Las muertes más recordadas de “La Promesa”
La Promesa
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Las muertes más recordadas de “La Promesa”

El palacio de los Marqueses de Luján parece un lugar idílico en el que pasar los días. Sin embargo, algunos de los que han residido entre sus paredes no han vivido para contarlo. Repasa con nosotros las muertes y asesinatos más impactantes de “La Promesa”.

Jana y Manuel lloran la pérdida de Jimena, que se quitó la vida, en La Promesa
Jana y Manuel en "La Promesa" - La 1 de TVE

En “La Promesa” nada es lo que parece. Si no que se lo digan a la Marquesa de Luján, responsable directa e indirecta de muchas de las muertes acontecidas en su palacio. En vemosTV recordamos aquellos personajes que han fallecido en la serie diaria de La 1 de TVE. Cruz está detrás del final de varios de ellos, aunque no es la única, ¡vamos a verlo!

Dolores, ¿quién mató a la madre de Jana?

En el primer capítulo de “La Promesa” viajamos hasta 1898, al momento en el que Dolores, una de las criadas de los Luján, huye campo a través con sus dos hijos: Mariana y el bebé Marcos. En vista de que unos encapuchados los persiguen, la mujer le pide a la niña que se escape con su hermanito, mientras que a ella la ejecutan de un disparo.

Hay dos personas implicadas en su muerte: un encapuchado que lleva el anillo de La Promesa pide ser quien efectúe el disparo, pero es otro quien le da permiso para hacerlo. ¿Quiénes son? Mucho se ha especulado acerca de esto, sin llegar todavía a una conclusión final. El único que lo sabía era Tomás, el hijo del Marqués, pero Cruz, su segunda esposa, se encargó de matarlo.

Tomás, asesinado con un abrecartas

También en el primer episodio de “La Promesa” vemos cómo Jana le cuenta a Tomás, el heredero de los Marqueses de Luján, que ha llegado hasta allí para vengar la muerte de su madre. El joven, cuando se da cuenta de que la muchacha es la hija de Dolores, ata cabos y decide ir a pedirle explicaciones a su madrastra, Cruz.

Ella, viéndose acorralada para contar la verdad, termina apuñalando a Tomás con un abrecartas, hiriéndole de muerte. Con ayuda de Petra, su fiel doncella, llevan el cuerpo hasta el invernadero y a día de hoy nadie sospecha quién acabó de verdad con su vida.

Lola, el chivo expiatorio

Lola es la doncella amante de Tomás, el heredero de los Luján. El mismo día de la boda del señorito con Jimena de los Infantes, con quien le han casado por su dote, él es asesinado.

La muchacha comete el error de contarle a la Marquesa que tenía una relación con su hijastro, con la esperanza de recibir alguna compensación económica. Pero lo único que consigue es que Cruz se aproveche de ella para colocarla como culpable del asesinato de Tomás.

La Guardia Civil detiene a Lola por un delito pasional y, pocos días después, llega la noticia de que se ha suicidado en la cárcel. No obstante, una llamada de Cruz hace pensar que la Marquesa orquestó su muerte.

El Barón de Linaja, ojo por ojo

La muerte del Barón de Linaja ha sido, probablemente, la más disfrutada por los espectadores. Después de abusar de Pía, el ama de llaves, durante un buen puñado de capítulos, por fin ella reacciona y termina estampándole una estatuilla en la cabeza, matándole en el acto. Todo por proteger a Teresa, que estaba empezando a caer también en las garras del padre de la Marquesa.

Con la ayuda de Jana y María Fernández, las cuatro consiguen trasladar el cuerpo hasta un barranco y despeñarlo en su coche, haciendo que parezca un accidente.

Fernando, otra víctima de Cruz

Fernando de Luján, hermano del Marqués, llega a La Promesa acompañado de su esposa Margarita en busca de Martina, la hija de ambos que se ha refugiado en el palacio de sus tíos.

Sin embargo, el enfrentamiento entre ambos matrimonios se hace patente desde el primer minuto. Cruz decide acabar con su cuñado cuando, en mitad de una discusión, le da un ataque cardiaco. La Marquesa le omite su ayuda, negándose a darle las pastillas que llevaba en la chaqueta y que podrían haberle salvado la vida.

Valentín, el asesino asesinado

El de Valentín es uno de esos personajes que nadie entiende muy bien qué cometido tenían en la serie. El joven llega a La Promesa haciéndose pasar por un amigo de Antoñito, el hijo de Simona. No obstante, la realidad es que se trata de un asesino en serie, obsesionado con matar mujeres.

Su inesperada víctima es María Fernández, doncella de la que se encapricha hasta un punto totalmente enfermizo. Al ver que ella no le corresponde, decide encerrarla en una cueva, lo que pone en marcha un operativo de búsqueda de la Guardia Civil con ayuda de Jana, Abel y el propio Marqués. Al final, Valentín es abatido mientras trata de huir al darse cuenta de que le han descubierto.

Feliciano, el adiós más agónico

La muerte más llorada de todas las de la serie es la de Feliciano. El joven llega a La Promesa como hermano de Petra, aunque pronto se descubre que se trata de su hijo. Poco a poco consigue ganarse a todos sus compañeros e incluso comienza una relación con Teresa, a quien pide matrimonio.

Sin embargo, el final de Feliciano llega cuando recibe un disparo mientras acompaña a Curro, el sobrino de los Marqueses, en una cacería. Todo es resultado de un daño colateral, pues la Marquesa y el Capitán a quien quieren matar es a Curro. El lacayo es operado de muy malas maneras por un médico amigo de la familia, que le provoca una infección mortal, dejando a Petra y a Teresa hundidas en la miseria.

Jerónimo, un daño colateral

Jerónimo es el socio del Conde de Añil en su negocio de contrabando de armas. El muchacho se cuela en La Promesa haciéndose pasar por ayuda de cámara de Pelayo para así acceder al almacén donde guardar su arsenal, escondido entre tarros de mermelada.

Finalmente, Jerónimo es asesinado por Mr. Cavendish, un inglés despiadado al que él y el Conde le venden armas y que no le perdona haber fallado en una de las entregas acordadas.

Jimena, un suicidio esperado

Jimena de los Infantes es uno de los personajes más odiados de la serie. La hija de los Duques de los Infantes es casada en segundas nupcias con Manuel de Luján, tras haber quedado viuda de su hermano mayor, Tomás. Su matrimonio es muy desgraciado, pues no hay amor entre ellos y, además, él está enamorado de Jana, una de las doncellas.

La muchacha se pasa los días intentando conquistar a su esposo, pero todo se le va de las manos hasta llegar prácticamente a perder la cabeza. Tras provocar un incendio que casi acaba con la vida de Catalina, su cuñada, los Duques se la llevan de palacio.

Pero su historia no acaba ahí, pues regresa tiempo después con la misma actitud, desatando toda una cadena de acontecimientos que termina con ella lanzándose al vacío desde la balaustrada de palacio después de haber descubierto la infidelidad de Manuel.

¿Quién será el siguiente en morir en “La Promesa”? ¿Se sabrá algún día todo lo que ha hecho Cruz, la Marquesa de Luján? Algo nos dice que estos no serán los únicos personajes de los que nos tengamos que despedir mientras dure la serie.

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