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Hace seis décadas la entonces princesa Sofía de Grecia se casaba con el heredero al trono español, y en 1975 se convertía en reina de España. Hija, esposa y madre de rey, Sofía de Grecia cumple hoy 84 años. La profesionalidad ha sido el rasgo más destacado de su reinado, pero más allá de su papel oficial, la reina también ha llamado la atención por su manera de interpretar las tendencias de cada época y por la importancia que ha dado a las joyas a la hora de crear un estilo propio.
Lejos de apostar por la austeridad, doña Sofía siempre ha dejado ver su gusto por las perlas, diamantes y piedras preciosas, y por combinar tantas joyas como sea posible. Sus collares superpuestos y sus muñecas cargadas de pulseras son dos de sus señas de identidad. Aprovechamos su 84 cumpleaños para sumergirnos en su joyero y rescatar cuáles son las joyas favoritas de la reina Sofía:
El colgante de rubí de la reina Federica
Esta excepcional pieza es una de las favoritas de la reina Sofía para las grandes ocasiones. Pudimos vérsela para la última gran boda de su familia que se celebró en Atenas, la de Philippos de Grecia y Nina Flohr. El colgante de rubí cabujón es una pieza muy especial, que se puede usar como colgante o como broche, y era una de las piezas que más usaba la reina Federica. Colgado siempre de un collar de perlas, lo usó para algunos de los momentos más importantes, como el bautizo de su hijo Constantino o los bautizos de sus nietos mayores.
Doña Sofía eligió el colgante de rubí cabujón para uno de los días más importantes de su vida, la proclamación de su hijo como rey de España en 2014.
La tiara prusiana
Realizada en platino y diamantes, esta diadema de estilo neoclásico e inspiración griega guarda un importante valor sentimental para la reina. Fue la tiara que el káiser Guillermo regaló a su hija, la emperatriz Victoria Augusta, abuela materna de doña Sofía. Después pasó a manos de su madre, la reina Federica, y doña Sofía la lució en su boda en Atenas con don Juan Carlos de Borbón.
Aunque ninguna de sus dos hijas la escogieron para sus bodas, su nuera, la reina Letizia, sí decidió lucirla para su enlace con el príncipe Felipe en mayo de 2004. Una pieza que seguramente formará parte del lote de joyas que heredará la princesa Leonor, o incluso la escogida por ella para debutar con tiara cuando celebre su 18 cumpleaños en 2023.
La tiara-collar de rubíes
Uno de los regalos que doña Sofía recibió por su boda y que forma parte de su colección personal es también una de las joyas más apreciadas por la reina emérita. Se trata de una exclusiva pieza de Van Cleef & Arpels elaborada con rubíes de Birmania y diamantes que le regaló el armador griego Stavros Niarchos. Su peculiaridad es que puede utilizarse como collar, tiara o incluso collar doble.
En la misa que tuvo lugar tras la proclamación como rey de Juan Carlos I, en 1975, la utilizó como collar, y en 2009, cuando Carla Bruni y Nicolás Sarkozy visitaron España, la lució en su versión de tiara y collar.
El broche de perla de 'La Chata'
A menudo, la reina Sofía ha adornado sus looks con broches y alfileres. Uno de los más especiales es el que lució como adorno del traje azul que escogió para la boda de la infanta Elena en Sevilla en 1995. La pieza, que pertenece al lote de joyas de pasar y que ahora está en poder de la reina Letizia, es un broche con perla gris rodeado de diamantes que perteneció a la infanta Isabel La Chata y fue un regalo del conde de Barcelona a su hijo Juan Carlos.
En la boda de la infanta Elena, la reina Sofía prescindió de la perla con forma de lágrima que cuelga del broche, eligiendo su versión más sencilla. Sin embargo, en la Pascua Militar de 2022, la reina Letizia sí lució la joya al completo.
Las pulseras gemelas
En ocasiones especiales doña Sofía ha recurrido a los espectaculares pulseras gemelas, cuya historia está a la altura de las pulseras. Su punto de partida fue una corona de Cartier que Alfonso XIII le regaló a Victoria Eugenia por su boda. Ya en el exilio, Victoria Eugenia mandaría desmontar la corona, a la que no iba a dar mucho uso, para realizar dos pulseras de diamantes iguales que se terminarían bautizando como las pulseras gemelas.
Entre otras ocasiones, la reina Sofía las lució en la boda del príncipe Federico de Dinamarca y Mary Donaldson y también se las pudimos ver en 2006 en una visita oficial a París.
