HISTORIA DE DINAMARCA: DE LA PREHISTORIA AL SIGLO XV ✏️ Diarios de Viajes de Dinamarca ✈️ Los Viajeros
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HISTORIA DE DINAMARCA: DE LA PREHISTORIA AL SIGLO XV
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Etapa: HISTORIA DE DINAMARCA: DE LA PREHISTORIA AL SIGLO XV

Hablar de la historia de Dinamarca nos va a ser muy útil para comprender lo que visitaremos. Todo se entiende mucho mejor. Parece que hace 100.000 años ya había hombres en la actual Dinamarca pero la glaciación cubrió el territorio y tuvieron que...

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Diario: Dinamarca: de vikingos a hot dogs sin cambiar de dinastía (EN CONSTRUCCIÓN) Puntuación: 0 - 0 votos - Localización: Dinamarca Dinamarca
Un interesante viaje por el país nórdico
Hablar de la historia de Dinamarca nos va a ser muy útil para comprender lo que visitaremos. Todo se entiende mucho mejor.

Parece que hace 100.000 años ya había hombres en la actual Dinamarca pero la glaciación cubrió el territorio y tuvieron que marcharse. Hay evidencias de presencia humana ininterrumpida desde el 12.000 a.C.

La agricultura aparece hacia el 3.000 a.C. y de la Edad del Bronce hay restos de enterramientos humanos aunque no era raro que algunos cadáveres se lanzaran a los pantanos (lo que ha permitido la preservación de los cuerpos). En muchos de estos casos se trata de sacrificios humanos.

Poco antes de la Edad del Hierro la agricultura y la vida en general se volvió muy difícil debido al frío intenso y a la humedad, por lo que se produjeron emigraciones hacia Alemania.

En tiempos de los romanos, estos tuvieron relaciones diplomáticas con Jutjand (Jutlandia) y las islas danesas. Pueblos como los anglos o los jutos se trasladaron hacia Britania y la conquistaron allá por el siglo V.

También del siglo V datan incursiones de ciertas tribus en el norte de Dinamarca, como los daneses, daner o dani, que procedían de la zona meridional de Suecia (llamada Escania). Los habitantes del sur de Jutlandia acabarían llamando a aquella zona norte Dinamarca, o lo que es lo mismo “tierra fronteriza habitada por daneses”. Según la leyenda, primer rey de Dinamarca que le dio el nombre a su pueblo fue Danus (su hermano Angul sería el primer rey de los anglos).

No se puede hablar de Dinamarca sin hacerlo de los vikingos. Los llamados vikingos habitaron en la región desde el siglo VIII y hasta el XI. A pesar de su fama de guerreros sedientos de sangre, que invadían y mataban a pueblos cristianos, la verdad es que eran buenos navegantes que comerciaron con el resto de Europa.

En el imaginario colectivo ha quedado la imagen del ataque a Lindisfarne en el 793 por parte de unos barbudos salvajes con cascos con cuernos. Lo cierto es que, a pesar de que ciertamente hubo incursiones, ni los cascos llevaban cuernos ni su vida se basaba únicamente en la muerte y el pillaje. Los vikingos eran algo más que bárbaros.
Para empezar, eran unos magníficos constructores de barcos. Gracias a eso consiguieron llegar incluso hasta a América.

Trabajando la madera y el hierro produjeron objetos de una calidad excepcional, que a menudo decoraban con motivos vegetales.

No podemos desvincular la historia de los vikingos daneses de la de Inglaterra. Y es que los vikingos se habían dado cuenta de que comerciar estaba muy bien pero podían aspirar a algo más.

Hacia el 835 los ataques a costas de la actual Inglaterra se habían intensificado.

Alrededor del 850, 350 naves remontaron la boca del río Támesis, destruyeron Canterbury y Londres e hicieron que el rey de los mercios, Brithtwulf, se diera a la fuga.
En el 866, después de pasar el invierno en Anglia oriental, un ejército danés irrumpió en York. Luego atacaron el reino de Wessex, poniendo en un brete al rey Alfredo. En el 876 se habían establecido en Northumbria y poco después irrumpieron en Anglia oriental y en Mercia. Se creó un territorio llamado Danelaw, formado por pequeños “reinos” escandinavos cuyo interés, además del oro, era la tierra, escasa en su tierra.

Hacia el siglo IX el Danelaw estaba lleno de prósperas fincas agrícolas donde no faltaba tampoco la ganadería. Aún existen en la campiña de Inglaterra pueblos con nombres que terminan en sufijos escandinavos como toft, thorp o by. De todos esos pueblos el más importante era York.

En Lincoln y York se han encontrado talleres de fabricación de vasijas de madera, zapatos o peines de hueso y cuernos de ciervo o renos. También había joyeros que fabricaban obras maestras de oro, plata, aleaciones de cobre y plomo, vidrio, azabache o ámbar.

Diversos hallazgos apuntan a que los vikingos comerciaban con otros pueblos. Se han encontrado cerámicas sirias, ámbar y marfil de morsa de las costas bálticas, seda importada del Mediterráneo oriental, joyas de los actuales Países Bajos y Escandinavia o muelas de molino de piedra volcánica del valle del Rin.

Se sabe también que los vikingos de Danelaw asimilaron la lengua y llegaron a aceptar la religión cristiana así como la reconquista del territorio por parte de los reyes anglosajones Edward, Athelstan y sus sucesores.

En el año 954 el rey noruego Eric Bloodaxe fue expulsado de York y los pueblos de Danelaw se anexionaron a las tierras del rey Edgar.

Entre el 900 y el 958 el rey de Dinamarca fue Gorm el Viejo, al que se achaca ser el primero de los reyes de los que proviene la monarquía danesa actual. El reino de Gorm abarcaba Jutlandia, Schleswig hasta el río Eider, Funen, Selandia, Laaland, Falster, las regiones suecas de Skane y Halland y una buena parte de Noruega, a pesar de que eran, en muchos casos, pequeñas comunidades aisladas donde el poder del rey era muy limitado.

Gorm era un rey pagano pero un misionero enviado por el rey germano logró convertir a su esposa, Thyra Danebod. Grom y Thyra tuvieron dos hijos, Canuto y Harald.

¿Terminaron los ataques de los escandinavos?. Pues no. Ni muchísimo menos. Canuto Gormsson, hijo de Gorm, murió en una incursión de las que los vikingos seguían haciendo en verano a Inglaterra. Se dice que Gorm quería tanto a su hijo que murió de pena al día siguiente.

El sucesor de Gorm fue su hijo Harald Blatand (o Diente azul), que reinó desde el 958 hasta el 986. Se trataba del primer caso de un rey escandinavo que pasaba el poder directamente a su hijo, ya que antes debían luchar para conseguir el trono. Harald era llamado Blatand por su piel morena, su pelo oscuro (bla) y por ser un gran hombre (tand). Sin embargo, por un error de traducción al inglés, se interpretó como Bluetooth; por eso lo de “diente azul”. Dice, sin embargo, otra interpretación que Harald se llamó “Diente azul” realmente por haber padecido la enfermedad hemolítica del recién nacido, que hace que los dientes adquieran un color azulado.

Dice la leyenda que Harald recibió la visita de un sacerdote enviado por el rey germano. Al provocarle el rey, diciendo que pusiera la mano sobre un hierro al rojo vivo, que Dios le salvaría, y ver que al monje no le pasaba nada, decidió abrazar el cristianismo, pese a que muchos de sus súbditos decidieron conservar sus creencias. La realidad, menos romántica, dice que el emperador del Sacro Imperio, Otón I, le derrotó en batalla y le permitió conservar la vida a cambio de su conversión.

Harald murió hacia el 986. La tecnología Bluetooth lleva ese nombre en su recuerdo. El logotipo son las runas de HB (Harald Blatand).

Hacia el 980 el rey de Dinamarca, Svein, hijo de Harald Bluetooth, y su vasallo Olaf Tryggyvason empezaron a hacer nuevamente incursiones. En el 991 Olaf aceptó el cobro de 10.000 libras de plata con la condición de no atacar más. Ese pago, impuesto por los propios vikingos, era el llamado “danegeld”. En el año 1011 el “danegeld” era de 40.000 libras.

Svend I, llamado Forkbeard por los ingleses (Barba de horquilla), llegó al trono de Dinamarca después de luchar contra su padre y derrotarlo. Fue rey de Dinamarca y Noruega, aunque en este último caso solo nominalmente (ya que el poder efectivo lo tenía Haakon Jarl el Grande). Fue el primer rey en acuñar moneda y se convirtió al catolicismo (adoptando el nombre de Otón). En el año 995 Olaf Tryggvasson recuperó el trono noruego hasta su muerte en el año 1000.

El asesinato de la hermana de Sven, Gunhilda, y de su marido Pallig Tókason, eadorman danés de Devonshire, por las tropas inglesas en la matanza de San Bricio por orden del rey Etereldo el Indeciso provocó que el rey danés enviara varias expediciones a Inglaterra. Este hecho, aunque algo distorsionado, aparece en la serie de TV Vikings Valhalla.

El 13 de noviembre del año 1002 el rey Etereldo II de Inglaterra habría ordenado el asesinato de todos los nórdicos que habitaban en asentamientos cercanos a Londres en el transcurso de la celebración del día de san Bricio como respuesta a las incursiones de los daneses. No hay estimaciones claras del número de víctimas pero en unas excavaciones en Oxford en el año 2008 se encontraron los esqueletos de entre 34 y 38 varones de edades comprendidas entre los 16 y los 25 años.

Etereldo habría justificado la masacre como un mal necesario para reconstruir la iglesia de St. Frideswide, actual catedral de Oxford.

Svend llegó a la isla de Sandwich en el año 1013 y, cuando cruzaba el puente para llegar a Londres, éste fue volado por los ciudadanos, provocando al danés graves heridas.

Cuando se recuperó un poco, y aún herido, siguió con la conquista. Londres cayó el 13 de diciembre del 1013. Etereldo fue destituido y Svend fue nombrado rey de Inglaterra, aunque su reinado solo duró seis semanas.El rey falleció a causa de las heridas recibidas.
Cuando el rey Svein (o Svend) murió, su hijo Canuto II logró hacerse con el reino de Inglaterra. Mientras Svend luchaba en Inglaterra, su hijo mayor, Harald, fue regente de Dinamarca. Heredó el trono danés en 1014 y lo gobernó mientras su hermano Canuto conquistaba Inglaterra. Harald murió en 1018.

Canuto, llamado el Grande, fue rey de Inglaterra, Dinamarca, parte de Suecia y Noruega. Knud había acompañado a su padre durante la invasión a Inglaterra. Cuando Svend murió en 1014, fue nombrado rey por las tropas danesas. Tranquilo, regresó a Dinamarca pero Etereldo II aprovechó para volver y ser proclamado rey de nuevo por la asamblea de nobles ingleses que poco antes habían proclamado a Svend.

En agosto de 1015 Canuto regresó a Inglaterra y la invadió, luchando contra el rey Etereldo y después contra su hijo, Edmundo II Brazo de Hierro. Logró una aplastante victoria en la batalla de Assandu en octubre de 1016. Edmundo fue obligado a ceder toda Inglaterra excepto Wessex. No obstante, Edmundo no tardó en morir y Canuto fue proclamado rey de toda Inglaterra por la Witenagemot en enero de 1017.

Aunque Canuto estaba casado con Aelfgifu Aelhelmsdotter, con quien tuvo dos hijos, la unión se había hecho bajo las leyes danesas y la Iglesia católica no la reconocía. Fue por eso por lo que el rey pudo casarse nuevamente con Emma de Normandía, viuda de Etereldo. Emma le dio tres hijos más.

Cuando Harald, su hermano mayor y rey de Dinamarca, murió en 1018, Canuto heredó también el trono danés. Dejó como jarl (lugarteniente) del reino a su cuñado, Ulf Thorgilsson. Aprovechando la ausencia del rey, Anund Jacobo de Suecia y Olaf Haraldsson de Noruega convencieron a los nobles para que proclamaran a Canuto Hardeknut, hijo ilegítimo menor de edad de Canuto, como rey, con Ulf como regente. Enterado Canuto el Grande, regresó a Dinamarca, derrotó a sus enemigos en la batalla de Helgea y ordenó asesinar a Ulf en la catedral de la Trinidad el día de Navidad.
Después de la muerte de Canuto en el 1035, a los 40 años de edad, los daneses conservaron muy poco tiempo más el reino de Inglaterra. Harold Harefoot, hijo de Canuto y Aelfgifu, recibió el reino de Inglaterra de manos de su hermanastro Canuto Hardeknut (hijo habido con Emma de Normandía), mientras éste luchaba contra Magnus de Noruega. No obstante, Harefoot acabaría por autoproclamarse rey de Inglaterra. Murió en 1040 y fue enterrado en la abadía de Westminster pero su hermano le mandó desenterrar y arrojar sus restos a un corral con animales por su traición.

Las luchas entre Canuto Hardeknut y Magnus I terminaron con un acuerdo entre ambos reyes; si Canuto moría sin descendencia, le sucedería Magnus en el trono danés. La muerte de Harold Harefoot y hacer las paces con Magnus permitió a Canuto viajar a Inglaterra, donde fue coronado rey. Su reinado fue muy impopular debido a su decisión de subir los impuestos, lo que dio pie a una rebelión en Worcester en el 1041, que fue duramente sofocada.

Canuto murió en 1042 a los 24 años víctima de un ataque epiléptico mientras estaba borracho. Le sucedió en el trono de Inglaterra Eduardo el Confesor, terminando así con el gobierno danés en el país. De acuerdo con lo pactado, Magnus I fue elegido rey de Dinamarca. Él también murió sin descendencia por lo que el trono de Dinamarca pasó a Svend Estridsson, sobrino de Canuto el Grande.

Svend era hijo del asesinado Ulf Thorgilsson y de Estrid Svendsdatter, hija de Svend I y de Gunhilda de Wendia. La dinastía que gobernó Dinamarca desde 1047 hasta 1412 se llamó Estridsson en su honor y, aunque nunca fue reina, así se le consideró durante el reinado de su hijo.

Svend II luchó contra Harald III de Noruega y contra Guillermo I, el duque normando que en 1066 se convirtió en rey de Inglaterra. Le sucedió su hijo ilegítimo Harald III, que murió sin descendencia y fue sucedido por su hermano Canuto IV.

Canuto IV, que ansiaba el trono de Inglaterra porque era bisnieto de Canuto el Grande, intentó que su pueblo le acompañara a una incursión contra Guillermo el Conquistador. Los campesinos de Jutlandia vieron esa idea inaceptable y le asesinaron, junto con su hermano Benedicto y a otros diecisiete hombres, en la catedral de san Albano de Odense. Aunque en 1101 el rey muerto fue canonizado, pocos son los que consideran que realmente deba ser considerado santo. Pero, claro, es que en vida aumentó el poder real pero también el eclesiástico, al que enriqueció muchísimo.

Cuando su marido fue asesinado, la viuda, Adela de Flandes, huyó a su tierra, llevándose a su pequeño hijo Carlos con ella. El niño creció en la corte de su abuelo Roberto I y luego de su tío, Roberto II, a quien acompañó a Tierra Santa. Cuando Roberto murió y su primo, Balduino VII, se convirtió en conde, Carlos se convirtió en su asesor. El conde concertó el matrimonio de Carlos con la hija y heredera del conde de Amiens, Margarita de Clermont, y, como no tenía hijos, nombró a Carlos su heredero.

Carlos se distinguió por su bondad hacia su pueblo y distribuyó pan entre los pobres en un momento de gran hambruna. Castigó severamente al clan Erembald, que acaparaba el grano para luego venderlo a un precio excesivo, y eso provocó su resentimiento, tan grande que planearon su muerte. Carlos el Bueno fue asesinado en la iglesia de San Donaciano de Brujas mientras rezaba. Fue considerado santo y mártir y beatificado en el siglo XIX.

Canuto IV solo había tenido un hijo, Carlos el Bueno, que como hemos visto fue conde de Flandes, y dos hijas. Cuando murió fue sucedido por su hermano Olaf I, que se casó con una princesa noruega aunque no tuvieron hijos. Olaf murió en 1095 en muy extrañas circunstancias, quizás suicidándose. Su sucesor fue otro hijo de Svend II, Erico I Eigod, hermano tanto de Canuto IV como de Olaf. Se debe a Erico la canonización de Canuto. Murió en 1103, mientras iba de peregrinación a Jerusalén.

A Erico le sucede otro hermano, Nicolás I, a pesar de que tenía un hijo, Harald Kesja. Se casó con la hija del rey de Suecia Inge I y viuda de Magnus III de Noruega. El hijo de ambos, Magnus Nilsson, fue nombrado rey de Suecia. Cuando Margarita murió, Nicolás se casó con Ulvhild, hija del rey sueco Inge II.

Magnus Nilsson creía que tenía todo el derecho del mundo a ser el heredero de Dinamarca y odiaba a su primo Canuto Lavard, un hijo ilegítimo de Erico I, que era muy popular. En 1131 Magnus hizo que su guardia personal asesinara a Canuto, lo que provocó una cruenta guerra civil.

Por otra parte, Nicolás se encontraba también con la hostilidad del emperador germánico, que le acusaba de maltratar a los mercaderes de la Liga Hanseática. Nicolás fue derrotado y, escondido en Jutlandia, fue asesinado por los ciudadanos en 1134.
Magnus nunca consiguió ser rey de Dinamarca. Murió en Escania, en la Batalla de Fotevik, luchando contra Erico II. Erico era hijo ilegítimo de Erico I y de una de sus concubinas. Cuando Canuto Lavard fue asesinado por Magnus, Erico se unió a los partidarios de su hermanastro asesinado y se opuso a la autoridad real. Fue derrotado y tuvo que huir a Noruega pero recibió ayuda del arzobispo de Lund, primo hermano de Canuto Lavard, y del emperador Lotario II, y gracias a ello pudo enfrentarse al rey Nicolás. La batalla de Fotevik, sangrienta, muy decisiva. Erico II fue reconocido rey y mandó ejecutar a su hermanastro, Harald Kesja, y a sus ocho hijos. El propio Erico II murió en una rebelión en Selandia en 1137. Le sucedió su sobrino Erico III, un rey débil que terminó abdicando y retirándose a un convento en Odense, dejando solo un hijo ilegítimo.

Cuando Erico III murió, elegieron como rey de Selandia a Svend III, hijo ilegítimo de Erico II. Luchó contra Canuto V, que gobernaba Jutlandia, hasta que el emperador Federico I Barbarroja nombró a Svend primer rey y a Canuto su corregente. Canuto V era hijo de Magnus Nilsson.

En 1154 Svend fue derrotado por una alianza entre Canuto V y Valdemar I. Fue exiliado aunque a los pocos años regresó y se autonombró rey de Escania. En el llamado Banquete de la sangre que tuvo lugar en Roskilde en 1157 mató a Canuto V y Valdemar escapó a Jutlandia de milagro. Svend fue vencido en Viborg ese mismo año. Murió mientras escapaba.

Valdemar I era hijo de Canuto Lavard y nieto de Erico I. Su madre era Ingebord, hija de Mstislav de Kiev, y llamó a su hijo así por su abuelo, Vladimir II Monómaco de Kiev. Cuando Valdemar tenía unos 16 años, Erico III abdicó y no tardó en estallar una guerra civil, en la que él era uno de los contendientes que aspiraban al trono de Dinamarca (junto con Svend, hijo de Erico II, y Canuto, hijo de Magnus el Fuerte). La guerra duró doce años.

Valdemar se salvó de la muerte en el Banquete de sangre de Roskilde y huyó a Jutlandia. Aunque Svend invadió esos territorios, Valdemar logró vencerle y, sin más rivales que se lo pudieran disputar, accedió al trono de Dinamarca como rey único. Absalón, su hombre de confianza y amigo de toda la vida, fue nombrado obispo de Roskilde y consejero principal.

Se debe a Valdemar la reorganización de Dinamarca y terminar de cristianizar su reino. Se debe a Absalon la fundación de la ciudad de Copenhague.

A Valdemar le sucedió su hijo Canuto VI, que amplió los dominios de Dinamarca hasta el río Elba. Conquistó Pomerania, Livonia y Holstein y organizó una cruzada a Estonia.
Sometió Escania (en la actual Suecia), que se había rebelado bajo el mandato de Harald Skraenk, hijo de Olaf II. Aconsejado por el obispo Absalon, se negó a renovar el compromiso de fidelidad a Federico Barbarroja.

El reinado de Canuto VI fue una época de gran prosperidad.

Le sucedió su hermano Valdemar II porque no tuvo hijos de su matrimonio con Gertrudis de Baviera, viuda de Federico IV de Suabia.

A Valdemar II se le conoce como el Conquistador o el Victorioso. Reinó desde 1202 hasta 1241. Dominó Noruega y en 1210 se propuso conquistar Estonia. Derrotó a los paganos en la Batalla de Lyndanisse (cerca de la actual Tallin). Dice la leyenda que cuando la batalla estaba en un punto más álgido cayó una tela roja con una cruz blanca del cielo mientras se escuchaba una voz que decía “Cuando esta bandera se levante, seréis victoriosos”. Dicho estandarte, al que se atribuye el éxito en el campo de batalla, es la Dannebrog, la bandera nacional de Dinamarca. Se la considera la bandera más antigua del mundo.

Valdemar conquistó Holstein y Lübeck y poco después el conde Adolfo III de Holstein tuvo que entregarle Lauenburgo como tributo. En las costas del mar del Norte sometió a los Dithmarschen, campesinos vasallos del obispo de Bremen. En 1208 fundó Harburg, en la orilla izquierda del Elba, y ocho años más tarde ocupó Hamburgo.

En 1223 fue apresado junto con su hijo Valdemar por su vasallo, el conde Enrique de Schwerin, durante una cacería. Fueron encerrados en Mecklemburgo y perdieron Hamburgo y Lübeck. No fueron rescatados hasta dos años más tarde.

Intentó invadir Alemania del Norte pero fue derrotado en 1227.

Valdemar el Joven, su hijo, fue corregente desde 1215 pero murió en 1231 y Valdemar II no tuvo más remedio que proclamar heredero a Erico, hijo habido de su segundo matrimonio.

Con la promulgación del Código de Jutlandia en 1241, el poder de las familias nobles aumentó, la nobleza menor empezó a controlar la mayor parte del país y los campesinos libres perdieron derechos y privilegios que tenían desde tiempos de los vikingos. El rey murió ese mismo año.

Erico IV tuvo que luchar por el poder con su hermano, el duque Abel. Murió decapitado en una revuelta campesina. Aunque los rumores achacan a Abel ser el instigador de esa muerte, no se ha demostrado (aunque le proporcionó lo que deseaba, el trono de Dinamarca). Murió poco después a manos de un constructor de ruedas en un enfrentamiento contra el pueblo, que se había rebelado por los impuestos.

A Abel le sucedió su hermano Cristóbal I, que fue rey durante siete años. Su reinado se caracteriza por haber estado enfrentado con la Iglesia por intentar que ésta pagara los impuestos sobre la tierra como cualquier otro propietario. El obispo de Lund prohibió a los campesinos que vivían o trabajaban en sus tierras que prestaran oídos a la llamada del rey para luchar a su favor y excomulgó al soberano. Cristóbal murió en 1259 después de recibir la comunión y lo faltaron los rumores que decían que estaba envenenada por orden del obispo.

El sucesor, Erik V, apenas era un niño y su madre, Margarita Sambiria, tuvo que luchar por sus derechos contra el arzobispo de Lund y contra el duque Eric Abelso, hijo de Abel I que reclamaba Jutlandia con ayuda de Holstein. Después de algunas victorias, la reina fue derrotada. Tanto ella como su hijo fueron apresados y se les recluyó en Hamburgo, siendo obligados a ceder todas las propiedades reales en el sur de Jutlandia para asegurar su liberación.

Ya adulto, Erik se convirtió en rey aunque durante mucho tiempo el poder lo ostentaría su madre. En 1272 murió el duque Eric Abelson de Jutlandia, quedando Erik V como tutor de sus hijos, y dos años más tarde el obispo fue asesinado.

El rey Erik V no fue demasiado popular entre la nobleza. En 1282 fue obligado a firmar un tratado, la Carta Magna de Dinamarca, que limitaba su autoridad y garantizaba los derechos y costumbres de los nobles. El rey debía consultar regularmente a la nobleza y convocar a los mejores hombres del reino al Danehof (el Parlamento) para gobernar conjuntamente. Los campesinos obtuvieron el derecho a estar mejor protegidos. Se trató de la primera constitución de Dinamarca aunque solo tuvo efectividad durante el reinado de Erik V.

El rey murió asesinado en una partida de caza a causa de una conspiración. Dice la leyenda que murió apuñalado 56 veces mientras dormía. Dejaba un heredero, Erico VI, que apenas tenía 12 años. Debido a la edad del nuevo rey, el gobierno quedó en manos de su madre, Agnes de Brandemburgo, hasta 1294. La primera actuación del nuevo gobierno fue intentar resolver el asesinato del rey anterior. Nueve caballeros fueron juzgados y, aunque se les encontró culpables, la falta de pruebas conllevó que solo fueran exiliados, sus propiedades confiscadas y ellos quedaran excomulgados.
El reinado de Erico estuvo plagado de guerras contra la Liga Hanseática, la Iglesia, Noruega y Suecia, dejando a Dinamarca en bancarrota. Fue depuesto por su hermano Cristóbal y murió en 1319 sin descendencia (sobrevivió a sus catorce hijos).
Cristóbal heredó un estado en quiebra, con regiones enteras hipotecadas a magnates alemanes o daneses. Cuando fue elegido rey, los nobles, que querían tenerle en sus manos, le hicieron firmar una carta de coronación, un documento que limitaba su capacidad para modificar los impuestos y exigir los pagos de las hipotecas. No podía tomar ninguna decisión si la nobleza no lo consentía. Y, claro, los privilegios de la nobleza y el clero aumentaron. Eso era así sobre el papel; a la práctica, Nicolás fingía que no había nada firmado y recaudaba los impuestos que le hacían falta entre los distintos territorios y sobre los campesinos alemanes. Sus guerras contra ducados, condados y ciudades del norte de Alemania llevaron a nuevas hipotecas e impuestos y a un nuevo enfrentamiento con iglesia y nobleza.

En el trascurso de una rebelión en 1326 fue derrocado por una alianza de magnates y Holstein. Tuvo que abdicar y exiliarse, quedando como rey el duque Valdemar V de Schleswig de Jutlandia del Sur y con la regencia del conde Gerard de Holstein. Valdemar fue obligado a separar Jutlandia del Sur de Dinamarca, con la advertencia que un rey danés nunca más reinaría sobre ese territorio.

Cristóbal intentó recuperar el trono, sin éxito. Un levantamiento en Jutlandia llevó a que los campesinos de Escania rogaran al rey Magnus IV de Suecia que les gobernara, algo que éste aceptó.

Cristóbal logró regresar al trono de Dinamarca de 1329 a 1330, aunque solo era un rey títere. Casi todo el reino estaba hipotecado y no podía ejercer un poder efectivo. Jutlandia quedó hipotecado al conde Gerard III de Holstein- Redsburg y Fionia y Selandia quedaron en manos del conde Juan I de Holstein-Kiel.

El rey intentó enfrentarse militarmente a Gerard pero fue derrotado y encarcelado. Murió al año siguiente, dejando un reino sometido a sus acreedores alemanes.

Valdemar IV, de nuevo rey, intentó pagar las deudas y recuperar las tierras de Dinamarca gracias a la dote de Helvig, su esposa, hija de Eric II, duque de Schleswig, o a los impuestos recaudados de los campesinos. No es raro que estos se enfadaran ante la demanda constante de impuestos.

El obispo de Roskilde, que era dueño de Copenhague, se la cedió al rey. Fue el primer rey danés que gobernó desde la que hoy es la capital del país. Poco a poco Valdemar fue recuperando territorios. También cedió la Estonia danesa a cambio de 19.000 marcos a los caballeros teutónicos, gracias a lo que pudo recuperar la mayor parte de Dinamarca.

En 1346 Valdemar IV inició una campaña contra Lituania. El mismo año recuperó toda Selandia, haciendo de Vordingborg su residencia personal. En 1347 había conseguido expulsar a los alemanes de Dinamarca pero a costa de hacerse muy impopular entre los campesinos por culpa de su política fiscal.

Consiguió hacerse con el castillo de Nyborg y el este de Fionia y todo parecía ir viento en popa cuando se desató la peste bubónica en 1349. Se estima que en un año entre el 33 y el 66% de la población de Dinamarca se había infectado.

Valdemar no redujo la carga fiscal pese a las muertes, lo que hizo que hubiera graves alzamientos entre los nobles. El rey y la nobleza no hicieron las paces hasta 1354. Firmaron un pacto que decía que el Danehof debía reunirse una vez al año el día de san Juan y se restauraron los antiguos derechos de los nobles.

El rey vio reducido su poder así que se decidió por conquistar más tierras a los alemanes, esta vez en el sur de Jutlandia. También ignoró claramente la carta, lo que provocó más revueltas.

El rey danés, pese a todo, tenía su vista puesta en Skane, bajo dominio sueco. Aprovechó que la zona había sido ocupada por el príncipe Eric XII de Suecia para ayudar al rey Magnus contra él, a cambio del castillo de Helsingborg. Cuando el príncipe murió de modo repentino, el rey se negó a cumplir lo pactado así que Valdemar le obligó por la fuerza de las armas. No tardó en ser nombrado señor de Halland, Blekinge y Skane.
Atacó también la ciudad de Visby, en la isla sueca de Gotland, que pertenecía a la Liga Hanseática, porque cantaban canciones burlonas sobre su persona.

También capturó a la condesa Isabel, que iba a casarse con el príncipe heredero Haakon de Suecia. Obligó a la joven a ingresar en un convento y al príncipe a casarse con una de sus hijas, Margarita. Aunque el rey de Suecia estuvo de acuerdo con el cambio, los nobles, para impedírselo, le hicieron abdicar, y escogieron como nuevo soberano a Alberto de Meckelemburgo, enemigo acérrimo de Valdemar.

En 1362 la Liga Hanseática, Suecia y Noruega se aliaron contra Valdemar de Dinamarca y saquearon Copenhague y algunas zonas de Skane. Los nobles de Jutlandia aprovecharon también para rebelarse y Valdemar tuvo que huir, viéndose obligado al fin a pactar con la Hansa su derecho al libre comercio y pesca, el control de la fortaleza de Helsingborg y de varias ciudades costeras durante 15 años y voz y voto en la sucesión al trono danés.

Valdemar, lejos de considerarse derrotado, eliminó a los nobles que se habían rebelado contra él y repelió a invasores suecos y noruegos. Podría haber recuperado territorios en Jutlandia de no haberle sobrevenido la muerte en 1375. Le sucedió su nieto Olaf, hijo de Haakon VI de Noruega y Margarita de Dinamarca. Cuando Haakon murió en 1380 se convirtió también en rey de Noruega aunque su madre ejerció la regencia.

Margarita I es uno de los personajes más relevantes de la historia del país. Era la hija pequeña de Valdemar IV de Dinamarca y Hedwige de Schleswig. Se casó en 1363, cuando tenía apenas 10 años, con Haakon VI Magnusson de Noruega, que gobernaba su país junto con su padre. Margarita, ahora reina de Noruega, no marchó a su nueva patria hasta tres años después y pronto se descubrió como una brillante consejera de su esposo en asunto de estado, a pesar de su juventud. En 1370 dio a luz a Olaf, su único hijo, de quien Margarita se convirtió en regente al morir Valdemar IV. Pasó lo mismo a la muerte de Haakon con el trono de Noruega.

Margarita recuperó varios castillos en Escania que estaban en manos de la Liga Hanseática y logró ganarse la fidelidad del conde Gerard VI de Holstein, lo que provocó que fuera reconocida como señora del ducado de Schleswig.

En 1387 su hijo Olaf murió de modo repentino. En ese momento, Enrique III y Alberto III de Mecklemburgo, rey de Suecia, intentaron hacerse con los tronos danés y noruego, respectivamente. Margarita logró imponerse y fue nombrada ama, señora y tutora de Dinamarca y posteriormente de Noruega, con poderes absolutos y hasta que se eligiera un nuevo rey.

En cuanto a Suecia, en vida de su esposo había sido reina consorte ya que su marido era cogobernante. Alberto de Mecklemburgo había usurpado el trono. Margarita había apoyado a su hijo para convertirse en rey sueco en 1385. En 1388 la reina se alió con los nobles descontentos con Alberto, que le prometieron la regencia si les libraba de la opresión alemana. Aunque el de Mecklemburgo se burló de Margarita, el ejército de la reina le acabó venciendo en 1389 y tanto Alberto como su hijo fueron encarcelados. Margarita se convirtió en regente.

Estocolmo se negó a reconocer como gobernante a Margarita. La ciudad fue sitiada pero gracias al pacto de Lindholm de 1395 firmado con Alberto se vio la luz. Alberto debía pagar una gran suma de dinero en un plazo de 3 años mientras la Liga Hanseática tomaba Estocolmo como prenda. Como Alberto no pagó, la Liga cedió la ciudad a Margarita a cambio de privilegios comerciales.

Margarita I, que había perdido a su único hijo, adoptó a su sobrino-nieto, Erik de Pomerania (nieto de su hermana Ingeborg). Erik fue elegido rey de Noruega en 1389 y de Dinamarca y Suecia en 1396. Para mantener la unión de los tres reinos, Margarita convocó a los tres consejos en la ciudad sueca de Kalmar, donde Erik fue coronado finalmente en 1397. Poco después se redactó el acta de unión, la Unión de Kalmar. Cada uno de los tres reinos mantendría sus leyes y costumbres y cada estado sería administrado por sus propios representantes.

Margarita siguió siendo la reina de hecho hasta su muerte en 1412 (quizás víctima de la peste).

La unión de Kalmar englobaba además Groenlandia, Islandia, las islas Feroe o Finlandia (que dependía de Finlandia).

Los gastos militares descendieron en picado, puesto que los tres reinos vivían en relativa paz. Margarita sí que ejerció una campaña militar contra el condado de Holstein y luego pretendió la isla de Gotland, en manos de la Orden Livona.

La Unión de Kalmar vivió varias revueltas de los suecos, que veían con recelo la superioridad de danesa. La definitiva tuvo lugar en 1521 y provocó la disolución de la Unión en 1523 cuando se eligió a Gustavo Vasa como rey de Suecia. Dinamarca y Noruega permanecieron unidas hasta 1814.

Erik de Pomerania sí se embarcó en guerras que le convirtieron en un rey impopular. Consiguió hacerse con la isla de Gotland y luchó durante más de 20 años contra Holstein para hacerse con el ducado de Schleswig. Esas guerras solo trajeron pérdidas económicas muy cuantiosas para sus reinos.

Entre sus logros se encuentran el haber establecido un peaje en el estrecho de Oresund, y que perduró hasta el 1857. Bajo su reinado, Copenhague pasó a ser definitivamente posesión danesa, lo que propició que llegara a convertirse en la capital de país.
Erik de Pomerania se enfrentó también a la Liga Hanseática, con muy malos resultados. Los gobernadores que colocó en las provincias fueron unos tiranos, lo que llevó a una sublevación y a la destitución del rey del trono de Suecia en 1434. Al año siguiente volvió a ser reconocido como rey, para volverle a deponer en 1436. Ese mismo año recuperó el trono bajo promesas que no pensaba cumplir, por lo que en 1439 fue depuesto definitivamente. El mismo año fue depuesto, también por culpa de su impopularidad, del trono danés y en 1442 del trono noruego.

Se escogió como rey de la Unión de Kalmar a Cristóbal de Baviera, hijo del duque Juan de Palatinado-Neumarkt y Catalina de Pomerania, hermana de Erik. Cristóbal firmó un tratado de paz con la Liga Hanseática y fomentó el comercio entre las ciudades neerlandesas y los reinos nórdicos.

En su reinado, los reinos que formaban la Unión de Kalmar tuvieron cierta independencia. El rey se ocupaba de muchos de sus asuntos de estado y para cubrir su ausencia nombraba a un regente, que actuaba como jefe de gobierno y juez.
Tuvo que hacer frente a una rebelión en el norte de Jutlandia, que terminó con el empeoramiento de las condiciones de vida de los campesinos.

Con su muerte, la Unión de Kalmar se desintegró. Los suecos escogieron rey a Karl Knutsson, que intentó restablecerla pero con predominio sueco.

En Dinamarca, y al no haber dejado el rey ningún heredero, el consejo real propuso dejar el poder en manos del señor feudal más poderoso del rey, Adolfo VIII de Holstein. Adolfo lo rechazó y recomendó para tales efectos a su sobrino Cristian, descendiente lejano de Erik V. Cristian I fue coronado en 1449 en Copenhague.

En cuanto a Noruega, el reino se dividió en dos facciones. Una escogió a Cristian como nuevo rey (ya que de algún modo estaba emparentado con Haakon V); la otra coronó a Carlos de Suecia.

Como el reino no podía tener dos soberanos, se convocó un congreso en Halmstad en 1450. Cristian I reconoció los derechos de Carlos como rey de Suecia pero con la condición de que renunciara a Noruega. Acordaron que el rey que viviera más tiempo gobernaría los tres países en una renovada Unión de Kalmar. Carlos fue depuesto como rey noruego ese mismo año y Cristian fue coronado poco después.

En 1451 estalló una guerra entre Dinamarca y Suecia por Gotland. En 1457 Carlos fue derrocado como rey de Suecia y los dos regentes, partidarios de la Unión de Kalmar, ofrecieron el trono al rey danés.

A la muerte en 1459 de Adolfo de Holstein sin descendencia, Cristian I fue elegido como nuevo duque de Schleswig y conde de Holstein (aunque comprometiéndose a que fueran independientes de Dinamarca).

En Suecia hubo revueltas por los elevados impuestos. En 1464 Carlos intentó recuperar el trono de Suecia y lo logró. A la muerte de Carlos, Cristian intentó sin éxito hacerse por la fuerza con el trono sueco.

Sus problemas económicos eran acuciantes y por ello tuvo que conceder mayores privilegios a la Liga Hanseática y casar a su hija Margarita con Jacobo III de Escocia, cediéndole territorios que habían pertenecido a Noruega (las islas Orcadas y las Shetland).

Cristian I murió en 1481. Le sucedió su hijo Juan I. En 1483 se convirtió en rey danés y poco después fue elegido como rey de Suecia aunque el regente, Sten Sure, retrasó la coronación durante 14 años. Con el apoyo de la nobleza, Juan entró en el país con un ejército de mercenarios y derrotó al regente. Fue coronado como rey de Suecia en 1497.
En cuanto a Holstein, Cristian I había permitido a los habitantes elegir entre sus hijos a su nuevo duque. Aunque Dorotea de Brandemburgo, la madre de Juan, favoreció a su otro hijo, Federico, ambos hermanos fueron elegidos cogobernantes en 1482.
Juan firmó un tratado con el principado de Moscú.

La popularidad de Juan cayó en picado a partir de 1500. Se produjeron levantamientos en Suecia y Noruega. Fue depuesto como rey de Suecia en 1501 y el trono se le ofreció a Sten Sture. Aunque Juan intentó entablar negociaciones con los suecos, no logró ningún resultado positivo por lo que la guerra estalló de nuevo.

En Noruega estalló una rebelión, que fue aplastada por Cristian, el hijo de Juan, virrey noruego y futuro Cristian II.

La Liga Hanseática, viendo afectado su comercio, entró en guerra con Dinamarca en 1510. No se firmó la paz hasta 1512.

Juan I murió en 1513.


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carolco
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Willy Fog
Willy Fog
Ene 23, 2014
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Fecha: Vie Jun 19, 2020 09:35 pm    Título: Re: Dinamarca: Consejos

Dinamarca abierta para la mayoría de los ciudadanos europeos desde el 27 de junio de 2020

Dinamarca está en proceso de seguir la sugerencia de la UE de abrir las fronteras del país a los ciudadanos y residentes permanentes de la Unión Europea y Schengen para el 1 de julio de 2020.

El Ministerio de Asuntos Exteriores danés anunció hoy que el país recibiría a todos los visitantes de la Unión Europea y Schengen, excluyendo Suecia y Portugal, a partir del 27 de junio de 2020.

Puede acceder al sitio web de Dinamarca para los visitantes entrantes aquí.

Dinamarca permitiría visitantes de países que considere ABIERTOS. Esto requiere menos de 20 personas infectadas por Covid-19 por semana (lo que sea que esto signifique).

Tanto Suecia como Portugal fallan en esta evaluación.





Nyde!
thorvic87
Thorvic87
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Jul 23, 2020
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Fecha: Jue Jul 23, 2020 11:17 am    Título: Viaje a Islas Feroe

Buenos días! En septiembre viajo a Islas Feroe desde valencia con escalas en Amsterdam y Copenhage, el tiempo de las escalas es reducido de 1 hora en cada aeropuerto. ¿Sabéis si hacen algun control de covid en las escalas? o solo se hacen en destino? el viaje lo tengo con edreams y ya he descubierto lo "eficientes" que son cuando les llamas para dudas... a la vuelta me han cambiado horarios de vuelos y por ahora se que llego a Copenhague.Muchas gracias
Indialuna
Indialuna
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Ene 20, 2008
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Fecha: Jue Jul 23, 2020 01:23 pm    Título: Re: Viaje a Islas Feroe

Muevo tu mensaje a este hilo, y te dejo unos enlaces

Islas Feroe: que ver, alojamientos - Dinamarca

Coronavirus a nivel mundial y Turismo: noticias, dudas salud

Volar en "nueva normalidad": mascarilla, asientos, distancia
ANGEMI
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Ago 09, 2009
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Fecha: Mar Mar 16, 2021 05:14 pm    Título: Rubjerg Knude - Vendsyssel-Thy, Dinamarca

Rubjerg Knude o el faro sepultado que se ha convertido en un símbolo de Dinamarca

Conoce la emotiva historia del rescate de este faro centenario

Al norte de Dinamarca, en la isla de Vendsyssel-Thy, un faro ha escrito sobre dunas de arena una de las historias recientes más emotivas del patrimonio del país escandinavo.

El faro de Rubjerg Knude se ha convertido, gracias a su lucha contra las fuerzas de la naturaleza, en todo un símbolo y una de las atracciones que más popularidad ha adquirido en los últimos años en esta amplia región del mar del Norte.

Seguir leyendo en Viajar El Periódico: viajar.elperiodico.com/ ...-dinamarca


DavidWellington
DavidWellington
New Traveller
New Traveller
Ago 11, 2021
Mensajes: 5

Fecha: Mie Ago 11, 2021 07:36 pm    Título: Re: Dinamarca: Consejos

Hola a todos!

Soy nuevo en el foro, por si os puede servir de ayuda a la hora de organizar alguna ruta a este precioso país del norte quiero dejar mi granito de arena de los pueblos que en mi opinión, no pueden faltar: Faaborg, Ribe, Skagen, Tonder, Silkeborg, Sonderborg, Dragor y Svendborg. A cada cuál más interesante y bucólico, de cuento de hadas prácticamente.

Saludos! Sonriente
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