Historia
Con su apuesta por el catolicismo en los tiempos de la Reforma y su reconstrucción tras la segunda guerra mundial, Baviera posee una interesante historia que contarnos.
El pueblo Bávaro es desciente de los Bajuraves, quienes se instalaron en la región, del siglo V al VI de nuestra era. La historia de la región está profundamente vinculada a la de familia Wittelsbach, que reinó en dicha región de 1180 a 1918, lo cual representa casi 750 años de historia. La familia Wittelsbach se dividió durnate un tiempo en dos líneas familiares, controlando una de ellas el norte de Baviera y la otra el Sur, reunificándose de nuevo en 1505.
Los habitantes que se conoce su existencia más tempranamente, y que se mencionan en fuentes escritas, eran un pueblo probablemente Celtas, que los romanos habían sometido momentos antes del comienzo de la era cristiana, fundando colonias e incluyendo su tierra en la provincia de Recia. El centro romano de la administración para esta área era Castra Regina, conocida desde la Edad Media como Ratisbona.
Recia fue gobernada, desde el reinado de Marco Aurelio, por el comandante de la Legión III Itálica, cuya base estaba en la ya mencionada Castra Regina. Dicho país se encontraba casi desierto, durante los últimos años del Imperio Romano de Occidente, pero desde su ocupación por los godos en la época de Teodorico el Grande, quien además lo colocó bajo el gobierno de un duque, restableció hasta cierto punto su prosperidad.
Durante los siglos XVII y XVIII, la región de Baviera conoció un período floreciente, durante el cual se construyeron numerosos monumentos barrocos y rococó que distinguen la arquitectura bávara. Por otra parte, la historia de Baviera se caracteriza por la existencia de ciudades que fueron durante mucho tiempo ciudades libres, tales como Nördlingen, Rothenburg ob der Oder o también Nuremberg, quienes se integraron en Baviera a principios del siglo XIX, siendo también en este período cuando se instauró el II Reich, acontecimiento que señaló la independencia del reino de Baviera en 1918.
El Siglo XX también fue determinante por las guerras gundiales, en particular la segunda, que detrás de ella dejó a muchas ciudades bávaras en ruinas. Baviera vive, en la segunda mitad del siglo XX, una reconstrucción brillante de sus ciudades devastadas. De esta manera, la región puede hoy día poner en juego un rico patrimonio arquitectónico que la guerra había amenazado.
En el momento de la Reforma, Baviera se posicionó como bastión del catolicismo, combatiendo vivamente a los protestantes.
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