Trepamos el árbol genealógico de la reina Sofía: prima política de Carolina de Mónaco, sobrina segunda del duque de Edimburgo...

La madre de Felipe VI es la única reina consorte en activo que puede presumir de ser hija de reyes y estar emparentada desde la cuna con todas las familias reales europeas.

Visita oficial de la reina Isabel II y el duque de Edimburgo a Madrid en 1988.

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El 14 de mayo de 1962 el mundo asistió a un espectáculo que tal vez jamás vuelva a repetirse. El príncipe Juan Carlos, nieto de Alfonso XIII e hijo del pretendiente al trono de España, se casó con la princesa Sofía, hija de los reyes de Grecia.

La boda emparentó así a dos de las principales familias reales europeas y otorgó a la futura reina de España una característica que la hace única entre todas las actuales consortes: solo ella nació siendo princesa, algo que únicamente tenía en común con su cuñada Ana María de Grecia (la esposa de Constantino de Grecia es hermana de Margarita II de Dinamarca) y que la distingue de otras reinas consortes en activo como Silvia de Suecia, Sonia de Noruega, Matilde y Paola de Bélgica, doña Letizia, Máxima de Holanda y el resto de los consortes de una corte como la europea en la que domina la norma de emparentarse con plebeyos como Daniel de Suecia, Mette Marit de Noruega o Kate Middleton.

Doña Sofía con reina Sofía los reyes de Bélgica Alberto y Paola en la boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson celebrada en Copenhague en 2004.

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Ser hija de los reyes Pablo y Federica de Grecia hizo además que la reina Sofía, y por añadidura su hijo Felipe VI, pueda llamar primos a todos los soberanos europeos. Del príncipe Juan Adan II de Liechenstein a Alberto II de Mónaco, todos tienen algún ascendiente en común con doña Sofía. Eso incluye también a su marido, don Juan Carlos, que como ella desciende de la reina Victoria de Reino Unido: Victoria Eugenia de Battenberg, abuela paterna del rey emérito, era nieta de la monarca británica al igual que el bisabuelo de doña Sofía, el káiser Guillermo II, último emperador de Alemania y abuelo materno de la reina Federica.

Los padres de Felipe VI son por tanto primos terceros entre sí, el mismo grado de parentesco que tiene doña Sofía con la actual monarca de Reino Unido, Isabel II, así como con los reyes Carlos XVI Gustavo de Suecia, Margarita II de Dinamarca y el que antes que don Juan Carlos fuera su pretendiente, Harald V de Noruega.

El rey Juan Carlos y doña Sofía con los reyes Harald y Sonia Noruega en Windsor en 2002. La foto está tomada tras asistir a la ceremonia de la Orden de la Jarretera en la que Isabel II concedió a Harald el privilegio de ser Caballero de la Jarretera.

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Pero también se entremezclan en las alturas las ramas del árbol genealógico de la reina Sofía con los de los jefes de las únicas dos casas reales que no descienden directamente de la famosa reina Victoria: la belga y la holandesa. Pablo I de Grecia, bisabuelo paterno de doña Sofía y fundador de la actual casa real griega, nació siendo príncipe de Dinamarca como hijo del rey danés Christian IX. Por eso los miembros de la familia real griega nacen con el título de "príncipes de Grecia y Dinamarca", y de ahí también el hecho de que el rey de España y Felipe I de Bélgica compartan una gota de sangre además de nombre: la reina Astrid de Bélgica, abuela del actual monarca belga, era bisnieta de Christian IX de Dinamarca, tatarabuelo paterno de doña Sofía.

Para encontrar el ascendente común entre doña Sofía y Guillermo Alejandro I de Países Bajos hay que acudir a la familia de su madre, la reina Federica. Nacida con el título de princesa de Hannover, la abuela materna de Felipe VI descendía además de esta casa de la nobleza alemana de la familia imperial rusa. Su madre, la princesa Victoria Luisa de Prusia, era tataranieta del zar Pablo I, hijo de la famosa Catalina la Grande y tatarabuelo a su vez de la reina Juliana, abuela del actual rey de Países Bajos. Por lo tanto, doña Sofía y el marido de Máxima de Holanda son primos quintos.

Trepando ahora la rama Hannover, encontramos otro pariente ilustre: doña Sofía es prima carnal del todavía marido de la princesa Carolina de Mónaco, Ernesto de Hannover. En efecto, los dos son nietos del que fuera pretendiente al trono de Hannover como Ernesto Augusto III, padre tanto de la reina Federica como del padre del príncipe Ernesto. Felipe VI y las infantas Elena y Cristina son por lo tanto primos segundos de Alejandra de Hannover, hija pequeña de Carolina de Mónaco.

La reina Sofía con la infanta Elena, Jaime de Marichalar y su primogénito coincidieron con Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover en el bautizo del hijo de Marie-Chantal Miller y Pablo de Grecia, Constantino, celebrado en Londres en 1999.

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También es bastante cercano el parentesco que existe entre doña Sofía y Felipe de Edimburgo. Nacido en la isla de Corfú como príncipe de Grecia y Dinamarca, el consorte de Isabel II fue nieto por parte de padre de Jorge I de Grecia y primo carnal de Pablo I, padre de doña Sofía. El duque de Edimburgo y la reina Sofía son por lo tanto tío y sobrina en segundo grado, lo que a su vez convierte a la madre del rey de España en prima segunda del príncipe Carlos, heredero del trono británico, y a Felipe VI en primo tercero del futuro príncipe de Gales, Guillermo, duque de Cambridge.

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