Don Juan de Borbón - Web Oficial de la Escritora Sonia Martnez Martnez

Don Juan de Borbón

Don Juan de Borbón

Juan de Borbón, un personaje con historia, de la historia y también de mi novela Anna, no mires atrás que ya tienes a la venta en Amazon.

Juan de Borbón y Battenberg, un hombre que fue hijo y padre de rey, pero que nunca reinó. Tampoco había nacido para ello.

Era el quinto hijo de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia, el tercer varón de la pareja real. Como el destino es caprichoso y la historia más, Juan se encontró con un caramelo envenenado. Los movimientos del rey Alfonso, su padre, eliminaron al príncipe de Asturias de la sucesión porque se casó con una plebeya. Poco después, borró de un plumazo al siguiente de la lista, su hijo Jaime. Este hijo no le valía porque era sordomudo, claro que la realidad va más allá, pues el infante no era del agrado de los monárquicos.

Juan vivió una infancia y juventud relajada, disfrutaba de la educación propia de un príncipe sin la presión del heredero. Y es que don Juan de Borbón tenía claras sus aspiraciones, era un marine vocacional que contó con la ayuda de su padre para hacer realidad su sueño encargándose de que fuera admitido en la Escuela Naval de Dartmouth, Reino Unido. Incluso el rey Jorge V, primo de su madre, lo nombró teniente de navío honorario. Se formó en la flota de las Indias Occidentales y después en el Iron Duke. De haber continuado esa carrera, se habría visto en la obligación de adoptar la nacionalidad inglesa. Me he preguntado muchas veces qué habría pasado de haber podido continuar. La historia habría sido tan distinta…

Imposible saberlo ya, porque, el sueño se truncó cuando recibió el telegrama de su padre instándolo a cumplir con su obligación por la patria. Una carambola de la vida lo convertía en el heredero. Sus dos hermanos mayores habían renunciado al trono por motivos diferentes y él, el tercero en la línea sucesoria, se convertía en príncipe de Asturias.

Al terminar la Guerra Civil, Franco le manifiesta a Alfonso XIII que no restaurará la monarquía, por tanto, no volverá a ser rey de España. Le aconseja que se ocupe de la educación del príncipe Juan.

Quien lo ha conocido, lo define como un hombre cercano, de trato afable, con carácter fuerte, amante de los deportes, sobre todo de la vela, y también muy mujeriego (como su padre y después su hijo).

Precisamente, la relación con el último fue difícil, el adelantamiento del hijo al padre no lo llevó nunca bien. Tampoco ayudó al buen entendimiento la tragedia que vivieron cuando Juan Carlos disparó accidentalmente a su hermano pequeño llevándolo a la muerte. Ni una palabra de consuelo al joven.

En realidad, nunca manifestó muestras de cariño hacia su hijo, siempre asertivo y duro con él. Por el poder, no dudó en entregárselo a Franco.

Cuando el rey Alfonso XIII se ve obligado a abdicar en su hijo Juan, éste no puede jurar ante las Cortes por lo que es imposible que el nuevo jefe de la Casa Real use el título de rey.

Es entonces cuando su madre, Victoria Eugenia, le aconseja adoptar el título real de conde de Barcelona.

Haciendo caso a sus consejeros, en el año 1945 firma el Manifiesto de Lausana, en el que insta a todos los monárquicos a abandonar sus funciones en el régimen, uno de los pocos que cumple sin dudar es el duque de Alba. Tanto Franco como Carrero, sobre todo este último, lo interpretan como una oposición al general y es entonces cuando Carrero propone prescindir del príncipe Juan y centrarse en la educación de Juan Carlos. Había que inculcarle a un niño que había nacido en Italia y no conocía España, las costumbres y el idioma del país en el que reinaría en el futuro.

Vinieron años difíciles para padre e hijo. La relación entre ellos era tensa, se respiraba rencor, traición. Ambos debían sentir lo mismo por motivos diferentes. Sin embargo, los dos remaban en la misma dirección por un objetivo común: el regreso de la monarquía. Era obligado vivir de cara a la galería aparentando cordialidad familiar, porque no había que enfadar a Franco, no fuera a cambiar de opinión y al final ni uno ni otro.

Don Juan vivió fuera de España, es decir, en el exilio hasta 1982. En el año 1977 renunció a los derechos dinásticos y a la jefatura de la casa Borbón en favor de su hijo pronunciando, cuadrado ante él, la famosa frase «Majestad, todo por España» en una ceremonia íntima en la Zarzuela.

Que a la Corona le gusta lo sutil y hacer desaparecer sin llamar la atención no es algo nuevo. Juan Carlos hubiera deseado una renuncia por teléfono, fría, lo que suponía una falta de respeto a su padre quien esperaba un acto más solemne en el Congreso de los Diputados.

Desde 1982, con Juan Carlos ya rey, la relación entre padre e hijo se hizo más cercana. Los condes de Barcelona volvieron del exilio y comenzaron a participar de eventos familiares en Madrid.

Pese a lo que haya podido disfrutar por su condición noble y por haber nacido entre los muros de un palacio, la vida de Juan de Borbón ha contado con más sombras que luces. Alejado de su sueño real, se vio obligado a abrazar la responsabilidad que le venía impuesta por los lazos de sangre. Cuando acepta e incluso se mentaliza de que ese es su futuro, su labor en este mundo, también lo apartan de él de manera brusca. Ninguneado por los de arriba y traicionado (a su modo de ver) por quien venía detrás. Además, hay que añadir la tragedia familiar de la muerte violenta de un hijo a manos de otro.

Don Juan solo fue tratado como rey después de morir. Como conde de Barcelona le correspondía ser enterrado en el monasterio de Poblet, pero su hijo quiso darle el reconocimiento que merecía enterrándolo en el panteón de los Reyes de el Escorial con la inscripción Ioannes III, por tanto, es el único de todos los reyes allí enterrados que lo fue después de morir.

Formulario de inscripción
Loading

Si quieres leer mis novelas este verano o regalarlas, puedes comprarlas en los enlaces de aquí abajo o escribirme a través del formulario de contacto de la web para que te las envíe dedicadas a quien tú quieras.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies