Cuando salió la noticia de que la hija del príncipe Harry y Meghan Markle, Lilibet, había sido bautizada en Los Ángeles el pasado 3 de marzo, hubo un detalle que llamó especialmente la atención. El portavoz oficial de la pareja se refirió a ella como ‘princesa Lilibet Diana’ en unas declaraciones a People, por primera vez, en público.
Se había discutido mucho sobre si los hijos de los Duques de Sussex, Archie y Lilibet, –a quienes el Palacio de Buckingham se refería anteriormente como Master Archie Harrison Mountbatten-Windsor y Miss Lilibet Diana Mountbatten-Windsor– serían conocidos como Príncipe y Princesa tras la muerte de la reina Isabel II en septiembre de 2022. En una entrevista reveladora con Oprah en marzo de 2021, Meghan describió las conversaciones que tuvieron lugar antes del nacimiento de Archie sobre si se le daría un título real: ‘Decían que no querían que fuera príncipe o princesa, sin saber cuál sería el género, lo que sería diferente del protocolo’, dijo.
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El protocolo real actual se remonta a 1917, cuando el rey Jorge V emitió una carta patente por la que los nietos del monarca tienen derecho a los títulos de Su Alteza Real (SAR), pero no los bisnietos. La excepción son los hijos del hijo mayor del heredero, razón por la cual el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis –hijos de los Príncipes de Gales– recibieron títulos reales incluso cuando la reina Isabel II aún vivía.
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¿Cuál es el título real de los hijos de Meghan Markle y el príncipe Harry?
Tras conocerse la noticia del bautizo de Lilibet, el portavoz de Harry y Meghan confirmó en un comunicado que sus dos hijos ahora sí serán conocidos como Príncipe y Princesa de Sussex: ‘Los títulos de los niños han sido un derecho de nacimiento desde que su abuelo se convirtió en monarca. Este asunto se ha resuelto desde hace tiempo en consonancia con el Palacio de Buckingham’. El 9 de marzo, la página de la línea de sucesión del sitio web del Palacio de Buckingham se actualizó para reflejar los nuevos títulos de Archie y Lilibet, que actualmente ocupan el sexto y séptimo lugar en la línea de sucesión al trono, respectivamente.
Sin embargo, aún no está claro si Archie y Lilibet serán llamados SAR –Su Alteza Real y Su Alteza Real– aunque la carta patente de 1917 les da derecho a usar el título. El príncipe Harry y Meghan Markle han conservado sus títulos de Alteza Real, pero ya no los utilizan, tras su decisión de dejar de ser miembros principales de la familia real en enero de 2020.
Aunque el protocolo real otorga a los nietos del monarca el derecho a los títulos de SAR, no siempre se utilizan. Por ejemplo, el príncipe Eduardo y Sofía, Condesa de Wessex, decidieron que sus hijos, lady Louise Mountbatten-Windsor y James Mountbatten-Windsor, Vizconde Severn, podían elegir si querían utilizarlos a la edad de 18 años. Del mismo modo, los hijos de la princesa Ana, Zara Tindall y Peter Phillips, no utilizan los títulos de SAR, a pesar de que les fueron ofrecidos por la reina Isabel II cuando nacieron.
La princesa Lilibet fue bautizada por el Reverendo John Taylor, Obispo de Los Ángeles, en una ceremonia íntima en la casa familiar de Montecito, California. Se cree que el Rey, la Reina consorte y los Príncipes de Gales fueron invitados al bautizo, pero no asistieron. Se supone que la madre de Meghan, Doria Ragland, estuvo presente, junto con el padrino de Lilibet, Tyler Perry, quien reveló que se le había pedido que asumiera el papel en la miniserie documental de Harry y Meghan de Netflix, estrenada en diciembre.
Artículo originalmente publicado en British Vogue, vogue.co.uk. Adaptado por Amira Saim.
