¿Qué son Alsacia y Lorena?
Alsacia y Lorena son dos regiones históricas que componen la Región del Gran Este, en Francia, división administrativa en vigor desde 2016. Ambos territorios se encuentran al este del país, haciendo frontera con Alemania.
Ha sido esta ubicación geográfica lo que ha marcado la historia de ambos territorios. Su posesión fue una constante fuente de conflictos entre Francia y Alemania, especialmente desde el siglo XIX.
Tras haber pertenecido a Francia desde el siglo XVII, Alsacia y Lorena pasaron a manos alemanas después de la guerra que enfrentó a ambos países en 1870 y que concluyó al año siguiente con victoria germana. Los vencedores crearon entonces el Territorio Imperial de Alsacia y Lorena, situación que se mantuvo hasta la Primera Guerra Mundial.
Al finalizar el conflicto, Alsacia y Lorena declararon su independencia. Esta duró solo unos días, ya que el ejército francés ocupó sin problemas ambos territorios. El Tratado de Versalles confirmó la soberanía francesa, que se mantuvo inalterable hasta la invasión alemana en la Segunda Guerra Mundial. La derrota nazi devolvió a los franceses el control de ambas zonas.
Antecedentes históricos de Alsacia y Lorena
- Antigüedad y Edad Media. Desde la última etapa del Imperio romano, los diversos pueblos y gobiernos situados a ambos lados del Rin se han disputado el dominio de Alsacia y Lorena. Su situación geográfica ha permitido que las reclamaciones sobre su soberanía fuesen constantes a lo largo de los siglos. Alsacia está ubicada en la zona occidental del valle del Rin. Geográficamente, está situada en la llamada planicie de Alsacia, delimitada por los montes Vosgos y los montes del Jura. Históricamente, esta región perteneció al Sacro Imperio Germánico durante muchos años. En esa época fue gobernada por el obispo de Estrasburgo, su ciudad más importante. Más tarde, estuvo bajo dominio de los Habsburgo. Por su parte, Lorena limita con tres países: Luxemburgo, Bélgica y Alemania, además de con Alsacia. Esta ubicación fue responsable de que hubiese pertenecido alternativamente a Francia y a Alemania.
- Siglos XVI y XVII en Alsacia. La guerra de los Treinta Años tuvo una importante repercusión en Alsacia. Este conflicto terminó en 1648, cuando los contendientes firmaron el Tratado de Westfalia. Este acuerdo conllevó que Alsacia pasara a Francia, aunque el articulado fue poco concreto. El territorio mantuvo algo de autonomía dentro del país. Treinta años después, Francia reforzó su control sobre el territorio. En 1681, el ejército francés ocupó Estrasburgo, situación que quedó reflejada en el Tratado de Ryswick, que puso fin a la guerra de la Gran Alianza en 1697. A pesar de la soberanía francesa, Alsacia era una región con un fuerte componente cultural alemán, comenzando por el idioma. Esta característica llevó al gobierno de París a no reprimir la creciente presencia del protestantismo, algo que sí hizo en el resto del país. Esta situación se mantuvo relativamente estable hasta después de la Revolución francesa.
- Siglos XVI y XVII en Lorena. Por su parte, Lorena sufrió una serie de invasiones de Francia desde mediados del siglo XVI. Más adelante, en 1633, Luis XIII conquistó la ciudad de Nancy. En 1659, con la firma del Tratado de los Pirineos, la región volvió a ser un ducado independiente al librarse de la presencia francesa. Estos, con Luis XIV en el trono, no se resignaron a perder el territorio y, en 1670, lo invadieron de nuevo. El monarca trató de ganarse la confianza del pueblo mediante importantes inversiones económicas, pero el Tratado de Ryswick (1697) acabó con la soberanía francesa y restableció el ducado independiente de Lorena. El nuevo duque, Leopoldo I, logró que la zona viviera años de gran esplendor.
Territorio Imperial de Alsacia y Lorena
El siguiente gran acontecimiento histórico que afectó estos dos territorios fue la guerra franco-prusiana, que enfrentó al Segundo Imperio Francés de Napoleón III y a Prusia y sus aliados germanos.
Las principales causas de la guerra fueron la pretensión prusiana de unificar todos los territorios de cultura germánica y las intenciones expansionistas francesas. Entre sus intenciones estaba anexionarse Luxemburgo. El conflicto comenzó en julio de 1870 y terminó en mayo del año siguiente, con la derrota francesa.
- Tratado de Frankfurt. Aunque las condiciones impuestas por los prusianos a los franceses al término del conflicto estaban recogidas en la Paz de Versalles, la ratificación oficial del armisticio se firmó el 10 de mayo de 1871. El Tratado de Frankfurt, nombre que recibió esta ratificación, recogía entre sus cláusulas que Alsacia y Lorena pasarían a manos alemanas. Como parte del acuerdo, los vencedores concedieron un plazo de más de un año para que todos los habitantes de ambas regiones pudieran emigrar a Francia. El resultado fue que el 5% de los residentes decidieron seguir siendo franceses. Los que prefirieron quedarse recibieron la nacionalidad alemana.
- Territorio imperial. Con el reparto territorial de la guerra franco-prusiana, la zona norte de Lorena fue incorporada al recién creado Imperio alemán, así como las áreas con habitantes de cultura alemana de Alsacia. Esto rompió la unidad territorial de la región, ya que la zona de Belfort permaneció en Francia. El nuevo territorio imperial de Alsacia y Lorena no adquirió la categoría de estado componente del Imperio, pues fue gobernado directamente desde Berlín. Era el emperador quien nombraba al gobernador y los ministros. Durante esos años de dominio alemán, las políticas desarrolladas oscilaron entre la conciliación y la dureza. Ejemplo de ello fueron las leyes que limitaban el uso del francés, algo que generó una reacción negativa de la población. Por su parte, la pérdida de estas regiones acrecentó un sentimiento nacionalista francés. Esto dio lugar a la aparición de organizaciones como la “Défense de L’Alsace-Lorraine”, que desarrollaron acciones de propaganda anti-alemana cada vez más agresivas.
Alsacia-Lorena en la Primera Guerra Mundial
- Estallido. La tensión entre las potencias europeas desembocó en el estallido de la Primera Guerra Mundial. Una de las causas del conflicto fue la disputa por la soberanía de Alsacia y Lorena entre Francia y el Imperio alemán. A comienzos del siglo XX, los franceses habían elaborado un plan de ataque (el Plan XVII) para recuperar esos territorios si se presentaba el momento oportuno. Por su parte, los alemanes habían diseñado el Plan Schlieffen para conquistar Francia en caso de que empezara una guerra. Al estallar la guerra, a finales de julio de 1914, los dos altos mandos pusieron sus planes en marcha. Los franceses movilizaron sus tropas desde el sur para dirigirse hacia Alsacia y Lorena, mientras que Alemania conquistó Bélgica y el norte de Francia en muy poco tiempo. El ejército francés quedó, pronto, estancado en su avance, por lo que tuvo que descartar una rápida ocupación de Alsacia y Lorena. Mientras, los alemanes decidieron evitar que los soldados provenientes de esas dos regiones tuvieran que luchar contra los franceses dados los lazos históricos y familiares que mantenían. En lugar de esto, los enviaron al frente oriental o los destinaron a la marina imperial.
- República Independiente de Alsacia-Lorena. La derrota de las potencias centrales, entre ellas Alemania, hizo que el emperador abdicara. Lorena y Alsacia, gobernadas directamente desde Berlín, sufrió un vacío de poder al no tener gobierno propio. Como ocurría en otras zonas del país, parte de los marinos de Alsacia-Lorena procedieron a crear un Consejo de Soldados, con sede en Estrasburgo. Sin encontrar resistencia, este Consejo tomó el control de la ciudad, ayudado por algunos comités de trabajadores. El lema de la revuelta fue: “Ni Alemania ni Francia ni neutrales”. El denominado Régimen de Estrasburgo declaró la independencia de Alsacia-Lorena el 11 de noviembre de 1918 como República. El gobierno francés, no obstante, no permitió la independencia de sus antiguas regiones. El 16 de noviembre, sus tropas ocuparon Mulhouse y el 21 alcanzaron Estrasburgo. Tras esto, la efímera República de Alsacia-Lorena llegó a su fin y ambos territorios quedaron bajo soberanía francesa. El gobierno de París dividió el territorio en varios departamentos: el Alto Rin, el Bajo Rin y Mosela.
- Tratado de Versalles. Con el Tratado de Versalles, que establecía las reparaciones que los derrotados debían afrontar por la guerra, Alsacia y Lorena pasaron oficialmente a Francia, con las mismas fronteras de antes de 1871. Parte de la población de esos territorios, la de cultura alemana, rechazó los intentos franceses por imponer su idioma. Esto provocó que aparecieran algunas sociedades secretas que pretendían, en algunos casos, obtener cierta autonomía frente al gobierno central o, en otros, incluso la vuelta a Alemania.
Alsacia-Lorena en la Segunda Guerra Mundial
- Partido nazi. El nacionalismo alemán, en este caso dirigido por el partido nazi, volvió a poner a Alsacia y Lorena entre sus objetivos. Este partido prometió unificar bajo el control alemán todas las zonas que consideraba germanas, además de acusar al Tratado de Versalles de humillar al país.
- Invasión de Francia. La Segunda Guerra Mundial comenzó en 1939, pero no fue hasta 1940 que las tropas alemanas invadieron Francia. En poco tiempo, lograron llegar a París y derrotar a los franceses. Alsacia y Mosela (zona perteneciente a Lorena) fueron anexionadas mediante una serie de leyes secretas promulgadas por el gobierno de Hitler. Con esta legislación, Alemania decretó que esa región estuviese bajo el gobierno germano y que sus habitantes podían ser alistados en el ejército. El resto de Lorena fue incorporada a la provincia del Sarre. Además de implantar el servicio militar obligatorio, la mayoría de los jóvenes de la región debieron unirse a las Juventudes Hitlerianas.
- Derrota alemana. Después del desembarco de Normandía, las tropas estadounidenses entraron en Alsacia y Lorena. Una vez terminada la guerra, ambas regiones regresaron a manos francesas. El gobierno francés comenzó un proceso de desnazificación de Alsacia. Unos 13.000 colaboracionistas fueron juzgados por ayudar a los ocupantes.
Actualidad de Alsacia y Lorena
Actualmente, Alsacia y Lorena pertenecen, administrativamente, a la Región del Gran Este, formada el 1 de enero de 2016, mediante una ley que reformaba la estructura territorial francesa.
Esta nueva organización territorial no agradó a los alsacianos. Varias organizaciones afirman que se corre el riesgo de que la cultura propia de la región desaparezca.
Sin embargo, los franceses abandonaron las políticas centralistas y, hoy por hoy, Estrasburgo, la capital de la región, es la sede del Parlamento europeo y simboliza la unidad de Europa.
Referencias
- Alsacia y Lorena. Recuperado de historiasiglo20.org.
- Alsacia, en las trincheras de la memoria. Recuperado de magazinedigital.com.
- Alsace-Lorraine. Recuperado de britannica.com.
- The reintegration of Alsace-Lorraine after 1918. Recuperado de museeprotestant.org.
- Alsace-Lorraine Since the War. Recuperado de foreignaffairs.com.