Era uno de los actores más queridos. También de los más prolíficos. Y el más elegante. Alberto Closas, el Cary Grant español, nació en Barcelona el 1 de noviembre de 1921, hoy hace 100 años. Su larga carrera se desarrolló entre el cine y los escenarios, entre España y América Latina y dejó filmes inolvidables como Muerte de un ciclista (Juan Antonio Bardem, 1955) o La gran familia (Fernando Palacios, 1962).
Ahora, para celebrar el centenario del nacimiento de Closas, la Filmoteca Nacional ha organizado un ciclo de películas del actor catalán, que se proyectarán los martes de noviembre en el cine Doré de Madrid. Además, un sobrino del Closas, Francis Closas, y su esposa, Silvia Farriol, presentarán también en la capital española A un paso de las estrellas (Cátedra), una extensa biografía del artista en la que "no falta casi nada".
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"Francis heredó de su padre material de la familia, que había conservado Teresa Lluró, la madre del actor", explica Farriol en una conversación con La Vanguardia. Entre toda esa documentación había "cartas, catálogos de cine y teatro, entrevistas, fotografías, discos..." Francis y Silvia lo "ordenaron todo" y escribieron "un libro que no existía" para conmemorar el centenario de un actor que tuvo una vida de película.
Rafael Closas, el padre de Alberto, fue conseller de la Generalitat durante la II República en los Gobiernos de Francesc Macià y Lluís Companys. Durante la Guerra Civil, en 1938, toda la familia se fue a Francia y se instaló en París. "Allí, Alberto empezó a cantar, que era lo que quería, y se hizo enseguida con la ciudad, pero cuando estalló la II Guerra Mundial, se padre le mandó junto a un hermano a Argentina, donde tenían un tío".
Alberto y su mujer, Amelia Bence. Argentina, 1946
Pero una vez en Buenos Aires, el tío de América "quería que los sobrinos entrasen en el negocio de la construcción, los chicos no lo vieron claro y, tras unos meses en la capital argentina, se fueron a Chile", recuerda Farriol. Allí conocieron a Margarita Xirgu, que "fue la gran mentora de Alberto". El actor se incorporó a la compañía de la famosa actriz e inició una carrera teatral en Santiago de Chile.
Closas despuntó enseguida y sus giras teatrales le devolvieron a Buenos Aires, donde se casó con Amelia Bence, una famosísima actriz argentina. Aunque luego Closas, que "era todo un seductor", tuvo otras esposas, con Bence formó "la pareja del siglo", carne de portada de las revistas ilustradas de la época. Alberto Closas llegó a rodar una película con Eva Perón, La pródiga, pero a Evita no le gustó, "porque se veía gorda y la retiró de la circulación". El filme se estrenó muchos años después.
"Fichaje" de Juan Antonio Bardem
A mediados de los 50, la fama de Closas ya había cruzado el Atlántico y Juan Antonio Bardem le llamó para que volviese a España como protagonista de una de sus películas más conocidas, Muerte de un ciclista, con Lucía Bose como coprotagonista. "Fue un fichaje", dice Farriol. Un fichaje que supuso el despegue de la carrera española del actor. Closas rodó cerca de 70 películas y participó en una treintena de montajes teatrales.
"También cantaba", señala su biógrafa, quien recuerda que "lo comparaban con Cary Grant y eso le encantaba, porque el actor inglés era su ideal, su modelo". La larga carrera de Closas transcurrió entre España y América. El actor falleció en Madrid en 1994. Farriol solo lamenta que "no tenga una calle en Barcelona, porque aunque recorrió mucho mundo, Alberto siempre presumió de su catalanidad".
Alberto Closas.