El viaje de Estado de los Reyes a Holanda ha comenzado. En la plaza Dam de Amsterdam, siete ministros del gobierno holandés y 16 miembros de la delegación española, entre ellos el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares Bueno, y la embajadora de España en Países Bajos, Consuelo Femenía.
A la salida del Palacio Real de Amsterdam, en el que los Reyes se alojan, ha tenido lugar el recibimiento con honores. La lluvia ha decidido ser clemente con los “invitados” y justo en el momento en que se han entonado los himnos de los dos países y se han entonado las salvas ha salido el sol. Felipe VI y el Rey Guillermo han pasado revista a las tropas, mientras Doña Letizia y Maxima de Holanda han aprovechado para mantener una conversación.
Al término del acto se han reunido en la misma plaza con un grupo de escolares del instituto Het Amsterdams, en concreto con la sección española “Trayecto español”.
Ambas delegaciones han tenido un encuentro en el Palacio Real, en el que Don Felipe ha entregado las condecoraciones de Carlos III a los Reyes de los Países Bajos y la Santa Cruz de Isabel la Católica a la Princesa heredera, que lucirá en la cena de Gala de este miércoles por la noche.
Una lluvia torrencial esperaba la salida de los Reyes para realizar una ofrenda floral al Monumento Nacional en memoria de las víctimas de la Segunda Guerra Mundial. Los Reyes han hecho el recorrido desde la puerta del Palacio Real, el más grande del siglo XVII, hasta la emblemática construcción conmemorativa bajo un paraguas que apenas protegía del aguacero, y allí han realizado la ofrenda de una corona de flores, en la plaza enmarcada por tulipanes rojos y amarillos, en honor de la bandera española.