El talento de hacerse vagabundo: Los Viajes de Sullivan (1941)

El talento de hacerse vagabundo: Los Viajes de Sullivan (1941)

Los viajes de Sullivan

Para cualquier cinéfilo Los viajes de Sullivan (Preston Sturges, 1941) debe de ser una de las Biblias cinematográficas: ¡conviven casi todos los géneros! No sólo es una comedia dramática que derrocha inteligencia, también hay una mezcla de cine social y de película carcelaria con tintes románticos.

Preston Sturges consiguió dar vida a otra forma de disfrutar el cine, poniendo el foco sobre el valor cultural en la industria cinematográfica. “El cine es el mejor medio educativo que jamás haya conocido el mundo” – exclama John Lloyd Sullivan –. Esta es la frase por la que esta película es especial.

Si la analizamos nos daremos cuenta que es una reivindicación a favor de la cultura porque se nos sugiere preguntas: ¿Qué preferimos? ¿Las películas dramáticas o las cómicas? ¿La historia del cine debe meterse en los colegios e institutos como asignatura obligatoria o debe ser un medio sólo para distraerse?

Es complicado tratar un tema que nunca ha sido importante en la agenda educativa. Pero, ¿por qué tiene que ser necesario, por qué se le menosprecia en los centros educativos de primaria y secundaria? En un siglo se han hecho películas didácticas y Los viajes de Sullivan puede ser una de ellas porque esta llena de enseñanzas y además se adentra en los problemas sociales que hoy en día siguen, por desgracia, vigentes.

Para que el cine entre en los colegios la gente debe mentalizarse que esta película te enseña que tener cultura cinematográfica es imprescindible. Desde su invención todavía se piensa que el séptimo arte no tiene categoría didáctica para incorporarse a las aulas.


¿Por qué retrasar lo inevitable?

Quizá muy pronto, la historia del cine pueda a entrar en los colegios como asignatura obligatoria. El cine es también una herramienta visual muy potente y auténticas obras maestras se están quedando en un segundo plano. Así, películas como las del director Preston Sturges se llenan de polvo con mucho que aportar.

¿Las películas tienen el mismo respeto que tienen los libros? La respuesta es que no, mientras al arte audiovisual se le mire sólo como un entretenimiento no dará el último paso para que los escolares sean más cultos.

John Lloyd Sullivan es una de esas personas a las que uno puede acercarse para explicar como fue la depresión y la pobreza en la primera mitad del siglo veinte pero lo observa con optimismo. John Lloyd Sullivan es un revolucionario dentro de la gran pantalla.    


¿Cuál es la moraleja de Los viajes de Sullivan?

Esta obra es la película de las moralejas y también es un alegato reivindicativo. La historia transcurre durante una crisis económica donde los pobres son cada vez más pobres y los ricos lo son porque fueron listos mientras se acercaba la crisis. La primera vez que la ves es fácil situarlo dentro de la comedia intelectual. Los viajes de Sullivan es un ejemplo de cómo la imaginación puede ser una herramienta de escape de la vida sin olvidar la realidad.

Pero la moraleja de esta película está en su argumento: un director de cine ligero, John Lloyd Sullivan (Joel McCrea), está obsesionado por rodar una película que refleje la miseria de su tiempo titulada: Oh, hermano, ¿dónde estás? Por eso decide conocer de cerca la pobreza y el sufrimiento, así que se aventura a hacerse un vagabundo con la idea de recorrer el país con poco dinero en el bolsillo. Una mañana conoce en una cafetería a una aspirante a actriz de cine (Verónica Lake) y desde ese momento se hacen inseparables pasando por muchos peligros y también momentos dulces. Al final, el trayecto les hace cambiar de opinión y la idea que tiene el director de rodar el sufrimiento la descarta metiéndose en otro proyecto mucho más ameno y cómico.

Una de sus moralejas es que no nos debemos obcecar con nada ni con nadie porque haciendo eso mismo puedes dejar de vivir.


¿La comedia es necesaria para vivir?

Nuestro héroe huye de las comedias. El público es alérgico a las comedias cuando el hambre acecha. John Lloyd Sullivan no la abandona tratando de convencerse de que rodar filmes tolerados es para otras épocas mucho más amables. De este modo, Los viajes de Sullivan es un pequeño ensayo sobre las películas que atrapan al espectador porque en ellas se pretende algo más que hacer soñar. El propio John Lloyd Sullivan al final reconoce: “Hacer reír a la gente me gusta mucho más, sabes que hay personas que sólo tienen más que eso y es mucho”.


¿La vida puede ser tragicómica?

El director nos presenta aquí una reflexión sobre el optimismo, por eso no debe de caer en el olvido, es una de esas películas que es muy difícil de clasificar. Preston Sturges, consiguió de una manera magistral, hacer estos planteamientos en una película que habla sobre cine.

Cuando se estrenó en mil novecientos cuarenta y uno, el séptimo arte ya era mayor de edad y se había asentado en la industria del entretenimiento. Aún le faltaba el respeto y el valor didáctico. Preston Sturges opinaba que ver una buena película era como leer un clásico o como deleitarse viendo un cuadro. El público no lo veía así porque estaban en medio de la segunda guerra mundial y el cine era algo secundario.


En conclusión

Pocas veces una obra cinematográfica alcanza la sencillez que siempre se le pide a una película, y está la supera porque Los viajes de Sullivan vive entre dos mundos que quieren ser compatibles. En conclusión, alcanza el regusto de juntar esos dos universos (la comedia y el drama).

El personaje de John Lloyd Sullivan está destinado a ser un icono cultural. Sin embargo, para que esto sea una realidad, siempre se tiene que ayudar a la difusión del cine y que John Lloyd Sullivan sea estudiado en los colegios e institutos como ejemplo de conocimiento de una era que nos ha precedido. Esa es su enseñanza moral y por esta razón tiene que estar en las realidades de la memoria cultural colectiva.

Etiquetas Cine Clásico

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1 comment

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  1. MARCO LEDESMA 25 abril, 2019 at 18:33 Responder

    ABSOLUTA OBRA DE ARTE, CON UNA QUÌMICA INSUPERABLE ENTRE SUS PROTAGONISTAS, TE HACE REFLEXIONAR, TE DIVIERTE-RAZÒN DE SER EL CINE-EN FIN, UNA PELÌCULA QUE NOS HACE SENTIR MIL Y UNA EMOCIONES, CON ESCENAS INOLVIDABLES DE MAcCREA Y LAKE PARA LA ETERNIDAD, UN GENIO EL STURGES, EH..

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