Opinión de Cristina García Ramos | Los padres de la princesa Leonor Felipe VI Letizia
OPINIÓN

Los padres de la princesa

Los reyes y la princesa Leonor, durante la recepción real en el Día de la Hispanidad
Los reyes y la princesa Leonor, durante la recepción real en el Día de la Hispanidad
Europa Press
Los reyes y la princesa Leonor, durante la recepción real en el Día de la Hispanidad

Estos días el rey Felipe y la reina Letizia han mostrado en numerosos momentos que son también los padres de la princesa, una faceta que, celosos de su vida privada, no suelen exhibir en público. Pero este histórico mes de octubre en la vida de Leonor ha dado pie a que, tanto en el solemne acto de jura de bandera como posteriormente en el desfile y la recepción el Día de la Fiesta Nacional, las cámaras, pendientes de cada uno de sus gestos, nos acercaran algunos detalles especialmente emotivos.

Los Reyes, como siempre, siguieron el estricto protocolo, lo que no impidió observar las discretas miradas que dirigían a su hija, que reflejaban primero la lógica preocupación por que todo resultara perfecto y sin fallos y después el alivio y la satisfacción. Y este es el dictamen general: que la princesa de Asturias superó con éxito la prueba ante millones de españoles que siguieron con interés las retransmisiones de estos actos.

Leonor, educada desde su nacimiento para el papel que está llamada a desempeñar, inspira confianza y seguridad. Cuenta con el apoyo y el ejemplo de su padre, que ha adquirido una especial relevancia desde su ingreso en la Academia Militar. Como colegas, sin duda empiezan a compartir historias y anécdotas castrenses, y eso también une mucho.

Letizia no fue educada para ser reina y el suyo fue un duro aprendizaje en el que puso toda su voluntad y esfuerzo, cualidades que ha sabido trasmitir a sus hijas, de cuya formación ha estado siempre muy pendiente. A la vista de los resultados es lógico que muestren su orgullo como padres. 

Mostrar comentarios