Alfonso Díez hoy vive una vida muy distinta a la de los años fugaces y felices que vivió junto a la Duquesa de Alba. Tormentosos por momentos, debido al amplio rechazo de los hijos de la polémica royal, quienes lo llegaron a acusar de “cazafortunas”, pese a que bien partió a mejor vida su última esposa, él mismo se apresuró a renunciar a toda la fortuna que le hubiera correspondido tras su viudez. Historia pasada y pisada para el siempre polémico Alfonso.

Sin embargo hoy, a pesar de la decisión de alejarse de los flashes, Alfonso Díez ha vuelto a ser noticia al reaparecer en un evento público. Fue en el lanzamiento de “+Family”, un programa integral de apoyo y acompañamiento a familias de personas con necesidades especiales ideado por la Fundación Betín Osborne y amadrinado por la Infanta Elena, hermana del Rey Felipe. No fue solo su reaparición la que llamó la atención de los medios, sino también su apariencia. Es que, al parecer –casi que seguramente que sí-, se habría sometido a una serie de intervenciones estéticas que lo han vuelto en el tiempo a los casi 50 años.

Lifting contra las arrugas, blefaroplastia para el sobrante de los párpados y botox para un rejuvenecimiento total son algunas de las opciones que se barajan sobre las mejoras estéticas elegidas por el viudo de la Duquesa de Alba a sus 71 años.

Una noticia que ha pasado a segunda plana, según comentarios que han transcurrido en ese último encuentro al que ha asistido Díez, han sobrevolado por su presencia e implicarían de forma directa a la Reina Sofía. Hay quienes aseguran que hay una historia pendiente entre ambos y que, contrario a los que esperaba el exfuncionario, terminó muy pero muy mal. No esperaba para nada el desenlace ni mucho menos el modo elegido por la monarca.

La traición de la Reina Sofía

Las numerosas amantes que ha tenido el Rey Juan Carlos le han dado valor en más de una ocasión a la Reina Sofía para acercarse a otras figuras masculinas en busca de refugio y de lo que jamás pudo conseguir con su esposo: un poco de cariño y algo de contención. Esto es lo que, según un artículo publicado a principios de mayo de este año, habría encontrado la madre del Rey Felipe en Alfonso Díez años después de que éste perdiera a su esposa.

Alfonso ha sabido ser el hombro y el oído que nunca tuvo la Consorte de Juan Carlos. Hay quienes se animan a decir que también ha logrado ocupar un lugar muy especial en el corazón de la Reina Madre. Aunque ha sido el mismo viudo de la Duquesa de Alba quien en reiteradas oportunidades se ha encargado de desmentir categóricamente las versiones que lo ataban al deseo y estima de la integrante de la Casa Real.

Ahora bien, pese a haber entablado una –digamos- estrecha amistad, el desenlace entre ambos fue un tanto brusco, inmerecido para cualquiera que ofrece contención, escucha y cariño a quien más lo necesita. Alfonso Díez no era bien visto ni por el Rey Felipe ni por la Reina Letizia, quienes le habrían ordenado a la Consorte del Rey Juan Carlos terminar de cuajo con la relación, aunque solo de amistad se tratara.

Es así que en 2018, durante la boda de Fernando Fitz -James Stuart, Duque de Huéscar, y nieto de Cayetana y Sofía Palazuelo, ambos volvieron a verse las caras públicamente. Allí fue que Alfonso Díez experimentó la traición en carne viva. La Reina Sofía le negó el saludo, al menos en público y desde entonces no se volvió a saber de encuentros o gestos de amistad entre ambos hasta la actualidad.