Clint Eastwood cumple 93 años: sus 10 títulos como actor y director que pasarán a la historia del cine

Clint Eastwood cumple 93 años: sus 10 títulos como actor y director que pasarán a la historia del cine

La carrera del californiano ha estado repleta de películas icónicas que perduran en la memoria colectiva, aunque hay varias que destacan por encima de las demás.

9- El bueno, el feo y el malo
Clint Eastwood en 'El bueno, el feo y el malo'
Cinemanía
9- El bueno, el feo y el malo

Un 31 de mayo de 1930 nació en San Francisco uno de los directores, actores y productores más prolíficos de la historia del cine. Hoy se cumplen 93 años del nacimiento del hombre que no tenía nombre, del entrenador de boxeo que hizo todo para que su pupila triunfase, del fotógrafo que encontró el amor en Iowa... Hoy cumple 93 años el incombustible Clint Eastwood.

Desde su primera aparición en una película, allá por 1955, el cowboy que conquistaba la pantalla con sólo su mirada ha participado en más de 80 cintas, y a pesar de su edad, sigue estando en primera línea. Para conmemorar su inmensa y excelente carrera, repasamos las diez películas que han marcado la trayectoria de un hombre que es historia viva del séptimo arte.

La trilogía del dólar (Sergio Leone, 1964, 1965 y 1966)

Hubo una época donde el western era el género principal dentro de la industria cinematográfica. Directores como John Ford, Howard Hawks, William Wyler o Sam Peckinpah hicieron que la conquista del oeste copara todas las salas de cine. 

A principios de los años sesenta, en Italia, apareció un subgénero del western que conquistó a los espectadores y al propio cine. El conocido como spaghetti western (eran producciones italianas) se asentó con un Sergio Leone que convirtió a Clint Eastwood en una estrella. El público conoció al hombre sin nombre, que apenas hablaba pero que decía mucho, en 1964: 'Por un puñado de dólares' se convirtió en una película capital para comprender no sólo la carrera del propio actor californiano, sino también la del propio cine.

Los vaqueros venían de una tienda del bulevar Santa Mónica. Las botas, el cinturón y el revólver de su vestuario en Cuero crudo. Y en cuanto a ese poncho que nunca se molestó en lavar, no recuerda si lo compró en Roma, en Madrid o en Almería. Al fin y al cabo, una de las razones por las que Clint le había dado el sí a Por un puñado de dólares (un western dirigido por un italiano, rodado en España y calcado del Yojimbo de Kurosawa) era hacer turismo. El auténtico precio de aquel look fue la obligación de custodiar las prendas (en los páramos del desierto de Tabernas y de Salas de los Infantes no había manera de reponerlas) mientras sufría a un Sergio Leone cuyo conocimiento del inglés era aún menor que su cuidado por sus actores.
Clint Eastwood en 'La muerte tenía un precio' (1965)
Cinemanía

El cowboy rubio de ojos azules volvió a demostrar que el lejano oeste no era propiedad de nadie, sino de todos, en dos secuelas que conformaron una de las trilogías más importantes de la historia: en 1965 llegó 'La muerte tenía un precio', mientras que al año siguiente, el forastero fue participe del duelo de pistoleros más célebre en 'El bueno, el feo y el malo'. El hombre ya tenía nombre, y se llamaba Clint Eastwood.

'Harry el sucio' (Don Siegel, 1971)

Cinco años después de su trilogía con Leone, Clint Eastwood encarnó a otro de los personajes más míticos de su carrera. Los intentos de Harry Callahan para atrapar 'Scorpio' afianzaron la carrera del de San Francisco en la que suponía su tercera colaboración con Don Siegel.

El público adoró Harry el Sucio. La película había costado cuatro millones, y al poco tiempo ya había recaudado 36. ¿Cómo no amarla? En los cinco primeros minutos, hemos visto uno de los asesinatos mejor filmados de la historia al ritmo de la banda sonora de Lalo Schifrin y Harry ya le ha vacilado al alcalde, a sus superiores, y ha evitado (a tiros, por supuesto), un atraco mientras se come un perrito caliente y promociona el celebérrimo revólver M29 (diseñado para disparar cartuchos del tipo 44 Magnum) en uno de los emplazamientos publicitarios más exitosos de la historia: antes del filme, Smith & Wesson era incapaz de vender aquellos pistolones; tras el estreno, no eran capaces de producir para abastecer la demanda del mercado. Los fans se aprendieron aquel diálogo de memoria: “Sé lo que estás pensando, si disparé las seis balas o solo cinco. La verdad es que yo también he perdido la cuenta, pero siendo este un Magnum 44, el mejor revólver del mundo, capaz de volarte los sesos de un tiro… ¿No crees que debieras pensar que eres afortunado? ¿Verdad que sí, vago?”.
Clint Eastwood como Harry Callahan en 'Harry el Sucio' (1971)
Cinemanía

Eastwood y el director, también californiano, rodaron hasta cinco películas juntos (a 'Harry el sucio' le habían precedido 'La jungla humana' (1968) y 'El seductor' (1971) y su binomio fue capital para entender la carrera de ambos cineastas.

'La fuga de Alcatraz' (Don Siegel, 1979)

La carrera de Clint Eastwood es la historia de los Estados Unidos, desde que eran apenas unas colonias que intentaban expandirse hasta la actualidad, de la ha relatado sus lacras como la guerra o el racismo. Además, el californiano también ha llevado a la gran pantalla hechos concretos que han marcado al país de las barras y las estrellas.

La última colaboración entre Eastwood y Siegel (y la antepenúltima película del director) llegó en 1979, en la que relataban uno de los hechos más famosos de la historia de los Estados Unidos. El cowboy encarnó a Frank Morris, una de las tres personas (reales) que consiguieron escapar de la fortaleza inexpugnable de la cárcel de San Francisco, ciudad natal del actor.

'Sin perdón' (Clint Eastwood, 1992)

Eastwood ya había dirigido quince películas cuando en 1992 rodó el último gran western crepuscular que ha llegado a las salas de cine. El californiano se despedía del lejano oeste con la que el director consiguió, con casi 40 años de carrera, llegar a la gala de los Oscar.

Como ocurre con los espirituosos que se trasiegan los habitantes de Big Whiskey, tuvieron que pasar décadas de depuración hasta que Clint Eastwood fue capaz de conseguir destilar una narrativa tan sobria como la del Hollywood clásico y filmar el western crepuscular definitivo. La frase: “He matado hombres. He matado mujeres y niños. He matado cualquier cosa que tuviera vida y se moviera. Y hoy he venido a matarte a ti, Little Bill”. William Munny, autodefiniéndose. R. R.S.
Clint Eastwood protagonizó y dirigió 'Sin Perdón' en 1992
Cinemanía

'Sin Perdón', que consiguió cuatro estatuillas (entre ellas a mejor película y a mejor director), cerró el ciclo del oeste para el cowboy: Eastwood llegó a Hollywood como un forajido y cómo uno se consagró. La cinta supuso el fin del oeste tanto para el propio director como para la industria del cine.

'Los puentes de Madison' (Clint Eastwood, 1995)

Tras años después de dejar las tierras áridas, Eastwood se dirigió hacia Iowa con la misión de fotografiar sus puentes. El director cambiaba completamente de registro y los espectadores pudieron cómo el forajido se convertía en un romántico retratista del condado de Madison, donde se enamoraba completamente de Meryl Streep.

Un hombre aguanta bajo la lluvia la mirada a una mujer que lo observa desde dentro de un coche. Segundos más tarde, ella agarra la manilla de la puerta del vehículo, indecisa entre si abrir y correr hacia la vida que anhela, o conformarse con la que tiene. Entre las páginas de un diario, las palabras de Robert James Waller y los acordes de Lennie Niehaus, Eastwood enfundó el revólver y trascendió junto a Meryl Streep el drama romántico con el affaire entre el fotógrafo Robert Kincaid y la ama de casa Francesca Johnson, un amor tardío de silencios que gritan, pasiones irrefrenables y nostalgia contenida en el puente Roseman.     J. Z.
Meryl Streep y Clint Eastwood en 'Los puentes de Madison' (1995)
Cinemanía

Bajo la lluvia, Eastwood demostró que no sólo sabía interpretar a tipos duros y a pistoleros, sino que también era un maestro del drama romántico. La cinta fue un éxito en taquilla y afianzó el talento del californiano detrás de las cámaras. 'Los puentes de Madison' se convirtió en la película más taquillera del director en aquel momento.

'Mystic River' (Clint Eastwood, 2003)

A mediados de la década de los 2000, Clint Eastwood se convirtió en uno de los principales directores de la industria, gracias a una sucesión de películas que moldearon la historia reciente del cine. Todo comenzó en 2003, con la adaptación de la novela de Dennis Lehane, y en la que el de San Francisco se adentró en el drama más profundo.

Con un reparto estelar, entre los que se encontraban Sean Penn, Kevin Bacon y Tim Robbins, entre otros, Eastwood retrató cómo los traumas de la adolescencia pueden marcar una vida entera. 'Mystic River' fue la demostración de que Clint Eastwood era un director que podía hacer una película perfecta en cualquier género.

'Million Dollar Baby' (Clint Eastwood, 2004)

Si 'Mystic River' consolidó a Eastwood, al año siguiente el californiano ofreció al público de las salas una de sus obras maestras. Con Hillary Swank y Morgan Freeman acompañándolo delante de las cámaras, el director realizó la película más prolífica de su carrera.

La tercera mejor película de lo que llevamos de siglo XXI según los críticos neoyorquinos. El segundo doble Oscar para Clint Eastwood (mejor película y mejor dirección), que la dirigió tras arrebatársela a Paul Haggis, su guionista. El filme también pasará a la historia como aquel con el que Hilary Swank sucumbió a la maldición del Oscar… y cayó en el olvido.
Personaje rompedor: Maggie, la primera boxeadora con Oscar. I. C.
Clint Eastwood y Hillary Swank en 'MIllion Dollar Baby' (2004)
Cinemanía

'Million Dollar Baby' retrataba la dureza del camino y la tragedia del destino en un relato de boxeo que conmovió a medio mundo y con el que Eastwood consiguió su tercer y cuarto Oscar (de nuevo a mejor película y a mejor director). 

Iwo Jima, desde dos perspectivas (Clint Eastwood, 2006)

Después de encarnar a Frankie Dunn, Clint Eastwood se tomó unos meses de descanso (tenía, por aquel entonces, 75 años) pero en 2006 volvió por partida doble: ese año, en el 40 aniversario de 'El bueno, el feo y el malo', el californiano estrenó dos auténticas obras cumbre en su carrera que relataban el horror de la Segunda Guerra Mundial.

La mejor del díptico de Eastwood sobre la Segunda Guerra Mundial. Todos los matices ausentes en Banderas de nuestros padres cobran vida aquí en el fragor de la batalla, la humanidad salta de las trincheras y de los búnqueres japoneses con una proximidad pasmosa. Retazos del cine de William A. Wellman y de Anthony Mann, los mejores y más atinados relatores de ese conflicto, se atisban en el trazo de los personajes, los bombazos, la atrocidad y el sufrimiento. En el plano detalle de unos ojos rasgados, el artista lo cuenta todo.   T. V.
Fotograma de 'Cartas desde Iwo Jima' (2006)
Cinemanía

'Banderas de nuestros padres' y 'Cartas desde Iwo Jima' conforman la bilogía del director sobre la cruda batalla en la isla japonesa, una desde la perspectiva estadounidense y la otra desde el punto de vista nipón. El díptico del director sobre el sangriento volvió a evidenciar que Clint Eastwood ya era uno de los mejores de la historia. Volvió a estar nominado a dos Oscar, de nuevo a mejor película y mejor director.

'Gran Torino' (Clint Eastwood, 2008)

En 2008 volvió a dirigir dos cintas, aunque la destacó fue 'Gran Torino', (la otra fue 'El intercambio', con Angelina Jolie) que relata el racismo intrínseco en los Estados Unidos y que en la película es reflejado en el personaje del californiano. El inolvidable Walt Kowalski, con valores tan conservadores como los que el propio director ha mostrado en la vida real, se convirtió ya en uno de los personajes más míticos del siglo XX.

'Gran Torino' se convirtió en el mayor éxito de Eastwood en las salas por aquel entonces, amasando más de 270 millones de dólares gracias a escenas tan memorables como la secuencia final del tiroteo o la célebre "fuera de mi jardín", frase que dice el mismo Kowalski.

'El francotirador' (Clint Eastwood, 2014)

Seis años después de 'Gran Torino', llegó a las salas de cine el último éxito de Eastwood hasta la fecha. En 'El Francotirador', protagonizada por Bradley Cooper, se narran los horrores de la guerra de Irak desde el punto de vista del soldado más letal del ejército norteamericano.

Se convirtió en la película del director con más recaudación hasta ahora, con casi 550 millones ingresados alrededor de todo el mundo. La cinta recibió seis nominaciones a los premios de la Academia, aunque tan sólo se llevó el galardón por mejor sonido.

Bradley Cooper protagoniza 'El francotirador (American Sniper)'
Bradley Cooper protagonista de 'El francotirador (American Sniper)'
Warner Bros.

Desde 2015 ha dirigido otras cinco películas con diversa acogida, tanto de crítica como de público ('Sully', de 2016, fue un éxito de taquilla, mientras que su última cinta, 'Cry Macho' fue defenestrada). Con 93 años, Clint Eastwood prepara la que será su última producción, que despedirá al cowboy silencioso de los cines.

¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.

Mostrar comentarios