El Parlamento británico aprueba la deportación de inmigrantes a Ruanda
El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha apostado firmemente por su agenda política al lograr la aprobación de la Rwanda Safety Bill en la madrugada de este martes en el Parlamento. Este proyecto de ley allana el camino para deportar a inmigrantes irregulares a Ruanda, despejando así las vías legales que anteriormente permitían recurrir estas deportaciones ante la justicia británica.
A pesar de que Sunak no pudo cumplir su promesa inicial de iniciar los vuelos hacia Ruanda en primavera, el líder conservador ha demostrado su determinación al sortear la resistencia de un grupo de lores en la Cámara alta del Parlamento, logrando finalmente la aprobación de la legislación necesaria para ejecutar las deportaciones.
El proceso parlamentario se enfrentó a lo que se conoce como “ping-pong parlamentario”, con el texto dando múltiples idas y vueltas entre la Cámara de los Lores y la Cámara de las Comunes. Finalmente, tras una jornada de intensos debates, la ley fue ratificada en su versión definitiva, permitiendo así el avance de las deportaciones hacia Ruanda.
Uno de los puntos de fricción durante el debate legislativo fue la exclusión de afganos que colaboraron con las fuerzas británicas durante la invasión de su país, propuesta que no prosperó. Sin embargo, el Gobierno se comprometió a revisar los requisitos para deportar a estos individuos, buscando asegurar que no sean incluidos en las listas de deportación.
Así, podrían ser exceptuados de volar a Ruanda las personas que enfrenten un “riesgo real, inminente y probable de sufrir un daño grave e irreversible”, que padecieran dolencias graves, físicas o mentales, que hubieran sido víctimas de torturas o que tuvieran tendencias suicidas.
Victoria para Sunak
La aprobación de esta ley representa un hito importante en la política migratoria de Sunak, quien ha hecho de la lucha contra la inmigración irregular una prioridad desde el inicio de su mandato en Downing Street. La determinación del primer ministro ha sido clara, enfocándose en detener los flujos de inmigración a través del Canal de la Mancha y aplicar medidas más estrictas en materia migratoria.
El coste estimado de las deportaciones hacia Ruanda asciende a alrededor de 627 millones de euros, lo que supone un desembolso significativo para el Gobierno británico. Este plan ha sido respaldado por el electorado conservador, reflejando una preocupación generalizada por el control migratorio en el Reino Unido.
Sunak, que ha enfrentado presiones internas en su propio partido respecto a la política migratoria, ve en esta victoria legislativa un impulso crucial para su liderazgo. Con elecciones municipales próximas, se espera que estos resultados tengan un impacto en la popularidad del Partido Conservador y en el futuro político del primer ministro. El descalabro para los tories, según las previsiones electorales, sería de la pérdida de hasta 500 representantes locales.
Aunque Sunak ha manifestado su deseo de no adelantar elecciones generales hasta el próximo otoño, el resultado de las elecciones municipales podría influir en la estabilidad interna del Partido Conservador, potencialmente afectando la continuidad del liderazgo del primer ministro. @mundiario
