sedas y terciopelos que adquieren un carácter curiosamente dieciochesco, el sombrero de plumas, se convierte en el aguafuerte en un gracioso adorno que recuerda los de las damas de la Corte de Carlos IV. Goya empieza ya a dejar traslucir su personalidad de copista “irreverente”. (Mena, M. en Goya und Velázquez: das konigliche portrait. Goya y Velázquez: el retrato real, Madrid, 1991, p. 859).
Se trata de una primera edición, según Harris, con la lámina sin biselar pero con letra (Harris, T. Goya: Engravings and lithographs, San Francisco, 1983, vol. 2, p. 12, no 6/III/1. Este ejemplar está encuadernado en un álbum de estampas, de la colección Douglas-Pennant, grabadas por diferentes autores según pinturas de Velázquez (véase G02277). Para otras ediciones véase G00043 y G01784.