El apellido Everts tiene mucho peso en el motocross. Harry Everts fue cuatro veces campeón del mundo mientras que Stefan, su hijo, logró el entorchado mundial en 10 ocasiones a lo largo de cuatro categorías diferentes.
Ahora Liam, de 16 años, la tercera generación de esta ilustre familia belga, llega dispuesto a dejar su impronta en el deporte.
El joven Liam Everts participó en la categoría de Élite MX2, en la primera prueba del Campeonato de España de Motocross, que se disputó en Montearagón (Toledo), el 7 de marzo de 2021.
Esto es lo que padre e hijo nos han contado sobre los planes de futuro en los que pretenden luchar por el título de campeón del mundo.
Llevar el apellido Everts es algo especial, ¿cómo lidias con la presión?
Liam: Sin duda, mi apellido supone una presión extra. Pero, una vez que empiezo a competir, me concentro en mí mismo, en mi moto y en el circuito. De todas maneras, mi apellido es algo especial.
Stefan: Tengo sentimientos encontrados. Por un lado, estoy orgulloso de que Liam siga mis pasos y los de su abuelo, y que mantenga vivo el apellido Everts en el motocross. Pero, por otra parte, soy muy consciente de los riesgos que conlleva este deporte. Me preocupo de verdad porque no quiero que sufra una lesión seria.
¿Es tu padre un profesor estricto?
Liam: Lo admiro mucho pero sigue siendo mi padre. Es estricto cuando es necesario. Cuando hago algo mal me pone en mi sitio. Luego dependerá de mi ser capaz de aprender de los errores y no volver a cometerlos.
Stefan: Le ayudo en todo lo que hace e intento evitar los riesgos lo máximo posible. Desde el primer día en el que se subió a una moto, para mí la prioridad ha sido la seguridad. Trabajamos en sus puntos débiles y evitamos ir demasiado deprisa. No quiero presionarlo porque sé que la presión ya la tiene. Sé cómo se siente. Mi padre también era muy famoso. Él y yo trabajamos de forma parecida, despacio. Eso fue lo que me permitió competir al máximo nivel durante mucho tiempo.
Stefan, ¿el destino de Liam es superar tus 10 títulos mundiales?
Stefan: Si llega a ser campeón del mundo sería fantástico. Tres generaciones… ¡eso no ha ocurrido nunca! Espero que lo logre, igualar lo que consiguió su abuelo ya sería un resultado increíble.
¿Cuáles son los objetivos para 2021?
Liam: El objetivo es mejorar, lo que no será fácil porque muchos pilotos de MX2 han regresado a EMX250. Va a ser muy duro, pero estoy seguro de que con paciencia y trabajo lo lograremos. Será cuestión de tiempo hasta que empecemos a colocar todas las piezas del rompecabezas.
Stefan: Obviamente, tenemos mucho trabajo por delante. Liam necesita adquirir experiencia y aprender a gestionar la presión que conlleva su apellido. Tiene pasión, además de disciplina y capacidad de trabajo. Tampoco le falta tacto y talento.
Este año vas a competir en EMX250, una categoría mayor. ¿Te sientes preparado?
Liam: Sí, esta temporada me enfrentaré a una categoría superior. La motivación está ahí, tendremos que tomarnos las cosas con calma. Habrá que entrenar a tope y darlo todo en las carreras.
Stefan: Es importante no tener demasiadas expectativas porque si no vas a acabar decepcionado. Si somos realistas deberíamos aspirar a estar entre los cinco primeros. Quién sabe, quizá de ver en cuando suceda algo inesperado. Va a ser una experiencia increíble.
Estás entrenando fuerte, ¿ya están tu brazo completamente recuperado?
Liam: Estoy entrenando mucho en Bélgica y en los Países Bajos para sentirme lo más cómodo posible en la moto, mejorar mi velocidad y llegar preparado a las competiciones. El brazo está ya recuperado, no me da ningún problema. Todavía tengo una pequeña placa pero me la quitarán después de que haya terminado la temporada.
Stefan: Estamos mejorando en todos los aspectos. Liam, poco a poco, se está convirtiendo en un hombre joven y en el último año ha dado grandes pasos, tanto en el aspecto mental como físico. ¿Nuestro plan? Ser pacientes y tomarnos las cosas con calma. Lo último que quiero es que sufra una lesión importante mientras se encuentra en esta fase de desarrollo. Su última caída no fue culpa suya, sino que se debió a un problema técnico con la moto. Durante los últimos años ha entrenado una barbaridad, han sido muchas horas y km.