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Leonor Watling: "Me dan unas ganas de entrar en el Congreso y decir: �c�mo os atrev�is a hablar as�? �A la esquina! �Expulsado!"

Acaba de encarnar a Isabel de Farnesio para la serie 'La vida breve' y tiene pendiente de estreno su primer terror, 'Anatema', de Jimina Sabad�. La actriz, compositora y cantante madrile�a (Marlango en modo pausa) aborda la madurez con dificultad, explica, y la maternidad -tiene dos adolescentes en casa, sus hijos Luca y Leah- con sensibilidad y preocupaci�n. Para YO DONA posa con espectaculares joyas de Cartier y se entrega, generosa, a una conversaci�n donde caben lo sagrado y lo profano.

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Cors� de volantes en organd� suizo, de Juana Mart�n Alta Costura. Pendientes Juste un Clou en oro amarillo, y anillo Juste un Clou en oro amarillo y diamantes, de Cartier.
Cors� de volantes en organd� suizo, de Juana Mart�n Alta Costura. Pendientes Juste un Clou en oro amarillo, y anillo Juste un Clou en oro amarillo y diamantes, de Cartier.

Uh, me encanta Leonor Watling". Esta es una de las frases que m�s veces voy a o�r, de boca de amigas y compa�eras, a partir del momento, hace semanas, en que anuncio que voy a entrevistarla. Despu�s de escucharlo unas 20 veces, empiezo a pensar -claro- que o bien la Watling (Madrid, 1975) encarna a esa mujer en la que a un cierto tipo de espa�ola le gusta mirarse o bien emana alg�n tipo de efluvio emocional que empatiza con las que ya han sobrepasado los 40 a�azos. "Es que es poco diva, poco tonta", me responde a la encuesta informal que pongo en marcha una colega, sin haberla conocido.

Pues hala, comprob�moslo. Es un martes rabiosamente primaveral a las 14.00 h y estoy esperando a Leonor Elizabeth Ceballos Watling -47 a�os, 30 en el mundo del cine, 20 en el de la m�sica, madre de dos hijos, Luca y Leah-, en el lobby del c�ntrico hotel Thompson Madrid. Pero pasan los minutos y ella no llega. Tic-tac-tic-tac. Y no llega...

Lo har�, finalmente, media hora despu�s. Entrar� en el lobby envuelta en un abrigo negro, mirando de un lado a otro muy apurada. Cuando por fin nos encontremos, tras el beso ritual, se deshar� en disculpas por el retraso, qu� mal, dir�. Ya sentadas una frente a la otra, por fin se relajar� y desplegar� esa verdad que andamos buscando.

Cuanto mayor me hago, y ya he entrado en la sesentena...
Pero �qu� dices? Qu� fuerte es la edad, �verdad? Qu� cosa m�s absurda...
Es que vivimos una �poca donde las se�ales que antes te indicaban la edad de las personas se van difuminando, creo.
S�. Yo crec� con unos c�digos muy claros sobre c�mo era una mujer de 40 o de 50. Pienso en la serie Las chicas de oro, que ve�a de peque�a. Esas actrices ten�an mi edad y estaban �jubiladas! Eso ha cambiado mucho. Las actrices de 'Sexo en Nueva York' y las de 'Las chicas de oro' tienen la misma edad. Creo que hay una narrativa y luego, individualmente, todos estamos fuera de ella.
Venga, pues empezamos. Confieso que pese a llevar d�cadas en esto a�n afronto con un pellizco en el est�mago las entrevistas. �T� c�mo lo llevas?
Ten�a m�s miedo cuando era m�s peque�a, m�s inseguridad, ahora estoy mucho m�s c�moda.
�Hay un momento en la vida en que los actores afrontan las entrevistas como ex�menes?
Depende mucho del periodista. De una buena entrevista sales como... �de una gran conversaci�n! Yo no soy nada pol�mica, as� que nunca me he visto en una situaci�n en que sienta que deba defenderme en una entrevista.
Supongo que tambi�n tiene que ver con la experiencia. Las actrices j�venes, por ejemplo, son complicadas. No cuentan nada. Casi siempre est�n a la defensiva.
S�, tienen m�s miedo. Los muy j�venes van con mucho m�s cuidado con lo que dicen y c�mo lo dicen... Mi generaci�n no ten�a feedback del p�blico. Y yo creo que las j�venes tienen muy presente ese feedback, por las redes sociales.
Leonor Watling lleva vestido de Bottega Veneta, guantes de Givenchy y pendientes, collar, anillos y pulsera de la colecci�n Trinity de Cartier.
Leonor Watling lleva vestido de Bottega Veneta, guantes de Givenchy y pendientes, collar, anillos y pulsera de la colecci�n Trinity de Cartier.

Yo me di de baja de Twitter. No s�lo por los haters, tambi�n porque vi que sacaba lo peor de m�.
A veces suelto el tel�fono y digo: "Le estoy dedicando un mont�n de tiempo a esta persona a quien no conozco... �por qu�?". Es agotador. Yo no entro al trapo en Twitter, no me peleo, nunca en mi vida lo he hecho. Ni en una cena. Y eso es una gran ventaja.
�Eso qu� es, autocontrol?
Tal vez una mezcla de completa inseguridad y falta de fe en que vaya a poder defender lo que opino con argumentos s�lidos, y un poco de... you do you [t� mismo]. A menos que te quiera mucho y que (llena de inseguridad) te diga que creo que est�s equivocado.
Pero en tu cuenta de Twitter dejas bastante claro lo que piensas. Por ejemplo, cuando retuiteas. Y lo haces mucho.
S�. Tiene mucho que ver con el hecho de que no me f�o de m� para expresar las cosas que pienso. Y adem�s yo no s� articular las ideas como alguien que ha dedicado su vida a un tema determinado. Entonces: �qu� opina Leonor de... cualquier tema? Pues Leonor opina que va a leer a la gente que sabe mucho de eso y va a compartir lo que a ella la ha ayudado. Y ya.
Yo ten�a un profesor de Historia de las Ideas Pol�ticas que una vez le dijo a una alumna que ped�a que sus clases fuesen m�s participativas: �Se�orita, desde la ignorancia no se puede opinar�.
Qu� maravilla. Me encanta. Ahora estamos en un momento en que todas las opiniones valen lo mismo y �no puede ser! Cuando ponen en un debate a un terraplanista con un cient�fico, no, lo que dicen no puede pesar lo mismo. Me niego, mi mundo no es as�. No puede valer lo mismo mi opini�n sobre Gaza que la de un periodista especializado. �Qu� m�s da lo que yo opine de Gaza, por Dios? Otro ejemplo -venga, vamos a meternos en el charco-, con todo el tema de los abusos sexuales en el cine espa�ol; �qu� m�s da lo que yo opine en una alfombra roja, en un tuit...? Lo �nico que puedo decir es valor y fuerza a quien lo haya pasado mal y qu� bien que se haya abierto ese debate y que estemos revisando c�mo funcionan las din�micas de poder y de g�nero.
Ya que sacas el tema, tengo la impresi�n de que desde el MeToo hasta Carlos Vermut la informaci�n sobre estos temas ha estado algo enturbiada por... Tal vez ha sido demasiado opinativa.
Estoy leyendo este libro [lo saca del bolso], Tengo algunas preguntas para usted [Rebecca Makkai, ed. Sexto Piso]. Es incre�ble. Se desarrolla en Estados Unidos, justo durante el MeToo. Y de repente, hay que tener una opini�n. Y no posicionarse es posicionarse. A la Coixet, por ejemplo, cuando en la alfombra roja de los Feroz le preguntaron qu� opinaba y dijo "no tengo informaci�n", se le echaron encima. �Desde cu�ndo...? Se le presupone una madurez y un saber a todo el mundo como para que se lancen a opinar de cualquier tema...
Top, chaqueta y pantal�n, de Issey Miyake. Sandalias Carine, de Tom Ford. Anillo Trinity extragrande en oro blanco, oro amarillo y oro rosa, de Cartier.
Top, chaqueta y pantal�n, de Issey Miyake. Sandalias Carine, de Tom Ford. Anillo Trinity extragrande en oro blanco, oro amarillo y oro rosa, de Cartier.

Incluidos los pol�ticos. Resulta dif�cil imaginar por qu� alguien se dedica a algo tan grande y complicado como la pol�tica.
Yo soy super bien pensada, as� que digo: les gusta ayudar, tienen una visi�n global... Pero hoy por hoy me dan unas ganas de entrar en el Congreso y decir: �c�mo os atrev�is a hablar as�? �A la esquina! �Expulsado! �En qu� momento esto que empez� en programas como T�mbola se ha filtrado hasta el Congreso y el Senado? Y ese es el tono ahora.
Y nos hemos acostumbrado.
No, yo no.
Bueno, yo tampoco. V�monos a lo profesional. Tus coordenadas actuales, �d�nde est�s?
Acabo de terminar la serie [Movistar +] La vida breve, sobre el reinado de Luis I, el Breve, de Crist�bal Garrido y Adolfo Valor. Son seis cap�tulos y ha sido una de mis experiencias profesionales m�s bonitas. Hasta el clima nos sonri�, rodando en La Granja (Segovia)en enero. Yel vestuario, 1720... Me ha hecho mucha ilusi�n hacer de Isabel de Farnesio, porque a m� me cuesta mucho ser alfa en la vida. Bueno, soy alfa, pero tambi�n un poco prima. En una mesa de p�quer, si alguien dijera ��a qui�n vamos a engatusar?�, yo ser�a la primera, porque me lo creo todo. Menos mi edad. De repente me dan unos papeles que digo: �Pero esto es una se�ora de 45, aqu� hay un error� [r�e].
Pero esto, �te ha pasado hace poco?
S�, con un personaje que era una se�ora como de 51 a�os. Y es lo que dec�as t�. En mi cabeza, una se�ora de 51 est� muy lejos de m�, y empec� a leerlo y era como �se han equivocado�. Tard� poco, eh, d�cimas, hasta que me dije �Leonor, que eres t��.
�Eso supone alg�n tipo de shock?
Me est� costando mucho, pero much�simo, madurar. Adem�s siempre he parecido m�s peque�a de lo que soy (le pasa tambi�n a mis hijos, es gen�tico). Y a la vez tengo muchas ganas de ser ya una se�ora.
�Est�s negociando contigo misma ese paso de ni�a a se�ora?
Todo el rato. Pens� que iba a ser m�s f�cil. Que f�sicamente iba a haber un cambio y yo me iba a despertar una ma�ana e iba a ser una se�ora. Pero, claro, es muy gradual.
Mientras tanto, �qu� hay de Marlango? �Lo dais por finiquitado?
No, no, no... Alejandro [Pelayo] est� haciendo cosas maravillosas. Tiene tres discos muy buenos y ya est� grabando nuevo material. Ha publicado un libro precioso, Todas las noches que fuimos humo. Por mi parte, estoy intentando saber qui�n soy. Porque como autor creo que es muy dif�cil hacer nada sin saber qui�n eres.
�Qu� pas�? �Qu� se fractur�?
Creo que necesit�bamos parar, llev�bamos muchos a�os de relaci�n creativa. Adem�s de tanta convivencia, porque al final tocar es eso tambi�n. Ahora estamos plantando, pero sin ninguna prisa.
Vestido de flecos en tejido reciclado, deHerv� L�ger. Pendientes Panth�re en oro blanco,esmeraldas, �nix y diamantes, de Cartier.
Vestido de flecos en tejido reciclado, deHerv� L�ger. Pendientes Panth�re en oro blanco,esmeraldas, �nix y diamantes, de Cartier.

El tiempo pasa, tus hijos son adolescentes, �muy adolescentes?
Trece la peque�a y 15 el mayor. Yo tengo la suerte de que mi hermana, a la que admiro much�simo, es coach de adolescentes y siente pasi�n por ellos. Le encantan. Y a m� me ayuda mucho. Lo m�s dif�cil, en mi caso, est� siendo el cambio de haber conocido el amor m�s absoluto, que es el que siente un ni�o por su madre, overwhelming... Cuando se es tan independiente como yo es dif�cil asumir eso, pero al final entras y... te entregas. Y de repente les caes mal. Y no les haces falta (que es mentira, claro que les haces falta, pero de otra manera). Pero esa cosa animal ya no. Entonces es como cuando est�s cantando dulcemente y el micr�fono te da un calambre en los labios. Bum.
�Ser actor te da un extra de culpa en la maternidad, por cosas como estar rodando lejos de casa?
Bueno, en mi caso siempre me he sentido culpable por irme y por todo, siempre he pensado que lo estaba haciendo mal. De hecho, el otro d�a estaba ah� sentada pensando "�a qui�n se le ha ocurrido que yo podr�a tener hijos?". Creo que gestionar esto exige dejar de ser t� adolescente. Ellos, esta generaci�n, lo est�n pasando muy mal, creo que con las redes sociales lo estamos haciendo fatal como sociedad.
Da la impresi�n de que lo �nico que hacemos es parchear.
No s� si el problema es que hay una narrativa de que ser adulto no mola (culpa nuestra). �Para qu� voy a crecer? Si la maternidad es una mierda, el trabajo es una mierda, la hipoteca es una mierda, todo lo que conlleva ser adulto es una mierda. Si lo que reciben es eso, �para qu� van a querer ser adultos? Y encima de eso un cambio clim�tico y un apocalipsis... Tal vez deber�amos cambiar eso, transmitirles que crecer, ser adultos, tambi�n tiene cosas que molan.
�La maternidad obliga a ser optimista?
S�, inevitablemente. Y es verdad que cuando hay crisis y sensaci�n de caos nos volvemos muy nost�lgicos y creemos que el pasado era mejor. Pero no est�bamos mejor. Yo encontraba jeringuillas en el parque cuando iba a jugar. El sida mataba. Te daban una paliza por ser homosexual. Est�bamos peor.
Uy, qu� tristes nos hemos puesto. Por favor, dime algo que te guste mucho y te alegre la vida.
�Venga! Me gustan las cosas peque�as, las de verdad. Me gusta parar, o�r m�sica (la que yo quiero, no la que quiera el algoritmo), leer...
En las fotos llevas joyas maravillosas de Cartier, �cu�l fue tu favorita?
Un anillo que era la cabeza de un felino [el Panth�re]. Espectacular. Y quien diga que esto es fr�volo, si entramos en ese nivel de conversaci�n sobre el adorno humano, que se vaya al museo de antropolog�a y ya est�.
Cuando se llevan joyas de este tipo, �una es consciente de repente del poder que tienen estos objetos?
Lo tienen, s�. Que si fuera una caracola marina y todos hubi�semos acordado darle ese poder tambi�n lo tendr�an, por supuesto. Cuando llevas estas joyas pasa lo mismo que cuando ruedas con un cors�. Te hace estar de determinada manera. No puedes estar casual con un anillo de 200.000 euros. De hecho, no es la intenci�n de ese anillo. Su intenci�n es que est�s en el mundo de otra forma. La verdad es que creo que somos unos bichos maravillosos. No pasa nada si nos extinguimos, porque somos lo putopeor. Pero en algunas cosas somos maravillosos. Y hacemos unas construcciones simb�licas alucinantes, y las joyas son una de ellas.
Vestido largo en sat�n con mangas globo asim�tricas, de Schiaparelli. Pendientes Juste un Clou en oro amarillo, y anillo Panth�re en oro amarillo, peridotos, �nix y laca negra, todo de Cartier.
Vestido largo en sat�n con mangas globo asim�tricas, de Schiaparelli. Pendientes Juste un Clou en oro amarillo, y anillo Panth�re en oro amarillo, peridotos, �nix y laca negra, todo de Cartier.

ESTILISMO Ana�s Ib��ez. MAQUILLAJE Y PELUQUER�A Mar�a Garc�a. ASISTENTES DE FOTOGRAF�A Ignacio Barrios y Alberto Omiste. ASISTENTE DE ESTILISMO Paloma Guti�rrez. PRODUCCI�N Mar�a Morillas. RETOQUE Jes�s Alba.