Rachel Weisz nunca se apresuró en su carrera. A los 15 años, la actriz rechazó una oferta temprana para aparecer en una película junto a Richard Gere a favor de tener una vida adolescente normal, según The Guardian. Hasta el día de hoy, ella trata de mantener la distancia; Weisz no está en las redes sociales y se expone muy poco sobre su vida personal. Pero el centro de atención está justo donde estaba destinada a estar: en su carrera.
La actriz británica hizo todo a su propio ritmo, iniciando su carrera en cine y teatro independientes hasta que tuvo su gran oportunidad en "La Momia" (1999) cuando tenía casi 30 años. Pasaría mucho tiempo hasta que sus habilidades le valieran un Oscar y un Globo de Oro, ambos por su interpretación de una activista apasionada en "The Constant Gardner" (2005). Y aunque es muy raro verla en pantalla, casi siempre hace algo bueno. Checa su antes y después.
Hija de refugiados judíos
Rachel Weisz se crió en el prestigioso suburbio de Hampstead Garden en Londres, pero sus orígenes se remontan a Europa Central. Según 'The Jewish Chronicle', George Weisz provenía de Hungría, mientras que Edith Ruth Weisz era originaria de Austria, ambos judíos cuyas familias se mudaron al Reino Unido justo antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial. A pesar de que a menudo se la llama "rosa inglesa", Rachel siempre se sintió un poco diferente de sus compañeros.
George Weisz era un inventor médico y Edith Ruth una psicoterapeuta que compartía el interés por las artes. Ellos alentaron a Rachel y a su hermana, Minnie, a participar en debates familiares para agudizar su sentido crítico: "Son muy obstinados y siempre alentaron el debate en casa. Otras personas podrían pensar que era una discusión, pero siempre estamos involucrados en algún tipo de discusión sobre todo, y todos éramos muy apasionados".
Rachel encontró cierto éxito como modelo joven, apareciendo en la revista británica 'Harpers & Queen' cuando tenía 14 años. Pero en general, ¡ella vivió una vida adolescente normal!
Estudió la universidad
Los padres de Rachel Weisz querían que siguiera una carrera en leyes (¿recuerdas esos debates en casa?), pero ella optó por un título en inglés. Weisz no fue una estudiante particularmente buena durante la mayor parte de su adolescencia, lo que provocó que la expulsaran de la escuela privada a la que asistía, según The New York Times. "No estaba prestando atención en absoluto y no era deferente", dijo Weisz. Ante la posibilidad de no ser aceptada en buenas universidades, se esforzó mucho en su último año y mejoró sus calificaciones lo suficiente como para conseguir un lugar en la Universidad de Cambridge.
Fue durante su tiempo como estudiante de inglés en la universidad que Weisz comenzó a actuar. Cofundó una compañía de teatro, 'Talking Tongues', para alimentar su nueva pasión. "No había sido la luz brillante, pero todavía estaba ardiendo por seguir esta profesión. Y luego, con Talking Tongues, se hizo elplan", dijo Weisz en 2006. Después de que el grupo ganara el premio estudiantil en el Festival Fringe de Edimburgo, Weisz comenzó a obtener papeles en televisión, cine y teatro.
Hizo su debut cinematográfico en "Dirty Something" de la BBC en 1992 y en 1993 compartió la pantalla con Ewan McGregor en el drama de época de la BBC "Scarlet and Black". Y eran talentosa, que no pasó mucho tiempo antes de que comenzara a recibir reconocimiento.
Del teatro, ¡al éxito!
1994 fue un gran año para Rachel Weisz. Protagonizó su primera película no hecha para la televisión, "Death Machine", y ganó un premio del Círculo de Críticos de Teatro por su papel en la reposición de 1994 de "Design for Living" de Noël Coward, lo que la situó firmemente en el mapa. Dos años más tarde, compartía pantalla con Keanu Reeves y Morgan Freeman en el thriller de ciencia ficción "Reacción en cadena", y era dirigida por el emblemático Bernardo Bertolucci en "Belleza robada", la película revelación de Liv Tyler.
Sin embargo, Weisz saltó al estrellato cuando consiguió el papel de la egiptóloga inglesa Evelyn Carnahan junto a Brendan Fraser en "La momia" (1999). La película no ocupa un lugar muy alto en la lista de grandes películas de la crítica, y Variety criticó al director Stephen Sommers por las "amplias e indisciplinadas interpretaciones de los actores". Pero "La momia" fue un tesoro de taquilla que recaudó unos 416 millones de dólares en todo el mundo, ¡más de cinco veces su presupuesto de 80 millones! El éxito de la película dio lugar a una secuela, "La momia vuelve", en 2001, que recaudó 433 millones de dólares en todo el mundo.
2001 fue también el año en que Weisz conoció al cineasta Darren Aronofsky, iniciando una relación que la llevó a recoger sus cosas y mudarse a Estados Unidos en 2002. Tuvieron un hijo, Henry, en 2006, un año después de que la pareja anunciara su compromiso. Sin embargo, nunca llegaron a casarse y se separaron oficialmente en 2010, según People.
Gozando de la fama
Rachel Weisz ya tenía éxito, pero "The Constant Gardener", en 2005, le valió un puesto definitivo en Hollywood. Interpretó a Tessa, la malograda esposa de un diplomático británico en Kenia, interpretado por Ralph Fiennes. The Guardian consideró que las interpretaciones de Weisz y Fiennes eran "excelentes, quizá las mejores de sus carreras", así que no es de extrañar que Weisz se llevara a casa tanto el Oscar como el Globo de Oro a la mejor actriz de reparto.
Weisz sabía que este papel podía cambiar el rumbo de su carrera. Tanto es así que viajó a Londres para conocer en persona a su director, Fernando Meirelles, y siguió su encuentro con cartas personales.
Los siguientes proyectos de Weisz se volvieron más complejos y ambiciosos, como "The Fountain", un largometraje surrealista escrito y dirigido por Darren Aronofsky, que entonces era el prometido de Weisz, y el premiado drama histórico de Alejandro Amenábar "Agora" en 2009.
El amor y la familia
Después de su estruendoso éxito con "El jardinero fiel", Rachel Weisz siguió perfeccionando sus habilidades, al tiempo que protagonizaba éxitos comerciales. En 2011, protagonizó "The Deep Blue Sea" junto a Tom Hiddleston, una película que se situó entre las 10 mejores del año según The New York Times y Los Angeles Times. Por su interpretación, Weisz ganó los premios del Círculo de Críticos de Cine de Nueva York y de la Asociación de Críticos de Cine de Toronto a la mejor actriz y fue reconocida con una nominación al Globo de Oro.
Weisz también ha sido reconocida por su trabajo en el escenario. En 2010, ganó el premio Laurence Olivier a la mejor actriz de teatro por su interpretación de Blanche DuBois en la reposición de Rob Ashford de "Un tranvía llamado deseo".
Ese fue también el año en el que conoció a Daniel Craig, con quien se casó en una "ceremonia secreta" en la que participaron su hijo, la hija de éste y otros dos invitados en junio de 2011. En 2011, Weisz también se nacionalizó estadounidense, aunque mantuvo su ciudadanía británica. Años después, Weisz y Craig le dieron la bienvenida a su primer hijo juntos, una hija, de quien se desconoce su nombre.
Una vida en la taquilla
Si bien la mayoría recuerda más su trabajo en "La momia", Rachel ha tenido muchos otros papeles notables. Además de aparecer en "The Mercy", "Disobedience" y "My Cousin Rachel", que se estrenaron en 2017, también emocionó al público en "The Favourite" de 2018.
Más allá de eso, en 2019 se anunció que Weisz interpretaría a la fallecida Elizabeth Taylor en una película biográfica llamada "Una relación especial", de The Hollywood Reporter. El proyecto cubriría la transformación de Taylor de una figura en pantalla a una activista dedicada.
Weisz también apareció junto a Scarlett Johansson en la película "Black Widow" como Melina Vostokoff, la 'madre' de Natasha y Yelena. ¿La viste?
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