Samantha Cohen, conocida por su estrecha relación con la fallecida Isabel II durante 17 años, volvió a ser noticia en el Reino Unido por su breve paso como secretaria privada del príncipe Harry y Meghan Markle en 2017.
Aunque su cargo parecía un reconocimiento, Samantha Cohen renunció al año siguiente debido a los persistentes rumores de maltrato por parte de la pareja. Su salida coincidió con la decisión de los duques de Sussex de alejarse de la Familia Real y mudarse a California en 2020. Cohen solo pudo tolerar un año de trabajo con la pareja real.
Aunque siempre había guardado silencio sobre el asunto, recientemente Samantha Cohen dio una entrevista al diario australiano The Herald Sun, revelando que fue una de las diez personas del personal del palacio que participó en una investigación para evaluar el trato de Harry y Meghan hacia sus colaboradores.
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La relación de Samantha Cohen con la reina Isabel II se remonta a 2001 cuando comenzó como su secretaria adjunta de comunicaciones, ascendiendo después a secretaria privada. En 2017, fue nombrada secretaria privada del príncipe Harry y Meghan Markle, un reconocimiento a su trayectoria profesional. Durante su tiempo con la pareja real, surgieron preocupaciones sobre el trato hacia el personal, lo que llevó a la investigación en la que Cohen participó.
Cuando Samantha Cohen renunció a su puesto como secretaria privada de Harry y Meghan apenas un año después de ser nombrada, el Palacio de Buckingham se alarmó debido a la dificultad para encontrar un reemplazo adecuado. Esto, junto con las denuncias de acoso contra la pareja real, desencadenó una investigación interna para verificar las acusaciones.
En una reciente entrevista con The Herald Sun, Cohen reveló que fue parte de un grupo de empleados del Palacio que fueron interrogados discretamente para determinar la veracidad de las acusaciones de abuso y hostilidad por parte de los duques de Sussex.
Cohen también compartió detalles sobre su prolongada permanencia en el puesto, originalmente planeado por seis meses pero extendido a 18 meses debido a la dificultad para encontrar un reemplazo. Sus revelaciones ofrecen una visión más amplia de la situación interna en el Palacio durante su tiempo como secretaria privada de la pareja real.
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Antes de regresar al Reino Unido, todos los posibles reemplazos para Samantha Cohen renunciaron», ha admitido en relación con la visita oficial de los duques de Sussex entre septiembre y octubre de 2019. Poco después, en noviembre del mismo año, el príncipe Harry y Meghan iniciaron su “autoexilio” mudándose primero a Canadá y luego a California, donde residen actualmente y persiguen su propio “sueño americano”.
Sin embargo, la popularidad de la pareja real ha sufrido un declive notable. Cada vez que se vislumbra un posible acercamiento entre los hermanos Guillermo y Harry, así como entre las cuñadas Kate Middleton y Meghan, surge una nueva polémica que complica las cosas aún más. Las recientes declaraciones de Samantha Cohen han añadido combustible al fuego al revelar su experiencia como trabajadora junto a Isabel II y los duques de Sussex. Según Cohen, Harry y Meghan no trataron bien al personal del palacio ni a su propio equipo, convirtiendo lo que pudo haber sido una colaboración profesional en un ambiente laboral marcado por abusos y maltratos.
