Diana de Gales es una figura importante de la cultura popular, porque marcó un antes y un después en la vida y concepción de los Royals o figuras de la realeza británica para su país y para el mundo entero, pues su carisma le abrió innumerables puertas en los países que visitó e incluso en los que no.
Su escandalosa vida amorosa al lado del Príncipe Carlos de Gales, no fue ningún secreto y menos después de las fuertes declaraciones que dio en numerosas entrevistas para la BBC y medios internacionales. En algunas de ellas, declaró que sabía de la infidelidad de su marido desde el principio, que se sentía poco amada y que esto la orilló a luchar contra la bulimia.
Sin embargo, lejos de la figura de la víctima, probablemente encontramos a una Princesa Diana resignada que también coadyuvó a la fractura del matrimonio real, pues lo que antes se sospechaba, se confirmó después de su muerte. Es decir, sus amoríos con diferentes personas de su círculo de trabajo y conocidos.
Por eso, ahora te presentamos los rostros de los amantes con los que se le relacionó, de acuerdo a medios ingleses.
Oliver Hoare
Oliver fue uno de sus amantes más discretos y del que poco se sabe públicamente, pues a los 73 años murió con el secreto de su relación. Diana, Carlos, Hoare y su esposa Diane coincidían Ascot. El Príncipe de Gales y él eran muy buenos amigos. Hoare era un hombre de educación refinada, galerista y experto en arte islámico, coleccionista y conocedor del árabe y del persa. Se conocieron cuando Diana tenía 24 años y él, aunque 16 años mayor, era un joven moreno y atractivo, culto y simpático y buen conocedor de la aristocracia.
Aunque él siempre negó su relación con ella, hay una anécdota que cuenta cómo un día tuvo que esconderse desnudo detrás de una maceta en el castillo de Kensington para no ser descubierto. Cuando ambos terminaron la relación, recibió en su casa hasta 300 llamadas silenciosas, pero acabó retirando la denuncia policial cuando se descubrió que muchas de ellas procedían de móviles de Diana. Cuando Diana murió Hoare retomó su amistad con Carlos.
James Hewitt
Fue el primero de sus amantes y de quien se dijo era el padre del Príncipe William por su gran parecido. Sin embargo, él siempre lo negó con vehemencia. Se conocieron en una fiesta en Londres y él le enseñó a montar a caballo. Se convirtió en alguien muy cercano también para los príncipes Guillermo y Enrique. La princesa reveló el idilio en una entrevista en 1995, donde aseguró que con él se dio cuenta que el sexo podía ser como fuegos artificiales.
Para él, Diana era una mujer a quien le faltaba amor, pero a pesar del respeto que sintió por ella, Hewitt intentó vender varias de las cartas que Diana le envió durante su relación, por 140.000 euros.
Hasnat Khan
La relación que mantuvo con el cirujano y cardiólogo pakistaní, Hasnat , fue una de las más profundas, pues la princesa llegó a pensar en convertirse al Islam para casarse con él. Incluso visitó a su familia en Lahore, quienes bendijeron su relación. Ella se sentía completamente comprendida por él, pero la persecución por los medios terminaron por alejarle de ella. Hay quienes afirman que su relación con Dodi Al Fayed fue el clavo que sacó a otro clavo de esta relación.
Dodi Al Fayed
Hijo del millonario Mohamed Al-Fayed, dueño de los míticos almacenes Harrods, del Fulham Football Club y del histórico hotel Ritz, fue el único de los amantes con quien la princesa se dejó ver en público. Mantuvo pocos meses de relación con Diana, pero de acuerdo con el joyero El joyero Alberto Repossi llegó Dodi había encargado un anillo de compromiso, que le iba a mostrar a Diana la noche que ambos murieron en el accidente de auto del Puente del Alma en París.
lctl