Nina Flohr, la nueva y muy rica prima ‘griega’ del rey Felipe VI | Gente | EL PAÍS
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Nina Flohr, la nueva y muy rica prima ‘griega’ del rey Felipe VI

Felipe de Grecia, quinto hijo de Ana María y Constantino, se casa con una joven suiza, heredera de una flota de aviones privados

Nina Flohr y Felipe de Grecia en la boda de Jean-Christophe Napoleon Bonaparte y Olympia Arco-Zinneberg en París, en octubre de 2019.
Nina Flohr y Felipe de Grecia en la boda de Jean-Christophe Napoleon Bonaparte y Olympia Arco-Zinneberg en París, en octubre de 2019.Schneider-Press/SIPA (Schneider-Press/SIPA / Cordon Press)

La aristocracia europea se prepara para una nueva boda. Felipe de Grecia, quinto hijo de Ana María y Constantino, quienes fueran reyes del país heleno, ha anunciado su matrimonio. Después de alrededor de dos años y medio de relación, el menor de los cinco hermanos se ha comprometido en la isla griega de Ítaca con Nina Flohr, una joven suiza de 28 años poco conocida hasta ahora entre los círculos de la realeza europea, pero sí entre los de los más ricos del continente.

Flohr es la única hija de Thomas y Katharina Flohr, divorciados. Thomas es el creador y dueño de VistaJet, una de las empresas de vuelos privados más importantes del mundo. Fundada en 2004, posee ya 73 aparatos de todos los tamaños y tiene su sede en Malta, aunque con oficinas en Londres y en Nueva York. En los dos últimos años se han convertido en patrocinadores de la escudería Ferrari en Fórmula 1 (de hecho, Thomas corre con ellos de forma amateur) y les proporcionan vuelos privados. En los primeros meses de la pandemia del coronavirus, Flohr puso sus aviones a disposición de gobiernos e instituciones que los necesitaran para repatriar a ciudadanos o para transportar medicinas o equipos médicos.

Thomas Flohr es uno de los hombres más ricos del mundo; de hecho, según la revista Forbes ocupa el puesto 1.070 entre las personas con más bienes, con una fortuna de unos 1.920 millones de euros. El suizo, de 50 años, pasa en sus aviones una media de 750 horas al año y 150 días volando. Los Flohr poseen una gran mansión en la estación de esquí de Saint Moritz con 3.300 metros cuadrados con biblioteca, pista de squash, cine, spa, bodega, bolera y hasta una pizzería.

Durante un tiempo, Nina fue la directora creativa de VistaJet, pero decidió dejar el puesto para centrarse en una de sus pasiones: el desarrollo de África y en concreto de Mozambique. Está creando un ecoresort en el país que ha llamado Kisawa y que tiene planeado abrir este 2020. Además de un lugar en el que alojarse con todos los lujos y comodidades, Flohr trata de que Kisawa, situado en la isla de Benguerra, sea también un proyecto sostenible que genere empleo de calidad para la comunidad local y que sirva también como una instalación desde la que observar y cuidar el medio marino.

Además de en Mozambique y Saint Moritz, Nina Flohr reparte su tiempo entre Nueva York, Londres y California. Y ahora también en Grecia, patria de la familia de su novio y donde se han prometido. Felipe de Grecia, de 34 años, nació, se crio y estudió en Londres (y después en Georgetown, EE UU), donde sus padres se exiliaron tras su salida del país. Relacionado con buena parte de las casas reales europeas, sus padrinos de bautismo fueron Felipe de Edimburgo, Diana de Gales, el rey (ahora emérito) Juan Carlos I y la infanta Elena.

Felipe tiene cuatro hermanos mayores, tres de ellos casados, y nueve sobrinos. La mayor es Alexia (55 años), que está en julio de 1999 contrajo matrimonio en Londres con el español Carlos Morales, con quien tiene cuatro hijos. Después está Pablo (53 años), casado con la socialité y millonaria empresaria Marie-Chantal Miller; el matrimonio tiene cinco hijos. Tras ellos están los ya menos conocidos Nicolás (49 años), casado desde hace una década con Tatiana Blatnik, y la más pequeña, Teodora (37 años), que busca labrarse una carrera como actriz en Hollywood. Precisamente la joven anunció su compromiso con el abogado estadounidense Matthew Kumar a finales de 2018. Se iban a casar este pasado mes de mayo en la isla helena de Spetses, pero la pandemia les ha obligado a posponer la boda. Ahora la familia real griega tendrá que hacer hueco en su agenda para dos enlaces.

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