• La cineasta Josephine Decker evoca en 'Shirley' las sombras atormentadas de la escritora Shirley Jackson, interpretada por Elisabeth Moss.
  • La película está disponible en Movistar+.
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Shirley Jackson siempre vivió en su castillo. Es una casa grande, añosa, invadida por muebles centenarios y sonidos de crujidos al caminar. Los libros se acumulan en las estanterías, en las mesas, en las sillas y hasta en el suelo junto con el polvo, que campa a sus anchas porque "una casa limpia es señal de inferioridad moral". Huele a sucio, pero también a tabaco y locura. Es un templo hecho a la medida de una personalidad rabiosa, visceral y atormentada. Es una representación visual y física de las entrañas de una autora maldecida con la genialidad. Y allí, con todos esos aromas y texturas y caos y humo de cigarrillo, nos traslada 'Shirley' de Josephine Decker, una película tan atormentada como su fascinante sujeto narrativo.

Este no es un biopic corriente, pero eso es algo que podíamos esperar de la directora de 'Madeline's Madeline', una película que, como esta que ahora se ha estrenado en el catálogo de Movistar+, se empapa de las emociones de sus personajes para llevarles hasta su catarsis. Elisabeth Moss da vida a la autora de libros tan icónicos como 'La maldición de Hill House', pero la verdadera protagonista, y también la que vive el verdadero viaje existencial y vital del relato, es Rose (Odessa Young), que se instala junto a su marido Fred (Logan Lerman), aspirante a profesor universitario, en la casa de su mentor Stanley Hyman (Michael Stuhlbarg), que está casado con la escritora. La acción se sitúa en 1948, el año en el que se publicó la 'La Lotería' en la revista The New Yorker y la época en la que empezó a escribir su primera novela, 'The Hangsaman'. Y aquí, con un poco de 'fact-checking', ya podemos comprobar que la película establece su propia realidad más allá de la histórica. Por ejemplo, por aquel entonces, Jackson ya había tenido cuatro hijos, que en esta ficción desaparecen. Por eso hay que entender que 'Shirley' no intenta contar una historia fiel a la verdad, sino buscar una manera de representar las entrañas de una artista que habitó lugares que iban más allá de su angustiosa vida terrenal.

elisabeth moss en shirley
Shirley

'Shirley' no es tanto biopic como una suerte de 'mood board', una construcción de un imaginario que vive más en la mente de la autora que fuera de ella. Como aseguró Decker en una entrevista en The Skinny: "Nos enfocamos mucho más en poner a los espectadores dentro de una historia del tipo Shirley Jackson en lugar de replicar la vida de Shirley Jackson... Así que mi investigación estuvo más centrada en leer su trabajo, su biografía, porque intentaba pensar en cómo ella misma hubiese hecho esta historia". La película, basada en la novela de Susan Scarf Merrell y adaptada por Sarah Gubbins, muestra la abrasadora influencia creativa de la autora tanto en la propia estructura de la ficción como en los personajes que la habitan.

Por eso, la primera vez que Rose conoce a Shirley es a través de uno de sus textos, porque la película explora cómo la vida se transforma a través de su escritura, cómo su genio a ratos insoportable moldea la realidad a su paso y deja una huella imborrable, ya sea esta la chispa que enciende la libertad de pensamiento en la mente de una joven atrapada en un matrimonio infeliz o una mancha de vino tinto en un sofá ajeno. Ninguna de ellas puede eliminarse fácilmente. Incluso hay ciertos momentos de la película en la que Rose se antoja un personaje producto de la imaginación de Jackson, quizás una extensión de sí misma o un recordatorio de su pasado. Y al mismo tiempo es cierto y no lo es. No hay respuestas fáciles en relación a lo real y lo ficticio en esta película, pero en realidad no importa.

elisabeth moss en shirley
Shirley

Moss, absolutamente contagiada por la brillante locura de su personaje, y Decker, que apuesta por la cámara en mano para llenar sus imágenes de inestabilidad (visual y emocional) y temblores atormentados, forman un tándem perfecto para honrar la memoria de Shirley Jackson, no desde una idealización blanqueada o admiración ciega, sino invocando todo aquello que la escritora representa, y construyendo puentes entre su vida y el tema principal de su obra: la incapacidad de las mujeres de convivir con sus demonios en una sociedad que las oprime y las marginaliza cuando no encajan en los cánones establecidos de la decencia femenina. También el abuso sistemático de su marido, con el que compartía una relación tóxica, y el maltrato indisimulado del pueblo de North Bennington, que la convirtió en poco más que una paria. Su única escapatoria como mujer inadaptada, insociable, bruja, era vivir a través de sus historias, que era como vivir a través de su propia realidad y autoengaño. Construir su propio castillo.

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Mireia Mullor

Mireia es experta en cine y series en la revista FOTOGRAMAS, donde escribe sobre todo tipo de estrenos de películas y series de Netflix, HBO Max y más. Su ídolo es Agnès Varda y le apasiona el cine de autor, pero también está al día de todas las noticias de Marvel, Disney, Star Wars y otras franquicias, y tiene debilidad por el anime japonés; un perfil polifacético que también ha demostrado en cabeceras como ESQUIRE y ELLE.

En sus siete años en FOTOGRAMAS ha conseguido hacerse un hueco como redactora y especialista SEO en la web, y también colabora y forma parte del cuadro crítico de la edición impresa. Ha tenido la oportunidad de entrevistar a estrellas de la talla de Ryan Gosling, Jake Gyllenhaal, Zendaya y Kristen Stewart (aunque la que más ilusión le hizo sigue siendo Jane Campion), cubrir grandes eventos como los Oscars y asistir a festivales como los de San Sebastián, Londres, Sevilla y Venecia (en el que ha ejercido de jurado FIPRESCI). Además, ha participado en campañas de contenidos patrocinados con el equipo de Hearst Magazines España, y tiene cierta experiencia en departamentos de comunicación y como programadora a través del Kingston International Film Festival de Londres.

Mireia es graduada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y empezó su carrera como periodista cinematográfica en medios online como la revista Insertos y Cine Divergente, entre otros. En 2023 se publica su primer libro, 'Biblioteca Studio Ghibli: Nicky, la aprendiz de bruja' (Editorial Héroes de Papel), un ensayo en profundidad sobre la película de Hayao Miyazaki de 1989.