Ben (Benjamín) Jonson

Nació probable­mente el 11 de jimio de 1572 en Westminster, y murió en Londres el 5 de agosto de 1637. Durante algún tiempo frecuentó la Westminster School; pero sus estudios resultaron breves, y el joven empezó muy pronto a trabajar como aprendiz de albañil. Tras un corto período de servicio voluntario en el ejército orientóse, en torno a 1597, hacia el teatro, primero como actor. Este mismo año fue detenido por su participación en una obra satírica titulada The Isle of Dogs, y poco después (1598) sufrió un grave proceso por haber matado en duelo a un compañero actor, Gabriel Spencer. Pasó de actor a autor y llegó a la fama con la primera versión de Cada cual según su humor (1598, v.), obra que fue representada por la compañía de Shakespeare; según la tradi­ción, fue éste quien determinó la acepta­ción de la obra.

Aun cuando iba siendo ya algo común la asociación de la palabra «humor» a personajes dramáticos, la presencia de ésta en el título de la obra de J. diole una clara preeminencia, con lo cual inicióse la comedia de los «humores». A la mencionada producción siguieron Cada cual fuera de su humor (1599, v.), Cynthia’s Re­veis (1600), El Poetastro (1601, v.), La caída de Seyano (1603, v.), Volpone (1609, v.), El alquimista (l610, v.), La conspiración de Catilina (1611, v. Catilina) y La feria de San Bartolomé (1614, v.). Además de éstas y otras comedias J. escribió varias composiciones líricas, algunos textos críti­cos en prosa y un larga serie de «court mas­ques» iniciada con The Masque of Blanckness, 1605, y terminada en 1631; en la preparación de estas últimas J. viose ayudado por el arquitecto y escenógrafo Iñigo Jones, colaboración que, sin embargo, quedó rota por una violenta disputa promovida por los celos profesionales.

En 1616 apareció The Works of Benjamín Jonson, el primer libro en que las comedias fueron denominadas «obras»; después de su muerte, ocurrida en 1637, su amigo sir Kenelm Digby hizo imprimir una colección suplementaria (1640). Como el «Doctor Johnson», resultó famoso entre sus contemporáneos no solamente por sus textos, sino también a causa de su con­versación. Presidió un círculo literario que se reunía primero en la Mermaid y más tar­de en la Devil Tavem; en ocasión del viaje de J. al norte del país, el poeta escocés Drummond anotó algunos fragmentos de sus coloquios, que permiten tener una idea de su capacidad crítica expresada en lengua­je familiar. Con sus textos y sus relacio­nes personales ejerció una gran influencia en los escritores posteriores, algunos de los cuales se decían «hijos» suyos; tal influjo, en efecto, por lo menos en el ámbito de la comedia, rivaliza con el de Shakespeare, y a veces lo supera. Aun cuando los versos que escribió para el Primer infolio [Firs Folio, 1623] revelan su admiración hacia el genio de gran dramaturgo, en cuanto crítico mostróse opuesto al romanticismo del ilustre colega.

Tras arduos esfuerzos había llegado a ser uno de los escritores contemporáneos más difundidos, y trató de imponer en la escena los modelos clásicos. Sus tragedias no tuvieron éxito; en la comedia, empero, siguió el ejemplo de los dramaturgos latinos, adaptó a sus objetivos la teoría médica corriente del «.humor» y consiguió crear un estilo dramático que se transmitió de una a otra generaciones. Esta forma de comedia, en la que se dan el realismo, los rasgos acentuadamente satíricos y el empleo de los «humores» como personajes típicos, fue el modelo para muchos dramaturgos hasta el si­glo XVIII, y su influencia llegó incluso al campo de la novela, donde puede perci­birse hasta la época de Dickens. Como el «Doctor Johnson», en el ámbito de la lite­ratura resultó un dictador a lo largo de toda su vida, y su ejemplo ayudó notablemente a orientar la producción de los comediógra­fos hacia la «comedia de costumbres»; ade­más, apoyó considerablemente la formación de una escuela de crítica, aspecto bajo el cual puede considerársele precursor de Dryden.

A. Nicoll